OKAY | sam uley

➤ Capítulo 25

MILEY POV

Definitivamente, Sam no bromeaba con lo de no estar sola nunca, incluso intentó convencer a Leah de que viniera al baño conmigo. Ella, por supuesto, dijo que no y le dijo que tenía que dejarme respirar. Lo que comenzó con una discusión entre ellos con él diciéndole: "Estoy tratando de asegurarme de que ella siga respirando". Se puso desagradable rápidamente y resultó en que se desplazaran fuera. Idiotas... Aunque Leah tenía razón, me he sentido tan molesta con los constantes detalles de seguridad que me están volviendo loca.

Una vez, este domingo, convencí al pobre Seth para que me dejara tener un momento a solas en mi habitación, lo que hizo que Sam se molestara. Tuve que preguntarle si realmente quería que Seth estuviera allí mientras yo me cambiaba y eso le hizo callar. Entiendo que el vínculo de impresión es muy exigente y todo eso, pero esto se está volviendo ridículo. Me alegro de que este fin de semana haya terminado.

Jacob va a ir al instituto Forks hoy para ver si Bella está allí y si es un vampiro o no. No creo que ella haya cambiado de la noche a la mañana pero él piensa lo contrario. Los chicos están contentos de no tener que escuchar su "excesivo monólogo interior" como lo llaman. Yo me siento igual, pero quizá más molesta porque la saca a relucir en los momentos más aleatorios, quejándose sin parar.

Ahora mismo estoy horneando tortitas con toda la manada en mi cocina y Sam de pie detrás de mí sujetando mi cintura con firmeza. Cuando oímos el rugido de la motocicleta de Jake acercándose, todo el mundo se estaba quejando de que había vuelto, cuando todos se tensaron un segundo después. Salieron corriendo por la puerta y al asomarme vi por qué.

De pie, en toda su gloria, estaba nada menos que Isabella Swan. Los chicos estaban afuera burlándose de ella y Jake tratando de evitar que entraran. Respiré profundamente agarrando la mano de Sam que estaba gruñendo en silencio. Y comencé a arrastrarlo hacia la puerta. Él me siguió pero parecía bastante cansado mientras nos acercábamos.

Voy a ser la persona más grandiosa actuando como si nada hubiera pasado y, diablos, tal vez consiga que se sienta culpable... De acuerdo, tal vez yo también sea un poco mezquina. Sonreí a los dos, lo que claramente tomó a todos por sorpresa, especialmente a Bella, que me miró como si fuera una lunática. Nadie decía nada haciendo las cosas incómodas cuando Leah salió caminando de la casa mirando de reojo a Bella.

— Bella ella es Leah, la hija de Harry Clearwater. — Las presentó Jacob esperando aliviar la tensión.

— Oye, siento lo de tu padre. — Dijo Bella sin que sonara tan apenada. Leah no se animó ni mostró ninguna emoción ante las palabras de Bella, en su lugar dijo algunas de sus propias.

— ¿Estás aquí para atormentar a Jacob un poco más, o estás aquí para herir a Miley de nuevo? Porque déjame decirte algo, amante de cadáveres. Si alguna vez dices algo grosero o malo hacia ella, te haré pedazos personalmente. — Leah gruñó con los dientes apretados antes de salir corriendo hacia el bosque. Tuve que ocultar la pequeña sonrisa que se me formó en la cara, Dios, realmente quiero a Leah a veces tiene un arrebato.

Jacob y Bella acabaron dando un paseo por la playa y la manada estalló en carcajadas al instante.

— ¡HAS VISTO LA CARA QUE HA PUESTO CUANDO TE HA VISTO! — Gritó Quil mientras reía. Paul resopló más fuerte antes de elogiar lo que Leah dijo, aunque ella no estaba allí para escucharlo.

— Voy a decir una cosa... Leah sabe cómo asustar a alguien. — Dijo riendo ganando "ooh" de la manada.

— Paul, ¿te gusta Leah? — Preguntó Jared haciendo un mohín con el labio, burlándose de Paul. Paul se puso rígido al instante y se enfadó. Lo que le llevó a que casi se despedazaran en mi casa...de nuevo. Sucede prácticamente todos los días, así que a estas alturas ya estoy acostumbrada.

Sam tuvo que usar el comando alfa para que se calmara y comenzó a discutir en cómo la amante de las sanguijuelas tampoco podía estar a solas conmigo. ¿De verdad? Otro detalle de seguridad, ¿podrían las cosas empeorar?

En ese mismo momento, se escucharon las noticias, desde la sala de estar, hablando de las misteriosas desapariciones en Seattle, que no está muy lejos de aquí. Lo que, por supuesto, destruyó el viaje de compras que estaba planeando con Leah, así que sí, las cosas se arreglaron para empeorar.

Pero unas cuantas desapariciones pronto serían la menor de sus preocupaciones. Porque esos desaparecidos no estaban realmente desaparecidos, sino que se estaban convirtiendo en un ejército. Un ejército de nuevos vampiros conocidos como "recién nacidos", los más fuertes de un vampiro durante su época. Pero el ejército no estaba liderado por nadie, sino que tenía a una chica de pelo rojo y ardiente que los dirigía para buscar su venganza y su nueva hazaña.