𝖢𝖠𝖱𝖤 𝖨𝖭 𝖳𝖧𝖤 𝖥𝖮𝖱𝖤𝖲𝖳. ⚊ 𝖧𝖸𝖴𝖪𝖶𝖮𝖮

4장 (끝)

A LA MAÑANA SIGUIENTE

Me estaba vistiendo de nuevo; fué algo triste despertar y notar que aquel ser se había ido y me había dejado ahí... Sólo. Con pensar solo eso mis ojos se llenaban de lágrimas, pero me resignaba a llorar, por lo menos horita me resignaba.

Ya me había puesto la ropa y las botas, y también guarde el cuchillo en el compartimiento. Solo me quedaba colocarme mi caperuzo rojo, lo tomé en manos y me lo puse. Cuando solo me estaba terminando de acomodar sentí la puerta abrirse; saqué rápidamente el cuchillo y apunté hacia allí. Justamente era un lobo de pelaje oscuro.

—¡Aléjate! —amenacé mientras le apuntaba. Ví que en su boca traía exactamente la cesta que era para mí abuela, me pareció muy extraño; pero cuando ví su mirada bajé la guardia, y más cuando se acercaba a mí sin malas intenciones.

Mis lágrimas ahora si habían salido más que nunca, reconocía esa mirada que solo había visto una vez en mí vida. Era él, y era todo un lobo de cuatro patas.

Me agaché a su altura cuando dejó en el suelo la cesta. Acaricié su cabeza mientras que las lágrimas recorrían mis mejillas.

—No llores... —me dijo él.

Quedé impactado cuando habló.

—¿Puedes hablar aun así? —pregunté con total impresión.

—Si, aún puedo —me respondió el.

—Gracias... por traerme la cesta —le dije.

—No hay de qué.

—Oye... te tengo una pregunta algo capciosa... ¿En dónde está mi abuela? —le pregunté, pues esa era la principal razón por la que vine.

—¿Ves el cobertizo pequeño que está en el jardín? —me dijo y yo me levanté para ver por la ventana, y sí, el cobertizo de la abuela seguía ahí —. Pues ella está ahí.

—Ah... Ok.

—Te sugiero que la despiertes después de que me vaya —me avisó y de nuevo volví a su altura.

—Si está bien no hay problema —contesté —, ¿cómo le iré a decir como ella llegó allí?

—Tal vez ni lo recuerde porque está noqueada.

—Ummm... Eres un lobito malo —dije mientras acariciaba otra vez su cabeza —. Oye y... ¿Cómo supiste que venía e hiciste eso?

—Bueno —dijo mientras desviaba la mirada —... Te ví en el bosque caminando sólo, y cuando me di cuenta de que venias para acá hice lo demás antes de que llegaras.

—Ok, entiendo eso, pero... ¿Por qué me hiciste lo que me hiciste en la noche? —y automáticamente cuando pregunté éso me sonroje. No es que era incomodo preguntarlo, pero... Igual era vergonzoso hacer esa pregunta.

—Ok primero, estaba en celo, y segundo pues... cuando te ví... fue un momento en el que ni yo entendía que me pasaba, algo así como mariposas en el estómago... Sin mentira alguna sentí como un flechazo en el corazón —admitió. Era lo más lindo que alguien me había dicho durante tanto tiempo, fue corto, pero fue muy lindo de todas maneras.

Sonreí por eso; me sequé las lágrimas un poco y en cambio ahora sentía alegría por lo que había escuchado.

—Eso lo explica todo, excepto algo —dije —. ¿La transformación de lobo porque?

—Humano de noche, lobo de día —contestó —, cuando me viste ya era el término medio de la transformación, esa si da miedo.

—Tienes razón... ¿Y el ramo de hortensias? ¿En dónde está? —pregunté, pues era lo que no veía en la cesta.

—Antes de volver a ser lobo las puse en un jarrón con agua para que no se marchitaran.

—Entiendo... creo que si pregunto sobre que paso con el cazador me vas a dar una respuesta que mejor ni escucho.

—Mejor ni preguntes... —me dijo.

Ambos quedamos en un pequeño silencio. No era para nada incómodo, más bien, era tranquilo y agradable.

—Te voy a extrañar. —le dije.

—Yo también. Sin embargo, te quiero seguir viendo.

—Ummm... Podemos intentarlo —comenté —, no tengo problemas en venir al bosque.

—¿En serio? —me preguntó él.

—Si, muy en serio —contesté.

—Oye, me puedes llamar Hyuk —me dijo él. Que nombre tan lindo.

—Un placer Hyuk, llámame JinWoo —respondí con una sonrisa.

—El placer es todo mío JinWoo y... Antes de irme quiero decirte una última cosa.

—¿Qué? —pregunté con algo de curiosidad.

—Te amo...

Ahora si me siento completamente feliz, no me importaba si era humano de noche y un lobo de día, yo igual lo amo, al igual que él a mí.

—Yo también te amo.

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Bueno mi gente bella, hasta aqui llegó esta historia. ¿Como hice esta historia? Pues con mi mente jajajaja. Nah mentira, me refiero a que cuando estaba buscando leyendas urbanas en la computadora me apareció el cuento infantil y yo estaba tipo.

¿Y porque no hacer algo con esto pero más... Interesante? Y lo hice.

Así de fácil. Espero que les haya gustado, y yo dije que iba a estar inactiva pero bueno... Mis ideas seguian andando pues.

Sin más que decir, gracias por leer, se les ama.