[]Katsuki Bakugō x Lectora[]
Quien diría que aun que pasen los años, 5 para ser más exactos, aun se tenga un amor tan grande el uno al otro, él, que fue uno de tus amigos, quien a pesar de todo lo que pasó y las decisiones que tomes y tomaras seguir...
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Y ahí estaba; el héroe N°2 observando a sus pequeños bebes tomar una profunda siesta, tomaría esa oportunidad para ir por la leche que habías dejado y así poder prepararla para cuando tuviera que dárselas. Sin embargo, tan pronto como salió de la habitación escucho un llanto inundar el lugar de donde hace un momento se encontraba, por lo que entro con prisa para ver de quien era aquel lloriqueo.
—Hey, Hana, ¿Qué sucede, princesa?
Cuestiono, obviamente recibir una respuesta. Tomo a la pequeña con cuidado y salió de la habitación con intención de no despertar a su otro hijo, bajo con cuidado a la cocina junto a la bebé en brazos y comenzó a buscar la leche de los pequeños con el pequeño obstáculo que era el sostener aquel delicado cuerpo en una de sus manos, escuchando el constante lloriqueo cerca de su oído.
—Ya, ya, pronto estará la comida, cariño— Murmuró en un intento fallido por calmarla, colocó los biberones en una hoya con agua caliente y espero con leve entusiasmo a que estos estuvieran listos. Al paso de un rato apago la estufa y tomo los biberones, checando primero la temperatura de la leche contra su piel de uno por uno. Tomó uno de los biberones, no sin antes asegurarse nuevamente de que la bebida fuera adecuada para su niña y lo acercó a los pequeños labios de la misma recibiendo un total rechazo por parte del infante; ella no quería comer —¿No quieres?, maldición...
