0

4 1 0
                                    







— Violet, ¿Qué se supone que estás haciendo ahí parada? — Me preguntó mi mejor amiga, Ivy, desesperada.

—Perdona, Ivy. Ahora voy.

Intenté darme prisa por varios motivos. Primero, para que mi amiga no se desesperara todavía más por mi tardanza y segundo, para que no me pillara viendo a Jack.

Jack es un chico maravilloso. Sus ojos son azules como el cielo y tiene un color de cabello tirando a rubio oscuro. Es bastante alto y apuesto. Sus rasgos son bastante masculinos y con solo su presencia hace que mis piernas tiemblen de los nervios.

Ese chico me traía mal.

¿Y yo? Pues digamos que no soy la persona más discreta del mundo.

—¿Ya estabas viendo a Jack?

Mierda, atrapada.

—¿De qué hablas?

—A mi no me puedes engañar, querida.—Pronunció haciendo énfasis en la última palabra— Sé que te mueres por él, siempre que lo ves tienes la misma expresión que cuando yo como chocolate.

Lo admito, me hizo gracia como lo dijo y también el hecho de que se diera cuenta de todo. Ivy y yo nos conocimos hace poco, unos 2 años concretamente. Su familia se mudó de Fiore a Aria. Ella entró a mi instituto y por casualidad cayó en mi clase. En seguida nos hicimos amigas. Encajamos a la perfección, como si toda nuestra vida hubiéramos estado destinadas y que ahora se nos diera el momento de poder estar juntas.

Suspiré y le di la razón.

—¿Sabes? Creo que podría ayudarte, mi hermano es amigo de Jack.— Eso me pilló totalmente desprevenida. Miré a Ivy como si fuera la persona que solucionaría todos mis problemas.

El hermano de mi mejor amiga.

No sé mucho de él, sólo que se llama Oliver.
En nuestros dos años de amistad he estado con él unas cuantas veces, no muchas, y es una persona que no deja ver su interior fácilmente. Se notaba que era de ese tipo de personas que se encierran en sí mismos y son capaces de esconder sus emociones ante los demás. Siempre llamó mi atención pero nunca tuve la oportunidad de conocerle lo suficiente. Es 3 años mayor que nosotras, él tiene 21 y nosotras 18. Quitando esos datos que al fin y al cabo no son tan relevantes, no sé mucho más sobre su vida.
Todas las veces que hablé con él me pareció una persona amable y que tiene mucho que enseñarle al mundo.

Que Oliver conozca a Jack hacía las cosas interesantes.

GRIETASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora