007

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Jungkook posó su mirada en dirección a la puerta con horror, efectivamente su profesor de artes plásticas estaba ingresando al salón por aquella entrada.

Sentía y sabía que estaba temblando probablemente peor que un chihuahua. ¡Pero no podían culparlo, estaba a punto de declarar sus sentimientos hacia la persona que más amaba en el mundo!

Su mente se desconectó, no escuchó absolutamente nada del saludo de su profesor hacia la clase, no escuchó cuando dijo que pasarían uno por uno a explicar el porqué de su trabajo, no escuchó las primeras presentaciones, y mucho menos escuchó cuando Pablito dijo su nombre dando a entender que su turno había llegado, claro, no hasta que tocaron su hombro.

—   Joven Jeon. —   Jungkook saltó en su lugar y se dió cuenta que Pablito estaba tocando su hombro, todo su curso miraba a su dirección, incluso aquel pelinegro que le robaba sus pensamientos.

—   ¿S-si? —   Más que a respuesta sonó a pregunta, se dió tremenda trompada mental.

—   Le comentaba que es su turno para presentar su trabajo final pero al parecer estaba pensando en quien sabe que cosa, ¿necesita aire fresco? Parece que acaba de ver al mismísimo coco. —   Escuchó como sus compañeros soltaron al unísono una risita simpática, disimuladamente buscó con la mirada a Seokjin, cuando lo miró se topó con sus ojos mirándolo muy seriamente.

Jin movió sus labios tratando de decirle algo, y  con muchísima claridad entendió lo que quería decir:

"Te sales del salón y te traigo de las greñas".

Miró de nuevo a Pablito y sonrió con nerviosismo comenzando a pararse de su asiento, tomó su cuaderno donde hacía sus trabajos de plásticas, debía ponerse frente al salón para comenzar su discurso, con cada paso que daba sentía sus piernas más pesadas y su corazón latiendo con más frecuencia.

Cuando llegó al frente suspiró tratando de calmarse aunque claramente no sirvió para una mierda.

Miró su cuaderno y abrió la página donde estaba plasmado ese rostro que ahora lo miraba al igual que todo su curso.

Era ahora o nunca.

Además de que, si no lo hacía reprobaba así que, ¿podía salir corriendo? No. ¿Tal vez llorar y fingir que nunca ha amado a nada y que por eso no hizo el trabajo? ¡Por supuesto que no!

Sacudió su cabeza borrando esos pensamientos, todos estaban esperándolo.

—   B-Bueno, uhm, buenos, buenos días. —   Se aclaró la garganta, su mirada se dirigía a todos excepto a Jimin, si lo veía seguramente se pondría a llorar.

—   Y-yo, yo lo que...— Miró a Jin, una vez más formó con su boca una frase, también la entendió a la perfección:

"Tú puedes".

—   Lo que más amo es..—   Continuó esta vez con más seguridad en su voz. —   Es..., ¡es él! —   Giró rápidamente su cuaderno hacia la clase, dejando expuesto su trabajo a todos los ojos ahora sorprendidos de sus compañeros y maestro.

"¡Es Jimin!"

"Woah, dibuja muy bien."

"¡¿Le gusta Jimin?!"

"¡Que bonito!"

"¡¿No mamen como que le gustan los hombres?! ¡Wey qué pedo o sea que sí tenía oportunidad!"

Decidió ignorar completamente los murmullos y comentarios que alcanzó a escuchar y prosiguió.

—   Él, él es la persona que más amo, lo que más amo. —   Se formó silencio, todos atentos a lo que Jungkook decía. —   Y, lo amo porque, cuando está conmigo ya no siento frío, cuando pienso en él se siente acogedor, no sé cómo explicarlo pero simplemente el tenerlo a mi lado encuentro paz, con su sonrisa, mi corazón va deprisa. Es él a quien amo, es él porque... me enamoré...—   Entonces lo miró.

what he loves the most  ◡̈  kookmin mini au Donde viven las historias. Descúbrelo ahora