Cartas a mi ex

Carta 3

Hoy sería el día que cumpliríamos 9 años de novios, solíamos tener bastantes platicas mucho sobre como lo festejaríamos, tu querías que nos fuéramos de viaje, que ahorráramos para irnos a algún lugar con playa, debido a que amabas surfear, en realidad yo no era muy fan de un destino así, pues yo ni si quiera sabía nadar y odiaba usar traje de baño, pero por ti realmente lo estaba considerando. Iba a ser algo significativo para ambos, siempre te gustaba excederte en los detalles, aunque no lo pareciera, tú eras el cursi de la relación, como eras mi primer novio y mi primera experiencia en realidad me daba mucho miedo mostrarte mi lado romántico, pues tenía miedo de mostrártelo y que me abandonaras.

Recuerdo como me pediste que fuera tu novia, apenas teníamos 13 años, pero con ayuda del equipo de football al que pertenecías lo planeaste, me invitaste a ver un partido, y al término de este todo el equipo e incluso amigos tuyos se quitaron las playeras de sus equipos para mostrar una camisa blanca que llevaban abajo con una letra negra, para formar las palabras ¿Quieres ser mi novia? Mientras tú te encontrabas parado con tus grandes ojos verdes, con un hermoso y grande ramo de rosas rojas, obviamente salté a tus brazos gritando

- ¡Claro que sí, eso y más!

Con el tiempo te hiciste menos detallista, dejaste de traerme flores, de recordar nuestros aniversarios, de invitarme a salir, de emocionarme al verme.

¿Recuerdas la cuenta de ahorro que hicimos? Aquella que al terminar me pediste que te diera la mitad, debía tener como 50000 pesos, ¿Por qué te lo estoy mencionando? Justamente me acabo de enterar que te pagaste unas vacaciones a Tailandia con tu nueva novia ¿Por qué yo tuve que esperar tanto para irme de viaje contigo y ella no? Solía mencionártelo, pedirte que viajáramos, aunque sea a un estado diferente, siempre ponías excusas, como que era muy caro, que no tenías tiempo, con el tiempo ni te esforzabas en darlas. Sé que piensas que intento darte lastima con esto o que es muy tarde para reclamar, créeme nadie más que yo lo sé. No puedo evitar sentirme celosa, porque ella puede tener esta parte de ti que yo no pude disfrutar.

Solías decir que yo era un aguafiestas, que nunca quería hacer nada, pero no era cierto, solamente me daba mucha pena pedirte que hiciéramos algo, porque cuando finalmente me armaba de valor para invitarte a algún lugar, te reías diciéndome que estabas muy ocupado o que no te interesaba mucho ir a esos lugares.

Estabas más desinteresado en mí, ahora supongo que se el por que