Adorado 《Yeongyu》

Parte 3

Tuve libre alrededor de una hora y treinta minutos entre clases al siguiente día., que fue realmente muy corto para ir todo el camino a casa para pasar el rato, y no deseaba estudiar en la librería ese día. Por lo que terminé mandando mensajes a mis amigos, Yuna, Hyunjin y Taehyun, para encontrarnos en la cafetería que está cerca de Starbucks.

―¿Te han dado dulces y flores?― preguntó Taehyun, empujando sus lentes de regreso a su nariz.

―Flor― Tomé un sorbo de mi café con leche ―Fue un solo clavel amarilla.

―Hmm― Yuna golpeó una uña recién pintada de color rojo y bien cuidada en su taza de café. Hoy se había teñido el pelo de rubio borgoña. No es como si fuera rubia como en la secundaria.

Conocía a mis tres amigos hace años. Antes, cuando éramos niños habíamos formado una especie de pandilla. Una friki, y aún lo éramos. Hyunjin y Yuna, eran a los que les gustaba vestir gótico, habían trabajado en ser novios en la secundaria. Y ellos todavía seguían juntos. Yo imaginaba que siempre sería así. Yo era el gay, un artista, aunque en realidad no había hecho nada de arte en un par de años. Por lo que yo podía decir, Taehyun no tenía preferencias por algún género. A él le gustaba la ciencia y la ciencia ficción. Él estaba en lo de Star Wars y Star Trek. Y tal vez en Battle Star Galactica.

―¿Qué significa: hmm?― pregunté.

Ella se encogió de hombros. ―Estoy tratando de pensar quien podría ser tu admirador, él sabe algo sobre ti.

―Lo sé.

―Podría ser un golpe de suerte― dijo Hyunjin ―A él particularmente no le gusta o disgusta las trufas. Y a muchos chicos les gusta el amarillo.

―Bueno, sí, creo que es verdad― Estuvo de acuerdo Yuna. Ella miró a Taehyun.

―¿Qué sobre ti?

―¿Qué sobre mí?― Acababa de dar un gran sorbo de su bebida y ahora tenía un anillo de espuma alrededor de la boca.

―Tú tienes...― Ella apuntó a su boca ―Tú podrías estar enamorado en secreto de Beomgyu.

―¿Yo?― chilló, haciendo caso omiso de sus intentos de señalar la espuma en su cara. ―¿Por qué yo?

―Oh, por amor de Dios― Cogí una servilleta y la empujé hacia él ―Límpiate la espuma de tu boca.

Taehyun lo hizo y luego me miró. ―Ni siquiera me gusta Beomgyu tanto como persona, mucho menos como algo más.

―Gracias a Dios por eso― dije.

―Creo que se verían bien juntos― dijo Yuna, que le valió una mirada de los dos. Ella agitó su mano ―Pero ya que no cooperas en eso, um, ¿qué hay de tu compañero de cuarto? ¿Yeonjun? Él es caliente.

Resoplé. ―No hay forma de que sea él.

―¿Por qué no?― preguntó ella.

―Porque, él no va por los bajos, frikis escuálidos. He visto a los chicos de sus citas. Además, estaba tan perplejo como yo acerca de quién era.

Taehyun agitó su cabeza. ―No compro eso de solo un golpe de suerte. Tal vez el amarillo, pero ¿el clavel? La mayoría de las personas elegirían una rosa si él no conoce a la persona tan bien.

Una camarera se acercó a su mesa con un plato que tenía un pequeño pastel de chocolate en forma de chocolate. ―¿Cuál de ustedes es Beomgyu?

―¿Huh?, um, yo.

Ella colocó el plato con el pastel en frente mío. ―Alguien deseaba que le diera esto a usted.

―¿Qué? ¿Quién?