To Shadows We Are Slaves. (Negan y Rick)

Capítulo 3: El descenso

"¡Ni siquiera estás escuchando, tío!" gritó Daryl por encima de Rick, y éste tuvo que apretar los dientes para no soltar que Daryl había estado hablando por encima de él cada vez que abría la boca durante los últimos quince minutos. "Esta gente no quiere trabajar con nosotros. ¿Cuánta mierda va a hacer falta para que lo entiendas?".

Rick se mordió la lengua y le dejó terminar. La presencia firme y tranquilizadora de Carol entre ellos le ayudó a mantener la cabeza al menos un poco. "Hay gente como Jed en todos los grupos", señaló Rick. "Me parece recordar una época en la que tu hermano era esa persona para nosotros. Cuando... cuando Shane lo era". Incluso ahora, después de todo este tiempo, seguía siendo difícil decir su nombre. "Spencer y Nicholas también eran así".

"Y ninguno de esos tipos sigue con nosotros", señaló Daryl.

"Merle nos ayudó al final", le recordó Rick con suavidad, siempre con cuidado alrededor de la herida abierta que era el hermano de Daryl. "Salvó la vida de Michonne. Glenn perdonó a Nicholas porque vio el bien en él, vio a alguien que merecía ser redimido".

"Spencer terminó siendo una comadreja hasta que Negan lo destripó en la calle". Rick se estremeció, recordando ese día, el miedo, la ruptura y el dolor de todo ello. "Y ambos sabemos lo que le pasó a Shane".

Rick se echó hacia atrás como si Daryl lo hubiera abofeteado, y sintió que algo caliente y feo le subía a la garganta, pero la mano de Carol en su hombro le hizo tragarlo.

"Ya está bien. Hay mucha fealdad ahí fuera sin que nos volvamos unos contra otros". Daryl se calmó lo suficiente como para dejar hablar a Carol, algo que Rick agradeció pero también sintió una puñalada de celos. ¿Cuándo dejaste de respetarme lo suficiente como para dejarme hablar? "Me encargué de Jed. Regina lo va a vigilar de cerca. Fue una pequeña y tonta disputa sobre frijoles derramados. ¿Realmente quieres hacer de esto un asunto más grande de lo necesario?"

Daryl frunció el ceño. "Para empezar, fue él quien lo convirtió en algo. No tenía por qué meterse en la cara de Jerry de esa manera. No necesitaba sacar un maldito cuchillo".

"Jerry se las arregló muy bien", respondió Carol.

"No debería haber tenido que hacerlo por unas malditas judías".

"Y no estoy en desacuerdo contigo. Pero se acabó".

Daryl sacudió la cabeza y señaló fuera de la tienda hacia los otros reunidos fuera del alcance del oído alrededor de las crepitantes hogueras. "No se ha acabado hasta que se hayan ido todos de aquí, Carol. Ya los has visto. Tienes que saberlo". Y con eso, se despidió, saliendo a hombros de las solapas sueltas de la tienda. Rick vio el parpadeo de un mechero y el humo ondulante mientras encendía un cigarrillo. Carol se volvió hacia Rick después de un momento y dio un pequeño suspiro.

"Siempre me dan ganas de pisotear esas malditas cosas cuando lo veo fumando ahora".

Rick se hundió en el asiento frente a ella. "Creía que fumabas".

"Lo dejé".

Una sonrisa cómplice tiró de las comisuras de los labios de Rick. "¿Por Ezequiel?"

Carol parecía dividida entre una sonrisa de satisfacción y una patada en la pierna de su silla. "Para Henry, en realidad. Ese chico coge los malos hábitos como una aspiradora. Hay que darle un buen ejemplo". Volvió a suspirar, mirando a Rick de arriba abajo. "Estás hecho una mierda".

"Muchas gracias".

"Ya sabes lo que quiero decir. Pareces cansado, Rick. Siento que te hayamos hecho venir. Es la primera vez que tienes un día con Judith en semanas, y un imbécil hace un berrinche por los frijoles derramados".