Generación tras generación la reconocida familia de hechiceros Gojo tuvo como una de sus funciones cuidar de una maldición que décadas atrás había sido sellada. Satoru un pequeño niño travieso liberará por accidente a esta entidad y este será el com...
Dicen que toda oscuridad tiene su luz , que cada monstruo tiene un corazón , que todos tenemos una debilidad , eso también incluye al Gran Rey de las maldiciones Sukuna Ryomen.
Una noche en su tétrica mansión , solo se escuchaban los casi inaudibles pasos por los pasillos y luego como alguien tocaba la puerta de la habitación del gran amo de la mansión.
Sukuna despertó por los golpes en su puerta , con ganas de asesinar a quien se allá atrevido a despertarlo. Abrió la puerta y sus facciones se relajaron al mirar abajo y ver qué se trataba de su pequeña hija , Sakura.
— ¿ Qué quieres mocosa ? — dijo el mayor con su tono de siempre
— Papá , tuve una pesadilla , puedo dormir contigo — ante estás palabras la maldición soltó un suspiro de cansancio y con uno de sus brazos la cargo , otra la colocó en la espalda de la pequeña sobándole la zona con suavidad y con la otra cerró la puerta.
Sukuna se acostó en su cama y sobre él a su pequeña , la abrazó con sus cuartos brazos acariciándola para que se durmiera , la menor por su parte se acurrucó en el pecho de su padre , desapareciendo momentáneamente el miedo de que lo ocurrido en su pesadilla se hiciera realidad.
De repente un pequeño estruendo se escuchó en la mansión. Sukuna abrió sus ojos alarmado y revisó si su hija se había despertado también.
Minutos después su puerta fue golpeada con desesperación , al abrir se encontraba su fiel sirviente Hurahume notoriamente alarmado
— Señor los hechiceros están atacando.
El mayor miró a su hija la cual se había despertado.
—Que sucede papá– dijo la menor frotando sus ojos.
–Nada– diciendo esto tomo su arma y se dirigió a la puerta – No vallas a salir hasta que te diga– La menor asintió , con esto Sukuna se fue y serró la puerta.
Pasó el tiempo y la pequeña Sakura se quedó encerrada en la habitación por un largo tiempo hasta que escuchó un fuerte estruendo. La pequeña salió corriendo asustada y se detuvo al ver la silueta de su padre.
Al pensar que su padre se enojaría al ver que desobedeció su orden , se acercó sigilosamente a este. Se quedó paralizada al ver lo que sucedía. Era su padre estaba herido y atado con unas sogas con pergaminos. A su alrededor se encontraban unos hechiceros recitando una especie de conjuro.
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–¡Papá!–Grito con dolor la pelirrosa , la gran maldición se quedó petrificada al escuchar el grito. Los hechiceros estaban muy concentrados en su ritual y en mantener retenida a la maldición como para prestarle atención al grito de la menor.
La pequeña intento volver a gritar pero unas manos taparon su boca y se lo impidieron. – Por favor, no grité joven ama– En un segundo el cuerpo de Sukuna explotó , dejando solo sus veinte dedos. Las lágrimas enseguida empezaron a brotar de los ojos de la pelirrosa – Joven ama, debemos irnos– Con eso Hurahume cargo a Sakura y empezó a correr lo más lejos posible. La pequeña le daba pequeños golpes entre llantos y súplicas para que la soltará y la dejara volver con su padre.
Hurahume corrió durante mucho tiempo para alejarse de la mansión, que ahora llacía en llamas. Se detuvo y bajo con cuidado a la pequeña que después de llorar y forcejear por un buen rato se había quedado dormida. La acostó en el pasto y puso un pequeño orbe de cristal a su lado mientras la miraba con tristeza. –Perdóneme , joven ama– dijo con tristeza recordando la indicación que su amo le dejó.
✿~Flashback~✿
Una tarde las dos maldiciones se encontraban observando a la pequeña jugar con sus juguetes en la habitación.
–Hurahume– Llamo Sukuna
– Digame mi Señor – Respondió Hurahume
–Escucha, el mundo se está volviendo cada vez más peligroso y los hechiceros cada vez más fuertes, por eso yo debo protegerla.– Hurahume miró algo sorprendió a su amo, nunca antes lo vio hablar de esa forma
–No creo que pase pero , si los hechiceros llegaran a sellarme , tú serás el encargado de sellar a Sakura y custodiarla hasta que yo regrese.
✿~Fin del Flashback~✿
Hurahume recitó un ritual y el cuerpo de la pequeña se fusionó con la esfera , volviendo a esta de un color rosado.
Los años pasaron y en su camino, Hurahume fue emboscado por un grupo de hechiceros bastante fuertes. El fiel sirviente de Sukuna fue derrotado y sellado. Mientras que la esfera con la pequeña Sakura fue entregada a una de las familias de hechiceros más reconocida , la familia Gojo. Los cuales la mantuvieron segura como una de sus reliquias.
