YANG JEONGIN'S ONE SHOTS - I.N

SEGUNDO INTENTO

2. 

Luego de haber tenido una conversación con Bang Chan hyung y Mia noona y ellos convencerme de que debería ser más atrevido, decidí volver a la multitienda, esta vez solo.

Primero paré por una librería y luego por una tienda de accesorios. Espero no asustarla con los obsequios que quiero entregarle. 

Ya una vez allí, estuve dando cinco vueltas al mismo sitio para concienciarme. 

- Vamos JeongIn, cantas delante de miles de personas, no puede darte vergüenza esto. Tu futuro está en juego ... - 

- ¡Hola! Em, ¿necesita ayuda?¿Se le ha caído algo?-

Y la chica bonita salió por la puerta de la multitienda. Hoy tenía una su cabello recogido en una coleta, aunque su bandana no faltaba, también era de lunares, pero amarilla y blanca. Cada color le queda mejor que el anterior

- ¿Yo? N-no, ¿por qué?- Dijo nervioso.

- Le veía desde dentro.- Señaló la tienda.- Dar vueltas mirando hacia el suelo, pensé que perdió algo.- Se encogió de hombros y rió nerviosa.

¿Puedo ser más torpe? Pregunto.

- Estaba meditando, sí, me gusta meditar de esa manera. En...en círculos.- Rasqué mi nuca y por primera vez me atreví a mirarla directamente.

Ella soltó el pomo de la puerta y rió a carcajadas, su risa, lo mejor que he escuchado nunca. Y mira que las risas de Mia y Yoon son únicas y geniales, pero la de la chica es como...sanar.

- ¿Soy algo ridículo, no?- Me uní a su ataque de risa.

- Para nada, es muy divertido.- Dijo sincera.- Hacía tiempo que no me reía tan de verdad .- 

¡Eso es bueno!¡Eso es bueno! Mi confianza empieza a subir.

- Debo volver dentro, por si quieres...-

- Sí,sí, entro.- Dije yendo a paso rápido hasta la entrada. Agarré la puerta.- Pasa primero.-

- Gracias.- Dijo asintiendo y calmando sus risas.

Se dirigió al mostrador y se sentó en su puesta.

- Cualquier cosa, avíseme.- 

¡Es ahora o nunca! 

- Pues realmente venía a traerte una cosa ... siento si es raro, pero sentía que debía.- 

- ¿A mí? - Volvió a ser la chica bonita tímida.- ¿Por qué?-

- No hay una razón en sí.- Moví la bolsa y se entregué.- Espero ambas cosas te sean útiles.-

Y primero abrió el obsequio pequeño, una cajita ovalada de color rosa pastel con un lazo azul turquesa. Dentro, una bandana para el pelo verde y blanca de rayas.

- No es de lunares, pero espero te guste igual, pensé que te quedaría bien.- Dije bajito pero seguro.

- Es preciosa, muchísimas gracias, no debería haberse molestado.-

- Queda otro.- Señalé.

La chica asintió, dejó la cajita de lado y abrió el otro, algo más grande y pesado.

- No sé si te servirá, pero es lo que me aconsejaron en la librería y tenía buena pinta.-

Un libro de abogacía coreana que explicaba como ha cambiado el derecho en Corea del Sur por la influencia de Estados Unidos.

- ¡VAYA!¡ES GENIAL! ¡OH POR DIOS! Me habían recomendado este libro antes en clase pero no he podido comprármelo, es algo caro.- Dijo tocando su frente.- Dios, me siento mal, ¿se sentiría mejor si se lo dejo y lo devuelve? No sé cuando podré devolvérselo.-

Negué enseguida.

- ¡No por favor! Es un regalo por las molestias del otro día. Por manchar tus apuntes.- Dije sincero.

- Pero...-

- Solo, solo me gustaría saber tu nombre.- Reí.- Que mi amigo no me dejó escucharlo el otro día.-

- JiAh, mi nombre en Hwang JiAh .- Dijo extendiendo su mano. 

¡Hasta su nombre es bonito!

- Encantado Hwang JiAh, me llamo Yang JeongIn.- Acepté su mano y por fin, nos habíamos presentado formalmente.- Y por favor, creo que tenemos la misma edad, puede tutearme.-

- Estoy en el trabajo.- Respodió tímida tocando sus mejillas, estaban algo sonrojadas.

- Pero seremos amigos, hazlo con confianza.-

- Vale, seremos amigos JeongIn.-

De momento, pensé rápidamente,

Luego de decirle, una vez más, que no se preocupara por los regalos. Cuando me disponía a salir ya.

- Oye JeongIn...-

- ¿Sí?- Les respondí confundido, no sé que dirá.

- También me gustan las rayas en las bandanas de pelo.- Me mostró la que le había regalado sonriendo.

- Es un alivio.-

Nos despedimos y fui a la empresa. Entré a la sala de prácticas con una gran sonrisa que no pude disimular y los chicos me miraron extraño.

- ¿Dónde estabas baby bread?- Jisung se abalanzó sobre él y lo abrazó por el cuello.

- Llegando hasta aquí.- Dije irónico.

- ¡Oye! Dinos la verdad, se te ve feliz.- Le respondió Hyunjin.

Me encogí de hombros y reí.

- ¡Déjenme tranquilo y a ensayar!-

Los chicos bufaron y solo Bang Chan hyung se acercó a mí fugazmente.

- Sí o no ... ¿te fue bien?- Me guiñó el ojo.

- Sí hyung.- Respondí seguro.- Mejor de lo que creía.- Alcé pulgares.

- Estoy orgulloso de mi maknae.- Respondió revolviéndome el pelo. 

Y yo también hyung, le respondí mentalmente. Ya es hora de construir mi propia historia.

Hwang JiAh, espérame.