°infαntil° rastha x tu

Parte ¹¹

Una sonrisa se posó en su rostro, ver sus ojos brillar y ese pequeño rubor en sus mejillas como su pulso se aceleraba al tenerla cerca, le hacía darse cuenta que de verdad estaba enamorada de aquella chica, junto de nuevo sus labios, no por ordenes si no por placer

El beso duro poco, pero fue lo suficiente para que sus corazones se aceleraran de una forma hermosa, de nuevo aquella sonrisa lasciva, quería llegar a mas pero tampoco la obligaría hacer algo que ella no gustara

Sus manos bajaron a la cintura de esta, acercándola más, la diferencia de altura era notoria, por un momento su mente dijo "No puedes, son dos mujeres" pero...¿en serio eso importaba si ambas se amaban? ambas querían dejar de lado los besos y caricias, deseaban llegar a mas, que no importaban aquellos pensamientos, solo deseaba tener a la chica entre sus brazos, besarla y hacerle el amor como si fuera la ultima vez, pero sin quitar el amor que sentía por ella

Ese amor que fue negado por mucho tiempo al tener malos pensamientos, su misma mente jugaba con ella "son mujeres, es malo" "hazlo, tu la amas" ¿que hacer si la oportunidad esta en sus narices? ¿en serio desaprovecharía aquella oportunidad que tanto deseaba?, su respuesta era un no, la amaba mas que a nadie en el mundo y sin importar lo que diga la gente ellas estarán juntas, por que su amor es verdadero

Ataco los labios de la chica de una forma necesitada, un beso desesperado en donde se mostraba aquella lujuria que contenía desde hace tiempo, poco a poco sus manos empezaron a moverse por si mismas, un toque por aquí y otro por allá, hasta quedar sin ropa definitivamente

Los gemidos sonaban en aquella habitación, las personas que pasaban se asombraban al escuchar esos sonidos obscenos, algunos molestos y otros sonrojados, así siguieron las cosas en el cuarto, sus cuerpos hacían sonidos obscenos al chocar entre ellos, los gemidos excitaban mas y los besos, solo eran muestras de amor

Su cabeza estaba recostada, sin dejar de gemir pedía por mas, le estaban dando un excelente oral que la estaba haciendo tocar el cielo, su espalda se arqueaba al sentir su lengua tocar sus labios vaginales

La chica solo se dedicaba a darle placer, escuchar sus gemidos era un sonido único para ella, como pedía por mas la hacía querer venirse ya, como tenía una mano en su cabeza intentando dominar el ritmo sin éxito, al parecer estaba mas centrada en el placer que estaba sintiendo que ya no importaba el rimo

Así siguieron un buen rato, hasta que por fin pararon, ambas se acostaron en la cama sin importar el desastre que hicieron, abrazadas y cobijadas con una sabana era algo maravilloso sobre todo por que estaban juntas