Ojos Peculiares

770 47 21
                                    

N/A: Esto lo soñé cuando tenía 14 años (a principios del 2015).

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Mi hermano menor, Adrian, estaba haciendo una fila para que le regalaran un caramelo gratis. Yo estaba en otra fila junto a mi madre, esta era para comprar una película. Lo extraño de esto era que las películas no las entregaban en CDs, sino en USBs y estos costaban solo cinco dólares. En el momento, eso parecía completamente normal para mí. La habitación en la que nos encontrábamos era blanca y todo parecía tan monótono.

La fila en la que se encontraba mi hermano era larga y todos los niños estaban esperando pacientemente por su caramelo gratis. Mientras inspeccionaba todo a mí alrededor, alguien en la fila de mi hermano llamó mi atención. Era un muchacho de unos 13 años de edad. Su cabello era completamente negro y su piel era súper pálida. Lo que me había interesado de él eran sus ojos. Si no te ponías a observar detenidamente, tal vez no pensarías que había algo raro en ellos. Pero yo, una chica muy observadora, noté que sus ojos eran negros. Pero no completamente negros, en el centro de ellos, donde en un ojo normal se encuentra la pupila, vi un punto rojo intenso. Al ver esto, me asuste considerablemente.

Ya mi madre había pedido la película que quería comprar y estaba sacando el dinero para pagarla. Miré al chico una vez más y me giré abruptamente hacia mi madre.

-Mamá -la llamé con un tono preocupado.

-¿Si? -ella me miró confundida por mi preocupación.

-¿Tu puedes ver al chico que esta por allá? -apunté al chico discretamente con mi dedo- El de cabello negro y piel blanca.

-Si -ella respondió insegura.

-¿Ves algo raro en sus ojos?

Ella frunció el ceño y forzó la vista para poder ver al chico bien. Justo cuando me iba a contestar, sus ojos se agrandaron notablemente y me miró con la boca abierta.

-¿Qué es eso? -me preguntó horrorizada.

-No s-

-Eso es un Shokel -me interrumpió el señor que nos estaba atendiendo.

-¿Un qué? -pregunté atónita.

-Un Shokel -respondió como si fuera lo más común del mundo.

-¿Qué es eso? -me atreví a preguntar.

-Ahora, un monstruo, pero no siempre lo fue. Al principio era un muchacho como cualquier otro. Con sueños y perspectivas de la vida. Todo eso fue arruinado cuando se enamoró de esa chica -el hombre apuntó a alguien que se encontraba en la otra esquina del local.

Yo miré confundida al lugar que él estaba apuntando. Y casi me da otro paro cardíaco. Esta vez, en lugar de ser un muchacho con cabello negro y piel pálida, esta era una muchacha de unos 12 años con una larga melena negra azabache que le llegaba a la cintura y un poco más abajo. No podía ver sus ojos, pero sí su piel y ropa. ¿Saben cómo lucia la niña del aro? Bueno, ella era más o menos así. Solo que su piel y bata/camisola en vez de ser blancos, eran grises. Era muy extraño. Su cabeza estaba direccionada hacia al muchacho, pero no estaba segura si lo podía ver detrás de su cabello, ya que este cubría la mayor parte de su cara.

-Ellos se conocieron hace cuatro años atrás. Solían venir aquí todo el tiempo. Un día, alguien que les tenía tremendo rencor por la abierta manera en que se demostraban su amor, les colocó una maldición. ¿Ves sus ojos? -nos preguntó.

-Sí -contesté, queriendo saber más.

-Lo negro significa la maldad que ha consumido su alma y que lo está volviendo menos humano cada día. Y lo rojo significa la poca humanidad que le queda, el amor que alguna vez sintió y la felicidad que nunca más volverá a sentir. Ella está condenada a pasar toda la eternidad viéndolo a lo lejos, sin poder hablarle, sin poder acercársele, sin poder hacer nada más que ver como la poca humanidad de su amado se va deteriorando con el tiempo.

-Eso es muy triste -susurré mirándolos.

-Sí -el señor me apoyo.

-¿Y qué pasará cuando su humanidad se pierda o se marchite? Cuando sus ojos queden completamente negros -preguntó mi madre.

-Ese será el fin de todos nosotros.

De repente, ya no me encontraba en el local con mi madre y el señor. Ni con la fila de mi hermano a mi lado. Ni con el muchacho de los ojos negros, ni con la muchacha de la piel y vestimenta gris.

Ahora estaba en un callejón. Los sonidos a mi alrededor delataban que me encontraba en algún punto muy activo de la ciudad. Yo estaba parada en la entrada de un callejón sin salida. Al darme la vuelta, vi una calle y al frente de esta, una estación de trenes. Allí, al comienzo de las escaleras que bajaban a la estación, se encontraba la muchacha gris. Esta vez si podía ver sus ojos. Eran blancos, completamente blancos. Estos me miraban con tanta tristeza.

Cuando iba a caminar hacia ella, a preguntarle donde me encontraba, alguien se interpuso en mi camino. Choqueé fuertemente contra el pecho de esta persona que era unos pocos centímetros más alto que yo. Levanté mi vista para ver quien se había chocado conmigo y me encontré con esos ojos negros. Esos ojos que no quería ver ni en un millón de años. Lo peor de todo no era solo el hecho de que este muchacho estuviera cerca de mí. Sino que sus ojos habían perdido la poca luz que le brindaban el color rojo de sus pupilas. Sus ojos estaban completamente negros.

Comencé a retroceder asustada de lo que sería capaz de hacerme este monstruo, pero él solo siguió viniendo hacia mí. Yo quería gritar, pero no podía. Estaba en shock, de a milagro podía moverme y alejarme de él. Cosas comenzaron a salir de su espalda. A ser sincera, no tenía una muy buena vista de lo que salía de su espalda y eso no era lo que más me preocupaba.

Sus ojos estaban tan llenos de odio que tenía miedo de desmayarme o que mi corazón explotara. Él me sonrió de una manera tan macabra y satisfecho de hacerme sentir como si estuviera teniendo un ataque al corazón. Siguió caminando lentamente hacia mí hasta que choqué contra la pared y ya no tenía ningún lugar a donde escapar. Lo miré con terror y el solo siguió sonriendo y repentinamente se lanzó encima de mí.

Y desperté de mi pesadilla.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Okay, pensaran que inventé toda esa historia, pero no. Eso de verdad lo soñé. De verdad casi tuve un paro cardíaco. Todavía puedo ver su cara llena de odio lanzándose encima de mí.

Pero lo peor no fue eso, sino que mi cama la colocaron al frente de mi espejo. Así que cada vez que me levanto de la cama o algo por el estilo, me tengo que ver en el espejo.

Ahora imagínense esto: Yo me encontraba de lo más feliz durmiendo cuando de la nada me aparece esa pesadilla. Estoy súper asustada y creyendo que eso de verdad está pasando. El bicho me está acorralando en el callejón y se lanza encima de mí. Y tras de eso, al levantarme, me siento abruptamente en mi cama, presionando mi pecho con ambas manos para que mi corazón se tranquilizara un poco. Y abro los ojos para estar 100% segura que todo eso fue una pesadilla y me veo en el espejo.

Les aseguro: Cabello desordenado + Chica + Pesadilla + Sueño = No es un bonito resultado.

BUENOOOOO.... Espero que les haya gustado esta pesadilla (sí, se que suena raro) y que voten, compartan o comenten.

Gracias por leer, son los mejores <3

Besos,

Tiffany ♡

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>

Todos los derechos reservados.

Mis Pesadillas ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora