Capítulo 89: Recuerda, ahora eres mío

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"Ah..." Zhao Ming abrió los ojos y se asustó por la pared de carne frente a él. Estaba enterrado en el pecho desnudo de Liu Jiming, y la punta de su nariz tocó los músculos del pecho ligeramente levantados.

¡Mira más abajo, carajo! ¡Él y Liu Jiming están desnudos! ¡No están usando nada! Dio un golpe bruscamente y rápidamente se alejó varios pasos del pecho de Liu Jiming.

Espera, espera... ¿qué pasó?, la escena de anoche le vino lentamente a la mente, recordando que estaba drogado, y luego Liu Jiming vino a salvarlo, y se subió sobre Liu Jiming... dejó que Liu Jiming... lo follara... entonces Liu Jiming lo llamaba... y él gritaba muy fuerte... y dejó que Liu Jiming eyaculara en él...

¡Joder, joder, joder, es tan jodidamente vergonzoso, tan vergonzoso!

Liu Jiming se despertó con su grito, abrió los ojos aturdido y miró a Zhao Ming, que cubría su pecho con vergüenza y humillación como si hubiera sido intimidado, no pudo evitar pensar en lo que sucedió anoche, y las puntas de sus orejas lentamente se volvieron de un bonito color rosa. Liu Jiming dijo suavemente, "¿Qué pasa?"

"¡No me mires!", Zhao Ming no llevaba nada puesto y se sintió extremadamente avergonzado de estar expuesto a los ojos de Liu Jiming. Solo cuando abrió la boca se dio cuenta de que su voz era completamente ronca, seca y astringente. Esto era debido a las excesivas secuelas de la noche anterior.

Recogió la almohada y se cubrió la cara, sin atreverse a mirar a Liu Jiming.

"¿Qué pasa?", pregunta Liu Jiming divertido mirándolo cubriendo su rostro. Ya han hecho cosas aún más audaces y vergonzosas, y esto le hace sentir avergonzado.

Zhao Ming dejó la almohada, miró a Liu Jiming por un momento, de repente se apresuró, mordió el hombro de Liu Jiming con fiereza y rechinó los dientes, Liu Jiming se sorprendió un poco, no lo empujó.

"Recuerda, ahora eres mío", Zhao Ming miró las marcas de dientes que dejó y dijo ferozmente con una cara sonrojada.

Liu Jiming estaba atónito, ¿es esta una confesión disfrazada?

"Todo terminó, no puedes retractarte de lo que dijiste ayer", Zhao Ming vio su mirada vacilante, pensando que Liu Jiming lamentaba su feo comportamiento de anoche y ya no le gustaría.

"¿De verdad estás dispuesto a estar conmigo? ¿También te gusto?", preguntó Liu Jiming sorprendido.

"¿No vas a ser despiadado, verdad?" Zhao Ming bajó la mirada, sin atreverse a mirar los ojos ardientes de Liu Jiming, deliberadamente cambió de tema.

"¿Te gusto?", Liu Jiming puso su rostro frente a él y volvió a preguntar persistentemente.

"Si no me gustaras, no estaría contigo anoche... aiya, eres tan molesto", Zhao Ming se sonrojó y evito la mirada de Liu Jiming. Sintió que realmente estaba yendo cada vez más lejos en el camino del orgullo.

"Genial", Liu Jiming abrazó a Zhao Ming, como un perro grande frotándose contra el cuello de Zhao Ming, su cabello estaba un poco duro y picaba cuando estaba pegado al cuello de Zhao Ming.

Zhao Ming estaba secretamente feliz, y dio vuelta, todavía estaba con este hombre y, al final, todavía no podía dejar ir a este hombre. Y cuando estaba más avergonzado, fue este hombre quien lo salvó, aunque de una manera que era difícil de decir.

"¡Tú mano, quítala!", Liu Jiming se frotó las manos y se puso inquieto, rodeó la espalda de Zhao Ming y bajó gradualmente, amasando suavemente sus nalgas redondas. La cara de Zhao Ming estaba roja por haber sido tocado, y echó hacia atrás la cabeza, que todavía se frotaba contra su cuello.

Tú eres mi Tío (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora