— EL COMEDOR ESTÁ ABIERTO, SI QUIEREN ALGO DELICIOSO Y CALIENTE NO SE PIERDAN ESTE DESAYUNO ESPECIAL—
Juraría que se quería levantar, pero Alex simplemente no se sentía bien. Pero no estaba enfermo. Hizo su mayor esfuerzo y se levantó, volvió a examinar su herida, parecía haber empeorado pero no lo suficiente.
Después de todo el personal de medicina ya tenía suficiente trabajo, aunque se seguía preguntando ¿cómo es que siempre están ocupados si no hay nada extraño?.
Para despertar bien decidió tomar un vaso de agua y lavarse la cara, sorprendente mente eso funcionó más de lo que esperaba, rápidamente noto los papeles en su escritorio y decidió ir a entregarlos.
Pasó por el comedor, pero el desayuno podría esperar, lo importante ahora era encontrar donde dejar esos papeles.
— Disculpa, ¿sabes dónde puedo entregar estos documentos?, me los entrego un MTF ayer y no sé dónde los puedo dejar —
— ¿Cómo se veía? —
— Pues... Medio moreno y creo que tenía una cicatriz en su ojo derecho creo —
— Oh, ya sé quién es. Déjelos en la segunda sección —
— ¿Donde? —
— ¿Ve ese pasillo de enfrente? —
— Si —
— Bueno, al final de ese pasillo doble a la izquierda y va a llegar al área de cafetería secundaria, hay es probable que lo encuentre, y si no está hay solo déjelo en el buzón del personal —
— Ha, mmm, ok gracias por la ayuda. Buen día —
— Igual —
Pensó que las instrucciones habían sido muy confusas pero aun así sirvieron, pronto se encontró en otra área que parecía de cafetería, pero hay habían muchos guardias comiendo, y unos cuantos científicos charlando, vio también una máquina dispensadora de bebidas, algo rara; pero se en foco en encontrar a ese hombre que le había dado los papeles.
— Disculpe, este no es su comedor asignado —
— ¡HAAAAA!, ¿QUÉ TE PASA? —
— Hey, baja la voz, no quieres hacer un escándalo —
— Perdón, oye tú fuiste quien me dio los documentos ayer ¿no es así? —
— Sí, así es —
— Ok aquí están tus papeles y no quiero que me vuelvan a molestar con cosas sin sentido, ¿entiendes? —
— ... —
— No importa no tengo tiempo que perder —
— Hey ¿quién era ese raro? —
— No importa ahora Richard, apúrate, tienes que acompañar al doctor Miller —
— Ok, ok, no seas tan correcto todo el tiempo Sergei —
— Mmmm, ahora no está la muchacha. Ni modos —
— Hey muchachote, ¿no quieres... Ya sabes, algo de mi interior? —
— Me parece que hoy no tengo de otra —
Alex regreso a su habitación ya que no había trabajo para el ese día, por lo que se puso a reflexionar sobre lo que había pasado esa mañana.
De alguna manera había sido muy impulsivo, él no quería hablar de esa forma, ni quería molestar pero por alguna razón sintió la necesidad de hablar así, de comportarse de esa manera.
Un fuerte dolor invadió su cabeza y comenzó a recordar algo:
— ¿Papá? —
— ¡NO!, ¡DÉJAME NO QUIERO¡ —
Cuando volvió en si ya había pasado media hora, ¿qué había sido eso?, es como si hubiera revivido un recuerdo, o algo por el estilo. Y así transcurrieron las siguientes semanas, y para cuando se dio cuenta ya había pasado otro mes.
Aprendió a lidiar con eso, por lo que se aisló más, solo iba a la cafetería fuera de horas, para solo comprar cosas de la máquina expendedora, y cada vez los recuerdos se volvían más vividos; a tal grado que se podría decir que alucinaba, era todo tan real, y de repente volvía, y podía pasar desde 10 minutos hasta una o 2 horas, por lo que estaba fuera de su habitación el mínimo tiempo que podía.
Pero, eso no iba a durar mucho.
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// 𝗦𝘂𝗳𝗳𝗲𝗿 𝗪𝗶𝘁𝗵 𝗠𝗲 \\
General FictionAlex Clams es realmente un bastardo dañado, aun así sale ileso, ¿Cómo?.