Duskwood. Mi primer caso

Prólogo

De pequeña siempre me decían que era muy lista, con una capacidad de observación y deducción muy superior al resto de niños de mi edad. Mi padre siempre tuvo la certeza de que seguiría sus pasos y que llegaría a ser la mejor detective privada del país, que equivocado estaba, si seguí sus pasos y me convertí en detective privada por supuesto pero, ¿ser la mejor del país? Para nada, hasta ahora sólo he recibido llamadas de abuelas, las cuales únicamente necesitaban mi ayuda para encontrar las llaves o las gafas, las cuales no tardaba ni una hora en encontrar, creo que el único caso al que podría llamar "de verdad", fue una madre que me llamó porque su hijo había perdido a su perrito cuando paseaba con él.

Últimamente me encuentro algo frustrada, no estudie una carrera para dedicarme a encontrar objetos perdidos sino a personas. Por otra parte están mis amigas, las cuales tienen sus vidas bastante encandiladas con trabajos en las que son realmente valoradas y ni hablar del corazón... algunas ya están planeando sus bodas mientras que yo sinceramente no he encontrado a nadie que me llame la atención, alguien excepcional, alguien que ponga mi mundo patas arriba. Hubo alguien que se le acerco, pero como dicen algunos hoy en día: "se nos acabó el amor".

A veces me planteo abandonar esta profesión que tanto me encantaba cuando la compartía con mi padre, con él todo parecía tan fácil, los casos aparecían solos, pero ya llevo un tiempo en el que ya ni las abuelas me llaman, mi segunda opción era entrar en el cuerpo de policía, pero nunca me gustó la idea de ir con un arma y poder matar a alguien aunque fuera parte mi trabajo, sin embargo tengo la extraña sensación de que todo podría cambiar pronto, no sé explicarlo, cómo cuando las ancianas te dicen que está cambiando el tiempo porque les duelen los huesos.