1 AL PRINCIPIO...

23 2 0
                                    


Niall James Horan nació el 13 de septiembre de 1993. Maura, su madre, y su padre Bobby lo criaron en la población de Mullingar, condado de Westmeath, Irlanda. Tiene un hermano mayor que se llama Greg y que es seis años mayor. Durante los cuatro primeros años de la vida de Niall, la familia Horan vivió en una calle del núcleo urbano. Los recuerdos que tiene lo sitúan en la calle, jugando con su tractor de juguete. Durante estos años de formación Niall pasó la mayor parte del tiempo detrás de su hermano y de los amigos de su hermano, ya que la zona en la que vivían escaseaban los chicos de la edad de Niall, lo que implica que tuvo que trabajar duro para hacerse notar y para que lo aceptaran. Cuando el Herald le pidió a Greg que describiera a la familia en la que Niall había crecido, dijo: << No éramos más qué personas corrientes.>> Es una definición sencilla, pero de lo más correcta: Niall fue un chaval corriente de un pueblo corriente y como tal fue el chiquillo corriente que se desplaza con los ojos bien abiertos siguiendo a su hermano mayor.
Hay quien cree que el orden en que uno nace en el seno de la familia --como primogénito, o hijo mediano, o último, o bien como hijo único-- tiene un efecto significativo sobre el caracter y la experiencia de la vida. Niall es del grupo llamado << últimos en nacer >>, es decir, pertenece al grupo de niños que se benefician por el hecho de ser el centro de atención. Como dice Linda Blair, autora americana y experta en psicología del desarrollo, en ese libro suyo tan influyente llamado Birth Order (<<El orden de nacimiento>>), <<los últimos en nacer tienen un caracter extravertido, encantador y brillante: a menudo, cuando están con otras personas, son aquellos quienes cargan con la responsabilidad de la diversión.>> Como seguramente corroboraran todos los que hayan asistido a una entrevista periodística de One Diretión, las palabras de Blair describen rigurosamente a Niall. Y también reflejan su comportamiento desde que era pequeñito: la autora aduce asimismo que los últimos en nacer destacan a menudo tanto por su creatividad como por su deseo de aceptar riesgos. En un plano no tan positivo, son también vulnerables a los complejos de inferioridad y la baja autoestima, y descepcionarlos resulta muy fácil. También pueden resultar manipuladores. Mas adelante volveremos sobre cada una de estas tendencias, a medida que la historia de Niall vaya desarrollandose en los capítulos siguientes.

Niall HoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora