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Kylie Fox

No podía dejar que continuase, le agarré y le acerqué hacia mi para poder besarlo, ese beso que hacía mucho que no daba, ese beso que desprendía deseo, desesperación y sobre todo una respuesta al mensaje de Greco. Nos separamos ambos por falta de aire, nuestras frentes quedaron unidas haciendo que el aliento de cada uno se juntase en aquel pequeño espacio que quedaba entre nuestros labios.
Como siempre, alguien tenía que interrumpir aquello, la puerta del restaurante se abrió dejando ver a Volkov.

Volkov: Siento si he interrumpido algo pero la cena está apunto de empezar, supongo que querréis comer algo, aunque ya hayáis empezado. Diría esto último mirando hacia el suelo mientras volvía a entrar.

Tras ver como Volkov entraba, Greco cogió mi mano delicadamente haciendo que ambos entrelazásemos los dedos y comenzó a andar hacia la puerta.

Restaurante

Las miradas recayeron sobre la pareja de Greco y Kylie, la mayoría se quedaron sorprendidos, otros extrañados y los demás emocionados, Kylie se acercó hacia el gigantesco árbol de Navidad que decoraba los alrededores del reservado que tenía el CNP y dejó sus regalos para las personas más importantes en él. Tras dejarlos, ambos se sentaron juntos cerca de Winter, Conway, Volkov, etc.
Los camareros comenzaron a traer platos y platos sin parar, en esa mesa que parecía inmensa, ahora con toda la cantidad de comida que había sobre ella se quedaba pequeña, ya no entraban muchos platos más pero ellos seguían trayendo cosas.
El ambiente q tenía el restaurante era maravilloso, risas, gritos, alguna que otra charla y todo esto mientras el CNP comía toda la cantidad de platos que había en la mesa.
Pasadas un par de horas decidieron ir todo junto al árbol para ir a abrir los regalos.

Kylie Fox

Todos nos acercamos al gigantesco árbol lleno de todo de regalos, desde los más grandes a los mas pequeños. Varios compañeros empezaron a entregar regalos, tras ver que de momento ninguno era para mi busqué con la mirada a Greco pero no le encontraba, segundos después le tenía abrazándome por la espalda. Segundos después noté que una especie de cadena metálica rodeaba mi cuello y eché la mirada hacia él, Greco me estaba poniendo una pequeña cadena con una mariposa en el centro. Me di la vuelta y le miré con algo de ternura, se acercó hacia mi y dejó un tierno beso, algo que hizo que me muriese de ternura por dentro.

Greco: ¿Te gusta?

Kylie: Me encanta. Sonreiría. No sabía muy bien que regalarte, espero que te guste. Se acercaría al árbol para poder coger el regalo de Greco.

Greco: Abriría la caja y sonreiría, sacaría las gafas de su interior y se las pondría. Bueno que, ¿cómo me quedan? Posaría mientras Kylie reía ligeramente.

Kylie: Ahora vuelvo, voy a darle mi regalo a Winter.

Fui en busca de Winter para darle su regalo, en cierta manera me esperaba que a Winter le gustasen las guitarras asique ese era mi regalo para ella.

Kylie: Mi niña toma. Le daría la guitarra envuelta.

Winter: La miraría con ilusión y la desenvolvería con rapidez. Me encanta, gracias. Diría abrazando a Kylie.

Kylie: A ver cuando me tocas alguna canción.

Winter: Si pero solo si cantas tu.

Kylie: Mmmm me lo tendré que pensar.

Winter: Porfa porfa porfaaa. Suplicaría.

Kylie: Venga boba. Reiría y dejaría un beso en su frente. Toma las llaves del coche, no quiero que vuelvas andando hasta allí. Sacaría las llaves de su bolso y se las daría.

Winter: ¿Y tu como vas a volver?

Kylie: No te preocupes, me pilla más cerca que a ti. Se despedirían con un abrazo.

Kylie Fox

Salí del restaurante, encendí un cigarrillo y fui caminando hasta el banco más cercano para poder sentarme ya que los tacones me estaban matando. Estuve unos minutos en aquel banco sentada, necesitaba ir a un lugar más alejado, un lugar que me trasmitiese tranquilidad en cualquier situación, la playa.
Las calles estaban iluminadas por las luces de las casas y por las de la propia calle pero siempre iba a seguir oscuro, Los Santos nunca fue un lugar tranquilo, siempre acechaba el mal, cualquier día a todas horas.
Tras unos 10 minutos por fin llegué a la playa, la brisa de esta golpeó mi cara, esa brisa que por mucho frío que haga siempre es bienvenida, por lo menos para mí, me quité los tacones y me adentré en la playa con ellos colgando sobre las tiras de estos en un par de dedos en mi mano izquierda.
Me acerqué a la orilla dejando que el final de las olas llegaran a más de la mitad de mis pies, suspiré y miré hacia el horizonte, me preguntaba si habría alguien al otro lado de aquel mar pasando un buen rato con alguna persona que le hiciera feliz o simplemente pensando algo parecido a lo que estaba pensando yo, siendo sinceros no tendría que estar adelantándome a los hechos porque todavía no ha pasado nada pero siempre he querido ir 2 pasos por delante aunque muchas veces no salga como tenía en mente.

Greco Rodríguez

Eché la vista hacia atrás para ver donde estaba Kylie pero no la vi en el restaurante asique supuse que estaba fumando fuera, salí a comprobarlo pero no la vi en ninguna parte, me parecía extraño que se hubiera ido a casa sin avisar asique la llamé.

Kylie: ¿Si? Tendría la voz entrecortada.

Greco: ¿Te has ido a casa? 

Kylie: Emm... Sí, si... Me- me encontraba mal, perdón por no avisarte.

Greco: Vale ahora la verdad Kylie.

Kylie: Es la verdad, no sé por qué piensas que no lo es.

Greco: Si no me lo quieres contar lo entiendo pero tampoco me mientas, buenas noches. Diría algo serio y colgaría la llamada.

¿Realmente eres tu el correcto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora