Capitulo 3: Definitivamente algo malo le hice a la vida

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¿Recuerdan el idiota que creí que me seguía? Bien ¿Recuerdan que casi lo castro? Bien. Ahora... ¿ALGUIEN ME PODÍA AVISAR QUE IBA A MI MISMA CLASE?

Algo malo le debo haber hecho a la vida. El idiota, alias James, pero prefiero llamarlo el idiota, mágicamente había llegado antes que yo y adivinen.

¿Adivinaron?

Como el universo me ama (Noten mi sarcasmo) el único lugar libre era a su lado. Osea ¡¿Que?! Me iba a quejar con Dios luego.

Gruñendo me acerque a su lado, lo ignore y tire mi bolso sobre el banco. Este día iba de mal en peor.

-Esto no va a quedar así... -susurro en mi odio haciendo que me estremezca.

Si... Iba a ser un día largo...


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¡Yei! ¡Receso! Por fin. Tome mis cosas, las guarde rápidamente y prácticamente huí de ahí. Entre al lugar abarratado de adolescentes descerebrados . Tome una bandeja y agarre un poco de fideos, una manzana y un jugo.

Me dirigí a mi mesa de siempre donde se encontraba mi leal perro (Me refiero a mi amoroso Jake) y mi mejor amiga, Tamara.

¿Que decirles de ella? Esta mas loca que yo, si eso es posible. Les juro que si fuera lesbiana ya me la hubiera violado. Okey, no, tampoco para tanto pero es hermosa. Tiene una espesa y larga caballera negra, que le llega a la cintura y un hermosos ojos marrones con vetas verdes. Llevaba un remera fucsia que decía "¡Fuck you!", unos jeans negros ajustados y sus famosas convers negras.

Me senté a su lado y me dedique a apuñalar mis fideos. Tam me miro raro por uno segundos, abrió la boca para decirme algo pero Jake la interrumpió.

-Cam, los fideos ya están muertos, no puedes asesinarlos mas-. Me limite a mirarlo y gruñirle.

Tam me tomo por los hombros y me giro para que la mirara.

-Okey ¿Que paso? Habla, ahora-. Suspire, a Tam no se le puede ocultar nada.

-Un idiota arruino mi día- Volvi a gruñir y comí mis fideos.

Estaba tranquilamente comiendo hasta que levanto la vista encontrándome con un Jake furioso.

-¿Quien? ¿Que te hizo?- Hablo entre dientes (Owww, ternurita, se enojo, me defiende).

-No lo se, un tal... James- masculle con la boca llena.- Me quiso seducir- Sonreí hasta que Jake se levanto y vi que estaba por ir a buscarlo. Me pare rápidamente y lo volví a sentar.

-Te quedas ahí quietesito, no fue nada grave-.

-Te molesto, nadie molesta a mi adorable fresita- Sonrio (Oh no, no me dijo fresita)

- ¡¿Como me llamaste maldito bastardo?!- Tam me agarro del brazo evitando que le pegue un puñetazo en la nariz.

-¿Era necesario eso?- suspiro mirando a Jake, yo, mientras tanto, trataba de calmarme.

-Pero si es un adorable fresita con su pelo rojo- Río a carcajadas sosteniéndose el estomago.

-Bueno, mi adorable Jaksito, esta fresita te pateara el trasero si me vuelves a llamar así-. Gruñí en su dirección.

-Esta bien, esta bien...- Volvi a comer mis amados fideos.- Fresita... -susurro. Tamara nos pego en la cabeza a ambos.- ¡¿Y eso por qué?!- se giro a mirarla.-

-¡Si! ¡¿Por qué me pegaste a mi?!-señale a mi leal perro- El fue el que empezó-.

-Por que los dos son unos idiotas-. Murmuro comiéndose mi manzana... Un momento... ¡Esa era mi manzana!- ¡Esa era mi manzana! -Oh si cerebro, nos estamos entendiendo.-

-Tu bien lo has dicho, ERA tu manzana-. Estaba por quejarme cuando escuche el timbre que indicaba que se había terminado el descanso. Tome mi mochila, salude rápidamente con la mano a los chicos y sali corriendo. La maldita profesora de biología era un monstruo, no pensaba llegar tarde con ella.


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Llegue justito, la profesora casi me cierra la puerta en la cara. Me senté al fondo y saque mi carpeta y la libreta. Preste atención hasta que descubrí que era un tema que conocía muy bien y me puse a dibujar en la libreta.


Estaba tranquilamente dibujando hasta que siento que algo me golpea en la cabeza. Me giro molesta para buscar el propietario de ese papelito que golpeo mi cabeza hasta que veo al idiota. ¡¿Esto es enserio?!

-¿Que es en serio señorita Brooks?- Oh, mierda, lo dije en voz alta.... Mire a la bru... Digo profesora y sonrei.-

-Nada profesora-. Asintió y volvió a escribir en el pizarron.

-¿Que quieres idiota?- Susurre fulminándolo con la mirada.

-Tu, yo, sábado en la noche-. Rei por lo bajo y lo mire.

-¿Es en serio?- Volví a susurrar, no quería que la profesora me oyera.

-Tan en serio como que terminaras enamorándote de mi-. Rode los ojos y me decidí a ignorarlo el resto de la clase.



Nota:

Holiiis! Trate de hacerlo lo mas largo posible, no estoy muy inspirada hoy y cuando lo escribo parece mucho mas. En fin, cuando pueda actualizo.


Bay amorosos unicornios.

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