capitulo 3

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Narra Javier


Sentía que el alma se me iba, de pronto cuando vi a ese imbécil la sangre me hervía no solo quería agarrarlo a golpes, quería matarlo por 'poner en riesgo la vida de mi lo que más amo, pero Mabele era lo más importante ahora la tome en mis brazos en vista de que ninguna ambulancia llegaba y la lleve en mi auto al hospital importándome un bledo la audición, conduje lo más rápido que pude al hospital donde ya nos esperaba una camilla y veía como se llevaban a Mabele y yo corriendo tras la camilla


-te amo Mabele, no me dejes por favor tu no dije sollozando con mis ojos llenos de lágrimas, y veía como a mi chica se la llevaban por ese blanco pasillo.


Tome mi teléfono y avise a Amanda y Marcel los cuales vinieron enseguida al hospital.


-¡hijo! ¿Qué le paso a Mabele? me pregunto llorando Amanda con su lacia cabellera enmarañada y su piel más pálida de lo normal.


-un imbécil la arrollo con su Feconto su versión del o hechos, y entendí el cómo pasaron las cosas, pero no podía evitar sentir un odio hacia el por haberle hecho daño a Mabele, a mi Mabele.


-¿los familiares de la señorita Mabele Rosembert?


-somos nosotros, respondió Amanda, ¿Cómo se encuentra?


-afortunadamente bien, tubo unas puntadas en su cabeza pero ya está bien, pueden pasar a verla pero de uno por uno.


Amanda y Marcel entraron primero y yo me quede con él, sentado con la cabeza hacia abajo perdido en mis pensamientos y de repente recuerdo que elestá aquí.


-ya puedes irte, ella está bien


-asintió con la cabeza, pero antes debo disculparme con la señorita, me siento culpable por lo sucedido


-oh y claro que lo eres, respondí impulsivamente, soltando el aire contenido asentí y espero a que Marcel y Amanda salieran, algo desconcertados se sentaron


-Javier, ¿quién es ese chico? Por qué entra


-es el culpable del accidente... y quiere disculparse por lo sucedido


-espero que pueda pobre chico, en qué problema se ha metido


Pasado de 5 minutos pase a ver a mi bella mab.


Narra Mabele


Mis ojos se cerraron y solo muchas voces pero una más alto, era Javier


"te amo Mabele, no me dejes por favor tu no"


Después de eso no recuerdo nada más salvo un voz desconocida, la cual al abrir los ojos me doy cuenta de que es el, ese chico el del accidente


-despertaste, enserio lo siento creo que es necesario que te cuente como sucedieron las cosas, sonaba lago frustrado y preocupado,


-yo estaba conduciendo y...


-está bien, interrumpí, no pasó nada más grave no te preocupes


-enserio lo siento y si puedo hacer algo por usted señorita hágamelo saber


Después mis ojos se cerraron y no alcance a responder, aun inconsciente me sentía una groera por no poder contestar, de repente escuche la puerta abrirse y sentí como alguien besaba mi frente, desperté bruscamente.


-¡¡Javier!!


-aquí estoy mab, estas bien tranquila


Me abrazo protectoramente y empezó a peinar mis risos marrones haciendo una coleta y pedí un espejo para ver qué tan mal me veía lo cual nunca le tomaba importancia,


-dios estoy más pálida, más de mi color ya pálido de por si


-de todas formas eres hermosa


Pasado dos días de ello me dieron de alta y Javier claro estaba con migo, yo llevaba unos jeans algo sueltos, una playera y unos flats, lista para regresar a casa, estando haya Javier paso toda la tarde en casa entendiendo mis múltiples necesidades, ya saben gaseosas y comida chatarra de contrabando.


Estábamos en la sala sobre el sillón reclinable de papa viendo películas junto con clarence la cual no dejaba de hacer comentarios graciosos acerca de mis puntos en la cabeza.


-calla clarence si no quieres unos iguales en tu cabeza


- por dios mab no seas salvaje


Y así fue que nuestra pelea termino en una guerra de comida la cual terminaron limpiando clarence, Javier y Adam (ventajas de salir de ser atropellada)


Eran las diez y Javier tenía que irse, se despidió de todos y se fue, con ayuda de mis padres subí a mi habitación contemplando la moderna decoración de mi recamara y viendo esas cortinas color carmesí que mi madre compro y me acosté recordando como paso el accidente y viniendo a mi mente ese par de ojos verdes.


-ya basta Mabele, creo que ese golpe en la cabeza te afecto demasiado, me dije a mi misma.
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Hola, un capítulo bastante corto , gracias a quienes me leen :3

Entre las olas del mar (pausada por tiempo indefinido)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora