II

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Pov. YeonJun

-¿Saben lo mucho que los amo, cierto?

Escuché la dulce risa de mi omega, sintiendo esas suaves caricias sobre mi cabello.

Cómo amo esto.

Deje un par de besos más en su vientre antes de acercarme hacia su rostro para poderlo besar, moviendo mis labios con suavidad sobre los suyos, en un dulce y tierno beso, sólo así, sin segundas intenciones, solamente queriendo besarlo para también demostrarle através de ello, lo mucho que lo amo.

Soobin te amo.

Una vez nos separamos, él hace un tierno puchero, inconforme por eso.

Es tan precioso.

-Aquí estoy bebé-. Negué rápidamente al darme cuenta de mi error. -Bebés.

Soobin se acomodó mejor luego de eso, suspirando mientras veía su abultado y tierno vientre.

Eso me hace sonreír, se ve tan tierno cada que hace eso.

Aunque conociendo ese tierno puchero, ya se lo que viene.

-¿De verdad no me veo gordo?

Tan precioso.

Negué con suavidad, volviéndome a acercar a sus labios para poder dejar un beso sobre los mismos.

-No eres gordo.
-¿De verdad?
-Mi amor, sólo tienes a nuestros bebés, eso no te hace gordo, al contrario, te hace igual de hermoso que siempre, más con esa tierna pancita tuya que demuestra tu estado.

Su risa siempre será de mis sonidos favoritos.

Dios, lo amo tanto.

-¿Sabes de qué tengo ganas?
-¿De besarnos?-. Fingiré que esa negación no me decepcionó un poco, yo quiero besos. -De pastel de chocolate-. Asintió levemente.

Lo sabía.

Bendito lazo.

-¿Algo más que gusten mis bebés?

Cómo de costumbre, ladea su cabeza mientras piensa antes de negar.

-¡Espera!-. Si ya sabía. -Si hay algo más que queremos, más besos y mimos cuando regreses porfavor.
-Todo eso y más tendrás cariño.

Amo tanto cuando se sonroja, se que lo hizo por mi tono de voz, pero por más que quiera, se que ya no podemos hacer nada.

-Quieto velocista, ya no podemos hacer nada y lo sabes-. Señala su vientre y sí lose, pero diablos, nadie te mando a ser tan atractivo e irresistible.

Mierda.

-Eso no me impedirá manosearte un poco y lo sabes-. Le doy un beso más antes de levantarme para poder ir por su antojo.
-¡Yeon!

Solamente reí y baje para poder irme, esto de los antojos en la noche se había vuelto bastante común desde que estaba embarazado de Wonnie y Susu, así que sí, de alguna forma me acostumbre a tener que salir en las noches o inclusive en las madrugadas con tal de cumplirle sus antojos a mi bebé.

No me molesta, pues es mi omega, además de que se lo mimado y consentido que puede ser, de igual forma no puedo quejarme, yo he contribuido bastante en todos estos años(inclusive desde niños)para que sea así al igual que nuestros cachorros.

Por fortuna cada que salgo solo, ninguna y ningún omega me coquetea, Soobin siempre se asegura de dejarme marcado con su aroma, inclusive me muerde en mi cuello para marcar todavía más su territorio, eso me parece adorable, demasiado.

¿Cómo lidear con el cuarto embarazo de tu omega?(Yeonbin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora