DAYLIGHT

Capítulo 2 - The other side of the door

Resulta que el ticket de avión que me mandó mi hermano era falso, ya que era parte de una sorpresa, este me había mandado su avión privado y la verdad es que yo estaba encantada. Después de un vuelo corto, llegué a Montecarlo, Mónaco. No sé porque estaban tan nerviosa, me sentía como si estuviera a punto de presentar mi primer Fashion Show. Bajé del hermoso avión de mi hermano y ahí estaba él, esperándome recargado en su Aston Martin Vantage y con una sonrisa enorme.

No pude evitar sonreírle de vuelta, tenía tanto tiempo sin ver a mi hermano, que verlo ahí parado me conmovió tanto que no pude evitar que se me salieran unas lágrimas. Me acerqué un poco más y en eso vi como se abrió la puerta de atrás del coche y salió Penelope corriendo hacia mí.

- Tía Bella- dijo la niña llegando ya casi conmigo con una sonrisa y los brazos abiertos. No podía estar más feliz, a lo que me agaché para que esta llegara y me depositara el abrazo más tierno de la historia.

- Hola hermosa, ¿cómo estás?- le pregunté mientras la separaba de mi para poder verle la cara y darle un beso en el cachete.

- Bieeeen- dijo y luego se fue corriendo hacia su mamá, la cual también se encontraba dentro del carro cuando llegué, pero estaba tan emocionada por ver a mi hermano que ni la vi.

Por fin llegué hasta con Max y nos dimos un abrazo como de 1 minuto sin soltarnos. Mierda, me hacía tanta falta mi hermano, una vez que nos separamos me tomo de la mano como para darme una vuelta y dijo:

-Mira nada más, mi hermana chiquita ya es toda una mujer- dijo y procedió a darme la vuelta a lo que yo respondí

- Y el mío que sigue siendo un niño de 11 años- solté una carcajada al igual que Kelly y esté me golpeó en el brazo.

- Heyyy, apenas vas llegando y ya me estas insultando- se hizo el indignado a lo que Kelly, P y yo nos reímos.

Después me acerqué a mi cuñada dandole un cálido abrazo también.

- Me da mucho gusto que estes aquí- dijo Kelly con un sonrisa en su rostro. Después de los saludos emotivos por parte de todos, Max subió mis cosas a su coche y nos dirigimos a cenar. Hubiera preferido que cenáramos pizza en su habitación ya que al llegar al lugar había muchos paparazzi, a los cuales los quería muchas veces, pero justo en este momento los estaba odiando, yo no quería que nadie supiera que estaba aquí.

Para mi mala suerte, las cámaras siguen al campeón del mundo por lo que al entrar al restaurante me tapé la cara con un folleto que traía en mi bolso de los que me habían dado en el aeropuerto, una vez dentro ya había más privacidad y no había tanto problema.

Ordenamos nuestros platillos y mientras esperábamos teníamos una plática sobre todo lo que habíamos estado haciendo en este tiempo que nos habíamos ausentado tanto.

- Y dime Bella, ¿cómo es eso de que estabas trabajando con Kim Kardashian?- Me preguntó Kelly asombrada.

- ¡Siiii!- dije emocionada- Lo que pasa es que en uno de mis Fashion Shows conocí a Fai, un amigo muy cercano a ellas, a él le encantó mi trabajo y me recomendó con ellas, no me lo vas a creer, pero Kim me mandó un DM por Instagram y yo por poco y me desmayo- dije entre risas- Luego me pidió si le diseñaba unas cosas, se las mandé y al parecer le fascinaron, porque la semana pasada estuvo en mi casa de modas para tomarle las medidas y hacer toda la ropa.

- Wooow- dijo asombrada Kelly- es que eres increíble en lo que haces, todo lo que me has mandado a mi está espectacular y amo que me haces matching outfits con P también.

En ese momento llegaron nuestros platillos, comimos entre risas y anécdotas que le estábamos contando a Kelly de cuando éramos pequeños y de como parecía que éramos gemelos por lo unidos que solíamos ser. Terminamos de cenar y gracias al cielo pudimos salir por la puerta trasera sin tener que enfrentarnos a las cámaras otra vez.