Mis vidas contigo (Beefleaf Week 2022)

3.- Amigos de la infancia

He Xuan recordaba al primer amigo que tuvo luego de haberse mudado a esta ciudad: era un niño muy alegre al que le gustaba vestirse de niña algunas veces. Si bien eso le parecía raro tampoco era demasiado descabellado y por supuesto que no fue un impedimento para que se volvieran amigos. Hubo dos cosas que le parecieron bastante curiosas: la primera, que ambos cumplieran años el mismo día. A menudo solían bromear diciendo que habían sido separados al nacer, lo que le hacía gracia a su hermana pero no le gustaba tanto al hermano de su amigo. La segunda cosa, y que según su joven imaginación daba razón a su "teoría", era que casualmente compartían el mismo nombre.

— Me llamo Shi QingXuan— se había presentado el niño con una sonrisa.

— Mi nombre es He Xuan.

— ¡Que nombre tan bonito!

— No grites. 

Por supuesto, He Xuan se acostumbró a la presencia ruidosa de Shi QingXuan, y ambos fueron buenos amigos hasta que el chico se mudó. ¿Por qué estaba pensando en eso? Porque justo ahora, en la cafetería de su universidad acababa de ver a su amigo, y fue cuestión de tiempo para que He Xuan lo siguiera solo para asegurarse. Tal como recordaba, Shi QingXuan tenía un cabello largo que llevaba recogido en una coleta alta sujetado con una horquilla, su adorno favorito, usaba una blusa blanca, una falda larga hasta la rodilla color menta y unas sandalias. He Xuan tuvo que admitir que se veía hermoso de ese modo.

Y entonces, Shi QingXuan volteó hacia él fijando sus preciosos ojos claros en él. Su rostro se iluminó con una sonrisa y al poco tiempo corrió en su dirección dándole un abrazo cuando estuvo lo suficientemente cerca.

— ¡He-xiong!— exclamó feliz—. No creí que fuera a verte aquí. ¡Me alegro mucho!

— A mi también me alegra verte— dijo He Xuan, contento de que su amigo aún lo recordará.

— Tenemos que ponernos al tanto con muchas cosas— dijo Shi QingXuan con emoción. 

— Hay una cafetería cerca de aquí. ¿Qué te parece si vamos allí después de clases?— sugirió He Xuan.

— Me parece bien. Bueno, tengo que irme, debo ir a clase. Me dio gusto verte. 

El día automáticamente acababa de mejorar para He Xuan. Shi QingXuan se despidió de él con un beso en la mejilla y se había ido corriendo. Por primera vez deseó que las clases terminarán pronto.