3.La perdida

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Parecía que me la estaba estirando,creo que la tenia mas larga. Se la sacó,se puso encima mía y me beso con lengua. Sus pechos rozando con mis pezones,el momento mas romántico de mi vida. Le toqué el culo pero bajé demasiado la mano y llegué hasta su "barba" del coño.


Saqué la mano,me la miré y me di cuenta de que tenia sangre y grité:


-¡¡¡¡¡¡¡¡Tienes la reglaaa!!!!!!!!


Y ella respondió-Vade hi pero lo hise pogue nae quedia hacelo com mijo.


-Bueno supongo que no pasara nada pero ahora no te meteré nada.


-Pedo lo paemos hacel a cuatdo pacas. Pol el codo.


-¡¡¡Vale!!!


Se puso a cuatro patas y me,yo estaba delante de ella,me tropecé y accidentalmente le metí mi polla en el ojo. La lleve al hospital corriendo,creo que se le metió un poco de semen en el ojo. El medico se la llevó a una habitación y me dejó en la sala de espera. Una enfermera vino y me preguntó como paso. Se lo conté y ella se fue detrás del mostrador y se empezó a reír como una foca pariendo. Unos minutos después salió Mara de la habitación con un parche en el ojo,ella me "sonrió" y yo me levanté,ella me agarró el culo con fuerza y me empujó hasta el coche.


Ella me dijo que le llevara de nuevo a mi casa. Cuando llegamos fue a la habitación,cogió su ropa interior que se había olvidado y me cogió la polla delicadamente susurrándome al oído "Lamame". Guardó su ropa interior en su bolso y se fue. Yo estaba muy excitado y se me olvidó pedirle el numero de teléfono ¿Y ahora como la encontraría? Me senté en la cama y vi que había sangre de su coño en el colchón. Empece a oler el colchón como un psicópata.


El día siguiente me di cuenta de que tenia el numero de su madre. Marqué el numero lo mas rápido posible pero saltó el buzón de voz. No paraba de pensar en ella. Vino una señora que quería que le quitara una muela. Yo estaba embobado pensando en ella,cogí una sierra para quitarle la muela y le corté la lengua a la señora y dijo:


-¡¡¿¿¡Pedo que haze zilipodas?!!!?


-Ups,espera en un momentito se lo arreglo-Le di un puñetazo en le barbilla y salió la muela y dije-Ya esta señora,¿quiere que le envuelva la lengua de regalo?


Ella se fue y vi que en la sala de espera estaba Mara. Fui con mi alargada polla y la mire al ojo sonriente y ella me miro con las encías llenas de salsa de tomate. Ella se disculpo:


-Lo tiento pod no habete dao mi numedo de tedefomo,midate do ecivide en da mano como hasen lo govenes.


-Heeee- Me pare un momento para analizar la frase que había dicho- Ahh no pasa nada lo unico que importa es que estamos juntos de nuevo(que romantico lo que acabo de decir)


-Gue madicon do gue agavas de decid.-Dijo ella


-Bueno quieres que...

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Continuará

La vida de un dentista sin licenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora