ℳ𝒶𝓎𝒷ℯ ☘︎ 𝑬𝒓𝒘𝒊𝒏 𝑺𝒎𝒊𝒕𝒉 [EN PAUSA]

𖠺 𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 2 𖠺

Noviembre 2010.

El día que me enteré.

Era un día normal como cualquier otro. Septiembre y octubre se fueron como agua por cascada. Ese día abrí los ojos y lo primero que vi fue a mi perro Zeus.

Zeus era una cruza de gran danés con dalmata. Como era de esperarse creció demasiado pero aún dormía conmigo, papá me lo regaló cuando tenía diez años. Ha sido mi compañero de toda la vida.

Me acompañó en mis momentos más felices y también en los más difíciles. Era muy dormilón así que con cuidado baje de mi cama para prepararme e ir a la escuela.

Me arreglé y me dirigí al comedor, ahí estaba mi desayuno junto con una nota.

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Buenos días Erwincito, aquí está tu desayuno, te deje comida en el refri por si no llego a comer, cuídate

Te ama mamá <3

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Durante unas semanas hacia acá me he dado cuenta de unas cuantas cosas, sobre Zianya exactamente.

Es muy buena persona, es estudiosa, es dedicada, es muy cuidadosa, defiende sus ideales, es amistosa, es muy curiosa y talentosa.

Me volví su mejor amigo, su confidente y me gané su amistad. Nos volvimos inseparables.

Le he platicado a mi mamá lo que siento y me dice que puede ser posible que me guste, yo digo que solo son disparates. En mis planes no está enamorarme.

Salí de mi casa con los audífonos puestos, siempre iba solo pues vivía por otro rumbo, y como vivía lejos tenía que salir temprano de casa, aunque siempre llegaba exacto a la hora de entrada, o algunas llegaba tarde.

Escuchaba Michael Jackson, amo a Michael Jackson.

Iba tarareando sus canciones, es que son arte, no entiendo como hay personas a las que no les gusta ¿todo bien en casa?, también las canciones noventeras, las que parecen baladas, pero en ingles. Aunque también escucho canciones recientes, solo algunas.

Sin siquiera darme cuenta ya estaba en la entrada, guarde mis audífonos y me dirigí a mi aula, en el camino me tope con algunos conocidos que me saludaron, al llegar a mi lugar vi que en el lugar de Zia solo estaba su mochila. 

No le tome importancia, últimamente eso hacía, llegaba dejaba sus cosas y luego salía.

Saqué mis cosas y como el maestro aún no llegaba saque mi bloc de dibujo, tenía un dibujo pendiente a terminar, solo me faltaba colorear.

—Holiiiii— llegó junto a mi la chica —¿qué haces? ¿como estas? ¿cómo amaneciste? ¿desayunaste?.

—Hola— rápidamente tape el dibujo, ella lo noto pero no dijo nada —em… nada, todo bien, ¿y tu?.

—Siempre respondes lo mismo, en fin, igual, fijate que estoy muy contenta— se sentó para luego sacar sus cosas alegremente.

—Siempre estas feliz, pero ¿se puede saber el porqué de tu alegría?— ella solo me miro y trataba de buscar la forma de expresarse.

—Dos razones, la número uno es que ya se fue el maestro de cálculo, hoy tendremos uno nuevo y mucho mejor.

—¿Y la otra?— se sonrojo y dijo…