𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐬𝐢𝐨𝐧 - 𝐓.𝐑 - 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫

01. ━━━ Amor

Una semana después ...

Todo con Tom iba perfecto, era caballeroso, amoroso y respetaba todas mis decisiones, era el hombre que siempre había deseado en mi vida.

El único problema era lo que todos me advertían sobre Tom, yo no creía todo eso y al único al que no ignoraba totalmente era al único amigo cercano que tenia a parte de Amatista y Tom, Abraxas Malfoy, nos conocíamos desde la cuna ya que nuestros padres eran muy amigos, y probablemente nos iban a terminar comprometiendo pero para nada nos gustaba esa idea, éramos como hermanos.

Él me había estado advirtiendo desde que empecé a salir con Tom y la verdad me preocupaba lo mucho que insistía con eso así que decidí contárselo a Tista.

Estábamos acostadas en su cama comiendo algunos dulces mientras hablábamos.

—Amo a Tom, pero creo que algo esta mal con todo esto— Dije mientras comía chocolate.

—Claro que es raro, es Tom— Respondió ella comiendo galletas trituradas con un poco de limón, una combinación muy rara pero muy deliciosa.

—Si, yo se pero es un raro extraño.

—Eso no tiene ningún sentido— Rio y yo reí con ella.

Oímos como alguien tocaba la puerta, así que me levante y la abrí, era Abraxas.

—¿Cómo subiste?— Le pregunte a Malfoy mientras lo dejaba entrar.

—Fue mucho trabajo, pero quería unirme a su pequeña pijamada— Dijo y se acostó en las piernas de Tista, yo solo me reí y volví a mi sitio en la cama.

Abraxas podía ser muy malo y todo con los demás pero con nosotras era un amor.

—Y... como están mis brujitas favoritas— Dijo sonriendo y robando uno de nuestros chocolates.

—Estábamos hablando de Tom— Hablo Tista antes que yo pudiera hacerlo, empezando a acariciarle el cabello a Abraxas.

—Deja de hacer eso quiero concentrarme en el tema y si sigues haciendolo me voy a quedar dormido— Le aparto la mano y se sentó.

—Es que, todo lo que dices de Tom me hace dudar— Me recosté en él y enterré mi rostro en su pecho, me sentía un poco mal.

Abraxas me abrazo, me dio un beso en la frente y empezó a acariciar mi cabello.

—Cariño no era mi idea que te sintieras mal— Su voz era calmada, era una voz que solo usaba para momentos como estos. Tomo mi cara entre sus manos y siguió —solo es que si te pasa algo me muero.

Luego sonrió lo que me pareció muy raro.

—¿Qué tramas?— Pregunte.

Y él me lamio la cara.

—¡Abraxas!— Le grite y el empezó a desordenarme el pelo y hacerme cosquillas, cosa que odiaba-amaba.

Te odio Abraxas. Y después Amatista se unió a las cosquillas. Traidora.