Dear Mr T.

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Estimado Señor T. Se ve que necesita una buena follada para que quite esa cara de anciano reprimido sexualmente.

-Atte:HhEe

Estimado Señor T. Creo genuinamente que le hace falta coger.
Pd: me ofrezco como tributo y voluntario.

-Atte:HhEe

La sensación que recorría por todo su ser era inexplicable, el enojo, estrés y exasperación que se apoderaba de su cuerpo estaba siendo asfixiante.

Tres semanas, tres malditas semanas habían pasado desde el primer correo anónimo que recibió, después de eso más mensajes habían llegado, todos desde la misma cuenta y la misma firma al final de cada escrito, sabía que había algún mensaje oculto pues el correo tenía un nombre muy extraño, tenía que descubrir quien era el autor de aquellos mensajes.

Por el momento lo que había descubierto era que esos anónimos eran enviados por parte de un estudiante, un estudiante hombre, uno que le hacía aquellas bromas de pésimo gusto y osaba hablar sobre su vida íntima, no entiende en que momento pasó de criticar su trabajo como directivo a cuestionar su vida sexual.

Estimado Señor T. Se que lo que he dicho en mis anónimos anteriores no fue muy educado de mi parte, y se que ha movido cielo, mar y tierra por encontrarme, que le parece si cuando logre dar conmigo, ¿también me da a mi?. Ya que por lo visto soy un alumno muy desobediente.

-Atte:HhEe

Si bien era verdad que ha estado en busca de esta persona, el ha tratado de ser lo más discreto posible, incluso hizo una dinámica para que cada maldito estudiante de la institución llenara una hoja con sus correos electrónicos, alegando que era por cuestiones académicas. Le tomó al menos un día entero revisar con cuidado cada uno de los correos, solo para encontrarse con la sorpresa que ninguna cuenta era la misma que lo ha estado atormentando.

En ese momento se encontraba en la sala de su departamento, con la laptop abierta y su mejor amigo sentado a su lado.

—Entonces... ¿me estás diciendo que un estudiante de la preparatoria donde trabajas está escribiéndote anónimamente cuestionando tu vida sexual?, eso suena de película, Lou.— habla Niall sin creerse lo que su amigo le había contado, gracioso y emocionante es lo que creía que era.

—Eso mismo, idiota, ¿que no escuchas bien? Dios, en verdad ya no se como dar con esa persona, realmente no se me viene a la cabeza quien pudiera hacer algo así.

—Mmm, ¿has tenido problemas con algún estudiante desde que esos anónimos aparecieron?— cuestionó, buscando ayudar a su amigo.— no lo sé, algún estudiante con el que tuviste alguna diferencia estás semanas, que se yo, solo llevas un mes ahí y ya tienes enemigos.

—No, Niall, ni he tenido problemas con na...— se corta a mitad de sus palabras recordando que, en realidad si ha tenido un pequeño altercado con un alumno—... en realidad, si tuve un pequeño problema con un estudiante, pero no creo que sea él el responsable de estos anónimos, es de los mejores estudiante que tengo, sus promedios son increíbles, realmente no creo que sea este chico.— dijo con una pequeña duda que se instaló en su cabeza.

—Bueno, no está demás tenerlo en la mira, ya tenemos un sospechoso, ¿como se llama?—preguntó abriendo la caja de pizza que habían pedido.