-MIEDO-

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La noche era oscura sin ningún tono
De luz, solo uno que otro rayo de luna
Que apenas iluminaba las hojas de los árboles del bosque.

Los animales habían abandonado la zona, quedando un campo de cementerio, el viento se movía de forma frecuente hacia cada dirección dando un rumbo pérdido en el viento.

Dando unos movimientos bruscos pero a la vez suaves, dando una señal de gruñidos y movimientos bruscos atreves de estos.

Las hojas se movían y se levantaban con las pequeñas partículas de humo y el olor a quemado que se hacían más presente, mientras una pequeña luz en las lejanías se hacía más y más débil, Llevándose consigo la única luz tenue en los árboles que mostraban rasguños y arañazos que rompían la corteza de la madera fría y seca.

En la oscuridad la luz que iluminaba la zona se iba debilitando más, pero esta no dejaba de avivarse.

Reflejando la voluntad y la condición de la persona que la tenía.

Tobias estaba cansado, con una mirada dura y exhausta el solo mantuvo su arma arriba de el sin que esta sufriera por los movimientos del viento.

El no quería que su luz se apagará pero tampoco quería que la luz se volviera más fuerte quemando la madera de los árboles para provocar un incendio que no beneficiaria a su llama, ni a él.

El solo estaba reposado en los árboles
Desesperado de aún seguir despierto y caer ante la tentación de dormirse.

El monstruo no tenía nada de protección de su arma en llamas, no de la luz tan fuerte que irradiaba

Pero lo que si tenía era la protección de su hábitat, con la compañía de sus amigos los árboles, junto al viento que lo favorecía con sus ventiscas heladas y nubes oscuras que le tapaban la visión.

El se retiró las gafas que tenía en sus ojos que le ayudaban a ver, para secar su sudor de su frente que era provocado por el calor y la tensión de su cuerpo, tobias se encontraba muy mal por lo sucedido con los niños, su preocupación aumentaba, junto al cansancio de su búsqueda.

Esto parecía ser una táctica del monstruo para escapar de el, o quizás era una forma de causarle desesperación y Miedo, ya que si no lo recordaba parecía que el se encontraba dando vueltas sin descansó y sin ninguna pista o rastro del monstruo.

Ya no le quedaba mucho tiempo, pasaron muchas horas desde que se había alejado del campamento, junto a los niños, no sabía por qué se seguía preocupando si ellos habían acatado sus órdenes, ya debían encontrase a una distancia segura, seguro ellos ya se habían ido del lugar para buscar refugio, no sabía por qué se seguía preocupando.

¿Sería por ellos?

¿por Chris?

¿o por el?

Tal vez por todos, era difícil, ya que estaba comenzando a dormirse, pero de inmediato se abofeteó para mantener su cordura aún activa.

Sabía que esto era un plan de la bestia para que se diera ante sus ojos para caer rendido a los pies de la derrota.

Lo sentía, sus fuerzas paraban pero eso no le decía que estaba apunto de caer, no aún, no ahora.

Tenía que aumentar la llama que le daba luz por qué si no el se quedaría completamente siego.

El adulto responsable apoyo sus piernas en el árbol para levantar su cabeza y mantener su postura firme como la de este.

Pero para dificultar las cosas su antorcha rudimentaria se terminó por apagar.

Desesperado el comenzó a pensar para sacar de su pantalón unos fósforos, el pobre intento encender su arma pero nada le daba resultado.

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