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Desde que puedo recordar siempre me han gustado los animales, los amo y es doloroso ver cuanto daño podemos hacerles los humanos. Por esa razón desde que me mudé a Corea del Sur siendo una adolescente, decidí que sería veterinaria, hoy en día tengo una clínica junto a Kim NamJoon y Jung Hoseok, ambos son veterinarios como yo.

—Aisha, ¿Este cachorro es el último del día de hoy? —pregunta Hoseok.

—Sí, así es, si quieres puedes atenderlo tú, se parece a Mickey, ¿Verdad? —sonrío un poco. El chico asiente mirándolo.

—Me duele ver como alguien lo atropella y no lo ayuda, sólo dejan que se quede allí tirado para morir —

—Bueno...si esa mujer no lo hubiera traído, hubiese muerto —acaricio al animal que está bajo los efectos de la anestesia— Por personas como ella creo que la humanidad no se ha perdido del todo.

—Lo sé. Si quieres puedes irte, NamJoon y yo nos encargamos.

Recojo mis cosas y me retiro. Me había mudado con mi familia a Corea del Sur cuando era una adolescente, viví en Busan por mucho tiempo y luego me mudé aquí a Seúl, vivía en un departamento muy pequeño, pero gracias a que la clínica le va bien pues he podido comprar uno más grande. Ayer terminé de mufarme, ahora sólo me faltan acomodar las cosas y sacarlas de su caja. El departamento no queda muy lejos de la clínica por lo cual me voy y vengo a pie, me gusta escuchar música mientras camino, es una manera de relajarme.

Voy llegando a casa cuando me encuentro una caja que dice "Llévanos", me acerco más y veo a tres lindos gatitos, los tres lucen de diferentes razas, lo cual me extrañó. No puedo llevarlos a casa en este momento, pienso que hacer mientras los gatitos maullan de una manera muy adorable. El cielo parece cada vez más nublado, busco algo con que cubrirlos para que pasen la noche, mañana si nadie se los ha llevado me los llevaré a la clínica y los pongo en adopción.

Llego a casa dirigiéndome directamente al baño, estoy cansada, hoy tuvimos muchos pacientes, después del baño decido cenar algo ligero y coloco un dorama para ver mientras como. Ya eran las once de la noche cuando decido irme a dormir.

—Aisha...Aisha.

Puedo escuchar una voz llamarme.

—Ellos te necesitan a ti, Aisha. Eres la elegida.

No puedo entender que es lo que quiere esta voz de mí, de repente estoy en una especie de jardín enorme, llevo piesto un vestido de princesa. Al final de este jardín hay una mujer.

—Aisha...ellos dependen de tí, sólo tú puedes salvarlos, confío en tí.

De la nada ella desaparece y mis ojos se abren apareciendo en mi habitación, aún proceso lo que dice el sueño, ¿Quién es esa mujer?, ¿Qué quería de mí?, ¿A quiénes debo salvar? La verdad no entiendo nada, estoy muy confundida, intentando alejar el pensamiento me levanto para comenzar mi día.

Tomo un baño antes de desayunar como siempre, preparo todo para salir y comienzo a caminar hasta la clínica, en el camino veo la caja allí todavía. Los gatitos siguen ahí, sus pequeños ojos brillan cuando me ven, son demasiado adorables, los tomo y me dirijo a la clínica con ellos.

—Buenos días —digo saludando a Lisa, la chica en la recepción.

—Buenos días, doctora Lane.

Voy al consultorio y allí están NamJoon junto a Hoseok.

—Buenos días, chicos —dejo la cajita en la mesa.

—Buenos días, Aisha —NamJoon sonríe dejando ver esos hermosos hoyuelos.

NamJoon no lo sabe pero él me ha gustado desde que lo conocí, ya tiene novia, una chica hermosa y coreana llamada JiSoo, nunca me ha mirado ni una vez, he llegado a pensar que no le gustan las extranjeras.

— ¿Y estos gatitos? —pregunta Hoseok tomando el negro el cual comienza a gruñirle— Creo que no le agrado.

—Los encontré cerca de un árbol camino a casa, pensé que alguien se los llevaría anoche pero no, les haré un chequeo, les colocaré las vacunas correspondientes y los daremos en adopción —tomo la caja para ir a mi consultorio.

Una vez llego allí saco los gatitos y los coloco a cada uno en una de lqs casitas, tomo al atigrado primero revisándolo cuidadosamente. Una vez termino le coloco la vacuna, le dejo comida y agua en su casita a lo que rápidamente come todo. Con una sonriaa en mi rostro tomo al siguiente gatito blanco, éste se acurruca en mi pecho, lo dejo en la mesa para revisarlo y vacunarlo también para despues colocarlo en su casita con comida y agua, de último tomo al negro que pelea un poco pero al final con algo de caricias logro calmarlo para repetir el procedimiento.

Durante el día atiendo a muchos animales bajo la mirada de esos gatitos. Así paso toda una semana, terminé de arreglar el departamento así que estoy feliz por eso, lo malo es que todavía nadie adopta a los gatitos.

—Aisha, no podemos seguir teniéndolos —dice Hoseok algo triste.

— ¿Y si cada uno se lleva uno a casa? —busco la manera de que acepten.

—No puedo, JiSoo es alérgica a los gatos y si le pediré que se mude conmigo no podré tenerlo —asiento ignorando el hecho de que me acaba de revelar el paso que dará en su relación.

—Yo tengo a Mickey y sabes que no se lleva con los gatos —Hoseok hace un puchero. Mis ojos se van a los gatitos una vez más.

"Ellos deben estar contigo"

Escucho esa voz en mi cabeza. Desde que tuve ese sueño, esa voz aparece todo el tiempo diciéndome que los lleve a casa.

—Está bien, me los llevaré, en el departamento ya estoy acomodada, me permiten las mascotas así que puedo hacerlo.

— ¿Estás segura? —pregunta NamJoon.

—Claro, ¿Por qué no?, ¿Qué puede pasar?

—Claro, ¿Por qué no?, ¿Qué puede pasar?

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Cat's Problem [Completada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora