Daze (Oneshot)

The Light in Her Soul

La oscuridad siempre fue mi mejor aliada, ella mantenía mis demonios ocultos no solo de quienes se encontraban a mi alrededor, sino de mí mismo, gracias a eso podía vivir, o por lo menos aparentar que lo hacía.
La música siempre me había ayudado a mantenerme cuerdo y seguir, hasta hoy, decidi salir, a dónde? Lo mismo me pregunto, solo sé que no regresaré hasta encontrar lo que busco. Mi banda no tiene idea de qué sucede conmigo, ellos son mis amigos y sé que quieren ayudarme pero estoy al punto de la desesperación, necesito respirar de nuevo.

La vida que la fama te ofrece es un sin fin de deleites carnales, te ofrece, dinero, poder, alcohol, drogas, mujeres y disfruté de cada uno de ellos, de verdad, lo disfrute. Pero ahora necesito algo más, siento que es momento de encontrar esa parte de mí que está en algún lugar, espero estar conduciendo hacia el lugar correcto.

Luego de recorrer muchos kilometros, me detuve en un lugar solitario, al fondo se divisaban las luces de un condado cercano, a decir verdad cerca de allí había una cabaña que compraron mis padres hace un tiempo a la que me gustaba ir a relajarme, pero no quería ir allí ahora, necesitaba despejarme, recosté mi espalda sobre mi auto e intenté, hallar respuestas, no se si estuve allí cinco minutos o un siglo entero, pero tengo claro que no sirvió para una mierda, necesito algo de alcohol fluyendo por mis venas.
Tomé mi lugar en el auto y emprendí marcha hacia aquel pueblo cercano, me tomó apenas 20 minutos llegar, detuve el auto frente a un antro que me llamaba la atención y sin más demora entré, me senté en la barra y pedí una cerveza, luego otra y otra. Sentí que alguien rozó mi espalda al pasar [Hablas enserio Brian? El lugar esta repleto miles de personas te han rozado al cruzar hacia la pista de baile]
- ¡La pista de baile! Ella se dirigia a la pista de baile, debo saber quien es - algo se activó en mí cuando ella me tocó, apenas pude notar que era una chica por su cabello rizado.
Ya en la pista de baile, muchas mujeres se acercaban y restregaban sus cuerpos contra mí, bajo otras circunstancias les habría hecho caso, pero ahora me consumía la intriga por esa chica, la busqué por todo el sitio pero no dió resultado, me acomodé algo frustrado en una de las mesas mirando hacia la pista de baile, encendí un cigarro y disfruté del humo en mis pulmones, cerraba los ojos sintiendo el efecto de la nicotina actuar en mí, mis ojos estaban entrecerrados y pude notar una borrosa imagen a unos metros de mí, era ella, lo sabía, la contemplé bailar mientras le daba las últimas caladas a mi cigarro, su cabello rizado danzaba al compás que su hermoso cuerpo marcaba, sus ojos estaban cerrados, al parecer disfrutaba lo que hacía, se movía de una manera tan perfecta, era sexy pero sin ser vulgar como las mujeres que se me habian acercado antes, sus piernas parecian talladas por el mas experto escultor, lucian tan bellas sobre ese par de zapatos rojos, su vestido negro que se acomodaba perfecto a su cuerpo, tenía un pequeño cinturon que marcaba su cintura y terminaba en un pequeño moño al costado, observarla era el mayor placer que había podido darme nunca, sin embargo necesitaba acercarme, quería sentir de nuevo esa sensación que me había estremecido hace un rato con su primer roce.

Narra Lu

Esta noche estaba ya lista para dormir, era sábado pero mi semana fue pesada y apenas pude descansar dignamente, asi que era buena idea aprovechar hoy para dormir temprano, cerré los ojos e intenté pero me fué imposible conciliar el sueño algo me inquietaba así que decidí cambiar de planes, agarré el telefono y marqué a una amiga con la que no salia mucho y no lo volveré hacer ya que me dejó botada a mitad de la noche en la disco por irse con su novio. Pero bueno ya estaba aquí ,no perdería la oportunidad de relajar mi cuerpo al ritmo de la música, eso sí que era una terapia para mí, sentía como me liberaba de todo al bailar, amaba hacerlo, sentir el compás de la música marcando el ritmo al moverme, además a quien engaño sé que me veo sexy al hacerlo.

Estaba inmersa en la música y mis movimientos, de pronto sentí unas cálidas manos que me tomaban por la cintura y un cuerpo detrás de mí que empezaba a moverse a mi ritmo, no sentí la necesidad de separarme, me sentía tranquila aunque una sensación algo particular crecía en mi interior a medida que el tiempo pasaba, decidí darme vuelta y encarar al dueño del cuerpo que ha estado acompañandome en la danza, sin romper la conexion de movimientos entre nosotros me giré y quedé frente a un pecho fuerte y bien formado, subí mi mirada despacio, noté su cabello negro que llegaba hasta los hombros, continué contemplando cada parte de su rostro, una seña de barba de un par de días en su mentón, un par de labios delgados pero tan provocativos que era imposible no querer servirse un trago de besos de ellos, su nariz perfecta, pómulos algo marcados y al final fué mi perdición, sus ojos oscuros y profundos captaron toda mi atención, era inexplicable la sensación que tenía adentro, era como si nos estuviesemos buscando, los dos pareciamos cómodos con la conversación que llevaban a cabo nuestras miradas.
Mi mente luego de un rato comenzó a funcionar, necesito saber quíen es, aunque no sé si de verdad quiera hacerlo ya que no se si al saberlo deba alejarme y eso es algo que por alguna extraña razón no quiero hacer.