Capitulo 3

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*Kennya*
Me fui a mi habitación con una sonrisa en la cara, Joseph sabe besar bien, como Ethan mi ex novio. Al llegar a mi habitación abrí mi guardarropas y tome mis shorts para dormir y una blusa de tirantes, me puse en la ventana y ahí me quede un rato mirando las estrellas, una persona mas que mataba, si llevara las cuentas aproximadamente llevaría a un poco mas de 27 personas que mato. Pero todo fue por necesidad, mi madre estaba muriendo por cancer, me metí aquí solamente para tener el dinero, pero ahora que ya lo conseguí y lo pague, no me puedo salir de este mundo, Ethan y Abner me regalan droga, cocaína, marihuana o alguna así. Me gusta sentirme viva, sentirme alegre y olvidar mis problemas, olvidar que mi madre murio, olvidar que ya no tengo familia, olvidar las voces de las personas que mato, sus suplicas y sus gritos...
No mido el tiempo, pero cuando ya tengo mucho sueño noto que ya son las 3 am y mañana me pagarian, a lo cual no debo llegar desvelada. Bajo de la ventana y me acuesto en la cama para dormir.
.......

-Kennya despierta, el jefe ya te quiere ver.

-¿Pero que hora es?.

-Las 7.

-Dejame cambiar y ponerme algo

-No, no, no ya es ya, solo ponte una sudadera

Tome una sudadera gris que tenia y baje a la oficina de el señor Abner, ahí estaba Joseph, ya vestido con una polera de manga larga azul marino y un pantalón de mesclilla, me dieron ganas de reír pero no lo hice, me sente en la silla que estaba enfrente de Abner y ahí me quede a escuchar...

-Shava, shavita, Kennia. Son varias cosas las que te voy a decir, la primera es que aquí esta tu pago- puso sobre la mesa un sobre amarillo bastante grueso, y una bolsa con polvo blanco, mire a Joseph, vi su cara de intriga - lo segundo es agradecerte por traer a este chico, hemos perdido a bastantes y uno nuevo nos ayudara y tercero, tienes que enseñarlo, por lo mientras ira a repartir mercancia, necesito que ya se vayan y le enseñes las rutas y todo ok.

-Si señor, me retiro a arreglarme.

-Claro.

Tome el sobre y la bolsa, y subí a mi cuarto, me di una ducha rápida, al salir me puse un short de mesclilla, una blusa cafe y unos zapatos de el mismo color. Tome mi sobre y lo conte, eran 5 fajos de billetes, $15,000 en total. Tome $500 y sali, fui con Joseph que ya estaban en la sala de la mansión, junto a Ethan, los mire y después mire a la mesa.

-Kennya, agarra tu arma, ya están cargadas, y aquí esta tu nueva daga.

Me dio en las manos la daga, el estuche era color lila, fui quitandolo y deje ver la daga, filosa y el mango color rosa palido, deje caer el estuche a la mesa, pase mis dedos lentamente sobre el filo de la daga, la voltee y note que tenia grabado en letra cursiva y en pequeño "Kenny" sonrei al ver el detalle, las guarde en mi cintura y tome mi bolsa.

-Esta es para ti- dijo Ethan entregándole una pistola a Joseph
me miro con duda, se la quite de las manos, lo tome de su pantalón y le metí el arma en la cadera, el me miro y se puso rojo, yo solamente rei

-Se llevaran el Chevrolet, ya traen los paquetes a entregar, con mucho cuidado, ya saben que nos quieren sabotear.

-Confía en mi.

Le hice una seña a Joseph para que me siguiera, salimos y tome las llaves de el carro, nos subimos y arranque, el me miro con cara de duda.

-¿Que, nunca has visto a una chica manejar?

-Si, pero no menor de edad.

-¿y?

-Si te cacha una patrulla te multaran y si te descubren la droga te entambaran!

-Para que crees que es el dinero y la belleza- reí

-El dinero para mantenerse vivo y la belleza... para mi- dijo bajando su voz

-Idiota.

Todo el camino se fue callado, estacione el carro enfrente de donde entregariamos la mercancia, tome el paquete y me lo lleve. Baje de el carro y cruce la calle, me metí a la bodega, ahí ya me esperaba el cliente.

-Kennya

-Gerardo, que gusto verte

-¿Traes lo que les pedi?

-Pues claro, toma- le puse el paquete sobre la mesa- Ahora tu paga.

-Toma, si quieres contarlo.

-Confiare en ti.
Tome el paquete de dinero y sali, Joseph estaba quedándose dormido, me subí lentamente, antes fe encender el carro. toque el claxon, Joseph dio un salto y desperto, me miro y se sonrojo, yo solamente reí. arranque y fui manejando hacia donde daría la ultima entrega, la mas grande. Después de media hora de trayecto llegamos, me metí al estacionamiento con Joseph, todo se veía extraño, habían mas hombres armados. Me sentía insegura así que le dije a Joseph que bajara conmigo, abrí la cajuela y tome la maleta con la mercancia, todos se me quedaban viendo así que entrelace mi mando con la de Joseph, llegue al fondo y ahí estaba el jefe, deje la maleta en la mesa el señor me dio el dinero, lo tome y salí junto con Joseph, pero a unos metros de llegar al auto, tuvimos que tirarnos al suelo, la emboscada de solto, nos traicionaron, empezaron a atacarnos...

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