“El infierno está aquí mismo, en la tierra”, eso era algo que Jacob escuchaba decir a sus padres a menudo, y vaya que tenían razón.
¿Aún podía arrepentirse y ser perdonado por sus pecados?, ¿De verdad merecía ser castigado de esa manera?, se sentía tan sucio y enfermo.Si, estaba enfermo, pero, ¿Era solamente culpa de él?. Su parte egoísta, aquella que solamente pensaba en su bienestar quería creer que no era su culpa.
La sonrisa que pasó a ser una mentira, aquella sonrisa que se encargó de envenenarlo poco a poco.
¿Kevin de verdad era tan puro cómo los demás solían verlo?, tan servicial y amable, un alma empática y alegre, con su sola presencia lograba hacer sentir a mejor a los demás, tan lleno de amor para repartir.
Amor.
¿Estaba mal la manera en qué Kevin lo amaba?.Jacob aún recuerda perfectamente aquella escena, aquel día en el cuál Kevin le confesó su amor, con la sonrisa más brillante que nunca antes le haya dado alguien, y con las palabras más dulces que Jacob haya escuchado.
La cara de decepción no tardó en hacerse presente, ¿Por qué de todas las personas que conocía Kevin fue quién se enamoró de él?, estaba asqueado ante la idea de que el menor lo viera de esa manera.
Las palabras suelen ser más dolorosas que cualquier otra arma, y Jacob las utilizó en contra de la persona que veía como su mejor amigo.
Kevin se fue llorando dejando atrás a un Jacob confundido.
Aquellas palabras, ¿De verdad eran algo que diría él?, no lo sabía pero tampoco quería aceptarlo, porque, en lo profundo de su corazón sabía que el sentimiento era mutuo, él también estaba enamorado de Kevin."¿Por qué es tan complicado?" , no pudo con la carga él sólo y terminó contandole a su madre, a lo cuál la señora lo consoló diciéndole que no era su culpa. La culpa era de Kevin , él es quién había manipulado a Jacob haciendole sentir cosas que él no quería, él había sido quién lo hacía confundirse, y, tras la fachada de su amabilidad se encontraba un desviado que trataba de redimirse, un pecador que no merecía el perdón de Jacob .
Parecía estar bien con la idea, de todas manera, no tenía las agallas para volver a enfrentar a Kevin.
Pero entre más lo pensaba, más se daba cuenta de qué la personas que estaba equivocada era él, ¿Por qué no podía aceptar lo que en verdad era?, pensar en Kevin lo hacía sentir raro, cada recuerdo que vivía en su memoria lo quemaba por dentro, justo como si estuviera ardiendo en fiebre.
¡No, no podía aceptar algo tan antinatural!.
Aunque, la mirada de Kevin parecía ver a través de él , parecía que lo conocía mejor de lo que se conocía a sí mismo.
En su momento no lo supo entender pero ahora se daba cuenta de que Kevin lo hacía sentir en paz, seguro y tranquilo.
Pero todo eso era mentira, si, una mentira que había creado el menor para enterrarse en su corazón y pudrirlo, pudrirlo lentamente hasta hacerlo caer en su juego.No, Jacob era más fuerte que eso, no podía caer en una mentira, no quería ser alguien que fuese perseguido, ni un pecador, pero , la cosa es que ya lo era. Lo era tanto como Kevin aún si no lo decía en voz alta, porque sus pensamientos solo le pertenecían a él.
Ante sus ojos Kevin era tan hermoso, tan deseable pero sobretodo, tan prohibido, algo que nunca podría poseer.Las llamas del infierno lo consumían poco a poco, pero, ¿Por qué estaba siendo castigado?. ¿Por estar enamorado de un hombre o por querer vivir una realidad que no era la suya?.
Él estaba a salvo en la luz, en lo puro, en lo que sus padres creían que él era, en lo que lo convirtieron para ser alguien “digno” antes los ojos de los demás.
En la claridad del día todos pueden ver tus pasos, ver en que aciertas y en que te equivocas para castigarte y corregirte.La oscuridad siempre había sido vista como algo a lo que temer porque ahí se encontraba lo desconocido, pero, ¿Todo lo desconocido es malo?, y, ¿Todo lo conocido es bueno?, tantas preguntas y pocas respuestas, aunque de algo estaba seguro, en la oscuridad podría besar a Kevin , tomarlo de la mano, y, simplemente ser ellos dos viviendo lo que les gustaría ser y no lo que la sociedad quieren que sean.