IF YOU {BL : Taekook}

FOOLS

Estaba tirado en el sillón; eran como las 3 a.m. y el sueño se me había ido desde muy temprano. Todos dormían, y no había nadie con quien hablar o jugar videojuegos en línea. No quería estudiar; era sábado, y sinceramente, no esperaba ser todo un nerd como Namjoon. Siempre tuvo un potencial académico envidiable, y lo admiré mucho por eso. Recientemente, aplicó para trabajar en mi universidad como profesor de inglés. Admirable. Y fue él quien convenció a mis padres de dejarme ir a vivir con todos los chicos. Sí, nuestra hermosa casa. Disfruto cada segundo de vivir con mis amigos de casi toda la vida, excepto por un pequeño y gran problema: su nombre es Kim Taehyung.

Éramos muy amigos en la primaria y gran parte de la secundaria; de hecho, éramos casi inseparables. Sin embargo, hace tres años que vivimos peleando por todo. Ya sea porque, en mi época de estudiante de prepa, no era conveniente tenerme con ellos por ser menor, o porque hoy me dice que no tengo responsabilidades trabajando en un museo. Todo se relaciona con la aparición de Park Bogum, gracias a sus amigos de la universidad.

¿Y quién es él? Bueno, también es amigo de la infancia de Tae, más de Tae que de todos nosotros. No lo digo por celos, sino porque siempre que él estaba presente, dejábamos de existir. Tal como ahora. Con sus carreras en común, se saltaron a la fama con sus numerosos dramas en televisión. Tae es un gran actor. Siempre admiré su talento y belleza, no lo he negado jamás, pero estos últimos meses han sido un tormento. Y sin ir más lejos, compartimos habitación. Les daré un ejemplo del comienzo de la vida en la casa Bangtan.

3 AÑOS ATRÁS...

Habíamos hablado con mis padres sobre mudarme una vez que terminara mi segundo año de universidad. Ya tenía 20 años y quería independizarme. Jin y Namjoon fueron a hablar con mis padres esa tarde. Yo estaba presente y super ansioso por la respuesta. Informaron que recientemente la abuela de Jin le había dejado una casa con varias habitaciones y pensaban remodelarla con el tiempo. Ellos estaban en una relación de casi dos años y era momento (según ellos) de formalizarlo y convivir. Sin embargo, al ser tan grande la casa y los gastos ser demasiados, decidieron reunir a todo el grupo de siete para vivir juntos en la misma casa. Jimin y Suga, que se habían hecho pareja recientemente, también querían ayudar y no se opusieron. J-Hope estaba soltero, pero tampoco se opuso a la convivencia. Ya habíamos viajado juntos muchas veces y compartido habitaciones; no era problema. El único que se opuso fue Tae. Nunca imaginé que él podría rechazar la idea. Dijo que él y J-Hope necesitaban espacio y no les gustaba compartir habitación. Creí que era una excusa para no tenerme cerca, ya que nos habíamos distanciado después de que su carrera como modelo, actor y cantante despegara gracias a sus amigos adinerados de la universidad. Namjoon explicó que, a pesar de su oposición, la casa y la decisión final eran de Jin, por lo cual él jamás se negó a darme un lugar mientras yo lo quisiera.

—Compartirás habitación con Tae —dijo Jin con firmeza.

—¿Disculpa? ¿No dije claramente que mi espacio personal era más importante? —respondió Tae, indignado.

—No te vas a morir por tener a Jungkook contigo. No exageres, por Dios —intervino Suga con calma.

—¿Y por qué no con Hope? —frunció el ceño Tae.

—Porque lo decidimos en un anime, que para que te dejes de pelear o ignorarlo, compartan otra vez tiempo juntos. Cielos, Tae, no tienes que ser tan malo —suspiró Namjoon.

—Yo... yo no soy malo, es que... Jungkook es solo un niño aún. Necesita también su propio espacio y ustedes ya saben que yo a veces vuelvo tarde. Y convivir en la misma habitación solo le traerá problemas. Está en la etapa de concentrarse en sus estudios —titubeó Tae.

—No se habla más. Jungkook dormirá contigo hasta que podamos tener más habitaciones —determinó Jin.

Y fue entonces que, por varias noches, tuvimos que compartir camas. No es que me quejara; Tae dormido era mejor que un peluche gigante. Era cariñoso y siempre me abrazaba. Disfruté esa cercanía la primera semana de compartir habitación. Luego, mis padres enviaron todo lo de mi habitación y dinero extra cada mes para darle a Jin hasta que pudiera conseguir trabajo. No tardé mucho en encontrarlo. Luego de varias semanas, conseguí trabajo en el museo de arte. Me gustaba todo allí, incluso exponer mis propias pinturas.