Esta historia está situada en una ciudad de insectos, donde esta plagada de corruptos, violadores, asesinos y excesivo caos. Pero aun así existe la lealtad, la justicia encarnada en una mosca que perdió lo mas preciado. Y cuando asumía que ya no ten...
En una noche más oscura de lo habitual, lluviosa, y con una luna en forma de plátano. Brota una ciudad sombría.
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En una fábrica unas garrapatas están traficando bolsas de azúcar, una sustancia totalmente prohibida, y para que no haya sospechas del delito que estaban haciendo, empezaron a cambiar las etiquetas de las bolsas por "talco para bebés". Todo iba como de costumbre, mientras metían las bolsas a los camiones. Hasta que se escucha un sutil ruido en el fondo de la fábrica Tac...Tac..Tac el sonido avanzaba lentamente hacia la puerta. Ellas vieron una sombra que se acercaba y enflaquecieron de susto. Quedándose paralizadas. De repente el sonido se detuvo. Tac. Se miraron entre sí y empezaron a sacar sus insecticidas lentamente. La puerta comenzó a abrirse lentamente y una sombra entra a la habitación, una de las luces alumbró a la sombra ruidosa y resultó ser una garrapata más, todas suspiraron, guardaron sus insecticidas y continuaron...
Garrapata flaca: mi hermano casi nos matas del susto - exclama y guarda su insecticida dentro de su gabán.
Garrapata que los asustó: ay que delicados son!! -señalando con el dedo a todos- lo siento tío, fui a cagar - le dice a la garrapata flaca-
Garrapata enana: -alterada y con voz susurrante - no puedes hacer eso tío, encima que vienes tarde te vas a cagar y nos asustas. Pensé que eras un intruso.
Garrapata gorda que los asustó: ya, ya, yaaaa... dije que lo siento. ¿Además quién sería tonto para meterse a este lugar, a esta hora y con este clima?
Y PUM PIM PAM.. la puerta se abre abruptamente y aparece una Mosca con un insecticida encañonándolas.
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Mosca: Alto ahí chavales!!!
Garrapata gorda: ¡ o mier...! - sin terminar de hablar, le disparan en la cabeza-
Las Garrapatas sacaron sus armas. Y empezó una lluvia de chorros de insecticida, algunas cayeron al piso, las otras se cubrieron con los sacos de talco para bebes. La mosca cogió a una del cuello y la usó como escudo.
Garrapata sujetada del cuello: ¡NO DISPAREN! , pero a sus compañeras no les importó y la desmadraron con insecticida.
Garrapata sujetada del cuello: ¡AAAAAAAAH hijas de su put...! - estaba siendo fusilada con muchas gotas de insecticida -
La mosca tiró a un lado a la garrapata muerta y logró cubrirse debajo de un saco de azucar.
Algunas de estas delincuentes que se encontraban al fondo de la fábrica empezaron a meter las bolsas a los camiones que estaban estacionados en el portón trasero, pero un escarabajo gordo las sorprende. Las sujeta de los hombros y las lanza al piso. Mientras que su compañera, la mosca, seguía disparando a la flaca y enana, quienes también se cubrían detrás de los sacos. Dos murieron por asomar la cabeza, y las que quedaron trataron de huir a los camiones, pero el escarabajo las atrapó, dándole oportunidad a la mosca para disparar a las ya desorientadas garrapatas. Otras que estaban escondidas empezaron a disparar al escarabajo, pero su exoesqueleto era muy grueso, haciendo que las balas de insecticida no lo atraviesen. El escarabajo las golpeó y sometió. Ya sometidas, la mosca y el escarabajo se reúnen.
Mosca: ¡si que llegas en los momentos justos, Boris!
Boris: al parecer tenías razón Mad - suspira Boris - , pero no era necesario tanto alboroto. Teníamos un plan!!!
Mad: ¿en serio te parezco una mosca que planea?
-Volviendo a suspirar fuertemente Boris- ya, ya ... lo que digas. Ahora hay que recolectar todas las pruebas.
Mad: vamos, hay que ser rápido antes que llegue la policía y haga su trabajo de mier...
Mientras tomaban pruebas salió detrás de los camiones una garrapata sangrando de la cabeza, cogió una granada aparentemente tóxica con una de sus únicas manos que le quedaba.
Garrapata sangrando: trágense esto malditos!!! - lanzando la granada de sal-
Boris: ¡¡¡cuidado!!! - Empujó a Mad -
La granada explotó destruyendo parte de la fábrica.
Las sirenas de la policía sonaban a lo lejos.
Las garrapatas que sobrevivieron se llevaban todo lo que podían y empezaron a huir en los camiones.
Mad despertó entre los escombros y no veía a su compañero. Después de unos segundos lo encontró boca abajo.
La policía arácnida llegó en ese momento a la fábrica.
Mad: lo siento Boris, no quería que te pasara esto. -Mad también estaba herido de gravedad-
La policía arácnida rapidamente encontró al escarabajo bañado en sal.
Policía 1: ¿Me parece que es el detective escarabajo Boris? Y está muerto.
Policía 2: hay unos camiones huyendo, tenemos que atraparlos!!!!
Policía jefe: no creo que sea necesario muchachos -mientras hablaba, a la vez, por el móvil con otro insecto-
Ok entendido - le dice al insecto con quien hablaba y cuelga - Y con voz fuerte, exclama- Otra vez fueron los chanchitos de tierra.
Policía 2: ¿Jefe qué hacemos con los camiones que están escapando?
Policía jefe: He recibido ordenes directas de que no los sigamos -mientras sacaba un cigarro con unas de sus cuatro manos-
Policía 2: pero hay garrapatas muertas y no hemos encontrado pruebas de que fueran los chanchitos de Tierra.
Policía jefe: Aquí se dice y hace lo que yo diga, y si yo digo que fueron los chanchitos de tierra, fueron los malditos chanchitos de tierra.
Policía 2: pero jefe son las... - es interrumpido por el Policía jefe-
Policía jefe : Eres nuevo, verdad?, así que si no haces lo que yo digo, voy a poner en el atestado que tú eres un cómplice de los chanchitos de tierra y que nos apuntaste y quisiste darnos unos chorros de insecticida.
Policía 2: no podría, no tiene testigos.
Policía 1: ¿a no?
Policía 2 : - se quedó callado, agachó la cabeza y obedeció las órdenes-
Jefe: a si me gusta -dándole unas palmadas en la espalda- ahora hay que ir afuera y vigilar para que la chismosa prensa no se meta.
Después de unas horas, los arácnidos empezaron a retirarse.
Y entre una de las columna destruidas se ve una sombra afligida con sombrero, que desaparece cojeando en medio de la noche lluviosa.
