Parte 12

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La locura es algo que el ser humano ve cómo algo malo,sin embargo a veces la locura puede ser lo que te permite ver el egoísmo y la verdad sobre el mundo.

Lan Wangji lo supo desde que conoció a Wei Wuxian,el joven se había ganado su corazón por lo que de inmediato lo acepto con todas sus virtudes y defectos,algunos decían que el amor de ambos era tan grande que nada ni nadie podría tener uno igual,tenían razón.

Su amor era tan grande que ambos vivían en su mundo,ambos estaban cegados por aquello y sin embargo,Lan Wangji no pudo evitar que Wei Wuxian cayera aún más en la locura que ya lo seguía.

Tan solo un día dijo que le era infiel con su mejor amiga,luego se creo una historia en la que incluía a sus hermanos y a todos sus conocidos.Por supuesto que esto asustaba al Lan pero igual intentaba hablar con su esposo.

Ahora se encontraba encerrado y encadenado en la habitación,mientras que el melodioso canto de su amado sonaba del otro lado de la puerta,si bien todo mundo estaría asustado por aquella situación para Lan Wangji era más que normal aquello.

Desde su matrimonio Wei Wuxian había creado diferentes fantasías en su mente y cómo siempre terminaba encerrado y encadenado.

Solo que está vez Wei Wuxian no solo estaba delirando,si no que ahora el bebé que cargaba era real y no un simple muñeco de trapos cómo las veces anteriores,por esto fue que siempre intentaba preguntar por el pequeño,aunque al final la respuesta era la misma...

-está bien,¿ahora piensas decirme la verdad de tu engaño?- esa pregunta ya lo había cansado.

Desde la muerte de aquella mujer solo podía decirle que no le era infiel aunque siempre era en vano.

Solo que ahora la respuesta fue otra...

-te engañe,pero ahora se que Wei Ying es el más importante para mi- mirando al menor sonrió ligeramente antes de sentir el peso del contrario en su estómago.

-ahora que me dijiste la verdad,¿te arrepientes?- un asentimiento de su parte fue suficiente para que la cercanía entre ambos fuera menor y por lo tanto la respiración de ambos chocará,al final sus brazos cayeron sobre la cama...Wei Wuxian por fin lo había soltado.

Antes de que sucediera algo tomo los hombros del chico para besar sus labios dejándolo paralizado para aprovechar la situación levantándose.

-ire a terminar el trabajo,prepara a nuestro hijo para ir a comer- dijo mirando a su esposo quien sonriendo se fue de inmediato a cumplir la orden de su amado.

Tenía que lavarse a si mismo o si lo veían está vez le quitarían a su familia y no lo permitiría, después de todo no tiro a todas las víctimas de su esposo por nada.

Ahora debía prepararse para la próxima fantasías del menor,o está vez podría poner en peligro al bebé que su esposo había conseguido.

Una DisculpaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora