Ucrania, una guerra más y un tiempo menos para vivir🥀

Las guerras quitan tiempo de vida a todos...

¿Realmente somos seres evolutivos? ¿Realmente aprendemos y comprendemos sobre las cosas?

Científicamente me dirían que sí e incluso cualquiera diría que sí, que aomos seres conscientes e inteligentes con la capacidad de retener información, información que analizamos y entendemos; pero cada día más, me convenzo de que en realidad somos los seres más tontos, los que más tarde llegamos a todo y los que ya no podemos dar marcha atrás (si es que en algún momento nos damos cuenta de nuestros errores).

Hay una canción de Green Day que se llama Troubled Times que en una de sus frases pregunta..."What part of history we've learned when it's repeated?" En español es: "¿Qué parte de la historia hemos aprendido cuando se está repitiendo?".
Siempre que escucho esta canción, mi mente se detiene en esa pregunta, siempre...y ahora que se ha visibilizado la guerra entre Rusia y Ucrania, vuelvo a pensar en esta pregunta. A veces parece que hay que hacerles esta pregunta a los políticos; no diré países, ni personas concretas porque siento la necesidad de preguntárselos a todos y cada uno de ellos.
Creo que fuera cual fuera la respuesta, sería totalmente invalida porque para hacer que la gente HUYA con lo puesto de sus propias casas, para hacer que familias luchen y se maten entre ellos, para hacer que niños y niñas pierdan su infancia (y tal vez su vida) y a sus familiares y para llegar a un punto en el que todo sea pura destrucción sin miramientos...no hay justificación, ni explicación que valga...

En Rusia, la palabra "guerra", está prohibida, pero ojalá fuera el hecho en sí y no la palabra. Lo mismo es para todas las guerras porque ninguna es más importante que la otra, porque ninguna vida, ningún hogar y ningún país vale menos que otro y creo que es otra cosa que deberíamos hacernos mirar...

Cada país tiene su historia y todas estas están forjadas con sangre, sufrimiento y lágrimas que hoy en día conmemoramos y lamentamos en actos públicos, sin embargo, no parece que realmente los políticos lo lamenten porque de nuevo, repiten la misma historia y cometen los mismos errores pero más graves. En una sociedad en la que se supone que hemos avanzado pero que en realidad, resulta que no porque aquí, es un paso hacia delante y dos hacia atrás...

...

Ahora, para terminar, me gustaría escribir una carta que no tiene un destinatario concreto, se podría decir que es para todos porque esto no es cosa de unos pocos, sino de todos:

Me gustaría preguntar de nuevo, si todo esto de enfrentar a todos con todos tiene algún sentido o si simplemente se hace por puro placer ante la destrucción y el sufrimiento porque "al final" de todo esto, eso será lo que quedará.
Tengo otra pregunta y lo siento si son muchas pero tan solo piensen todas las preguntas que las familias y sobre todo los niños, tendrían para hacer...creo que esta es la que muchos se plantearán, es la más simple pero la que más hace pensar y llorar...y es...¿por qué iniciaron todo esto? Y digo iniciaron porque esto no es algo que todos decidiéramos empezar; esta, simplemente es la batalla de unos pocos que usan de títeres a la población y a los que poco o más bien, nada tienen que ver.
Bebés que han nacido o más bien muerto bajo el sonido de las bombas y donde unos nacen y son proclamados vivos al oírlos llorar, otros, mueren bajo estas mismas lágrimas que una vez hicieron notar su presencia en este mundo. Hay unos que mueren y otros que mueren en vida...ahora, los padres son soldados y no en un juego al que posiblemente jugaban frecuentemente con sus hijos, sino en la realidad...en esa realidad en la que los fusiles de juguete, se convierten en reales y pesados fusiles que acaban con la vida allá donde apuntan. Ahora, las madres son presas del miedo y la incertidumbre y no como cuando jugaban a que sus hijos eran superhéroes que las salvaban, sino en la realidad...en esa realidad en la que ellas deben mantener a sus hijos y familiares a salvo, pase lo que pase aunque para ello primero deban despedir a sus maridos, padres o hijos mayores a los que, tal vez, no vuelvan a besar o abrazar. Ahora, los niños y niñas son pequeños y pequeñas príncipes y princesas que necesitan ser protegidos y no como cuando jugaban con sus padres a serlo, sino en la realodad...en esa realidad en la que no saben qué pasa pero sí lloran porque saben que tienen que dejar sus hogares, sus juguetes y a sus superhéroes favoritos (sus padres).
Los niños a veces, también suelen ser los superhéroes en estas ocasiones, los que muchas veces animan a todos a seguir adelante y a pensar que no todo está perdido. Pero, no olvidemos que ellos no deberían convertirse en grandes héroes a pequeñas edades, solo deben jugar a serlo pero ni ellos, ni nadie, necesita regalar su vida, presente y futuro a las pocas personas que inician estos sin sentido que al final, acaban en sufrimiento y destrucción...