one-shot [Acelu] 2

Cantaré (mi amor) para ti 3/3

Lluvia... Ace solía odiarla; luego aprendió a gustarle, pero ahora ya no sabía cómo sentirse al respecto. La razón era simple y tenía un solo nombre: "Luffy"murmuraron sus labios mientras miraba por la ventana de su habitación. Ace no veía al chico desde el día que descubrió la verdad detrás de su relación con el otro bastardo afortunado. Aunque iban a la misma escuela, Ace evitaba todos los lugares donde sabía que estaría el otro adolescente. No era que no quisiera verlo; quería, tanto que apenas podía contenerse, pero aún así no podía hacerlo. Le dolía sólo pensar en el chico, así que Ace ni siquiera quería pensar en cuánto le dolería verlo. Argh, se estaba deprimiendo de nuevo. Por eso no podía pensar en Luffy. Debería vestirse e ir a la escuela como siempre. Eso, al menos, distraería su cerebro. Sí, eso es lo que haría.

Aún así, el suave golpeteo de la lluvia contra la ventana, lo hizo sentir nostálgico. Inevitablemente, mientras vestía su uniforme escolar, Ace recordó el día en que conoció a Luffy y la forma en que se enamoró fácilmente del chico.

La gran mano de Ace agarró su paraguas transparente del medio de tantos más. Usualmente a esta hora del día, más aún si estaba lloviendo, ya no habría mucha gente en la escuela. Pero hoy parecía ser diferente por alguna razón. ¿Quizás era algo relacionado con las actividades de los clubes, por lo que la gente se había quedado atrapada en la escuela...? Bueno, de cualquier manera, a él realmente no le importaba. Muy pronto se iría de todos modos.

El adolescente presionó el pequeño botón del paraguas y con un clic se abrió. No estaba tan apegado a los paraguas en verdad, sin embargo, como tenía su guitarra, no podía permitir que se mojara, así que prefirió protegerla. Su paraguas era lo suficientemente grande como para cubrirlo, su guitarra que estaba dentro de su bolso sobre su hombro y una persona más. Si no fuera por su madre, su paraguas sería uno de los más pequeños. Pero la mujer quería que él se cubriera lo mejor que pudiera, entonces, ¿quién era él para desobedecerla?

Más que listo para irse, Ace apoyó el paraguas contra uno de sus hombros, cuando de repente una mano sobre su brazo junto con una voz alegre lo interrumpió.

"Né, ¿puedes compartir tu paraguas conmigo hasta la estación?"

Ace miró la fuente de esa voz desconocida, y sus ojos vieron a un chico no mucho más joven que él, pero en comparación más bajo que él por un par de pulgadas. El chico le devolvía la mirada con una sonrisa muy grande en los labios iluminando sus ya vivaces facciones de una manera increíble. Y, sin una razón aparente, el corazón de Ace se aceleró al ver esa sonrisa. No... No solo la sonrisa del chico, sino el propio adolescente. Ace nunca había visto a alguien como él; sonriendo tan brillantemente, tan puramente a otra persona sin una razón especial. La sonrisa del chico había llegado a su corazón tan rápido y tan fácilmente, que apenas podía creerlo.

Si eso no hubiera sido suficiente, cuando trató de formar palabras para responderle al chico, lo único que su boca dejó escapar fueron tartamudeos incoherentes. Sintió un repentino calor en sus mejillas y oídos, e incluso sus manos comenzaron a temblar cuando agarró el paraguas que ahora se sacudía muy suavemente contra su hombro. Ace se quedó quieto, mirando al chico más joven y tartamudeando como un idiota. ¿Cuál demonios era su problema? Nunca antes se había comportado de esa manera.

El chico frunció el ceño confundido. "¿Qué? ¿Qué pasa? No entiendo lo que dices". Dijo lo obvio, cruzando los brazos e inclinando la cabeza hacia un lado de una manera divertida.

"Caray, que no me entiendes, ya lo sé". Ace pensó sintiéndose aún más avergonzado.

"Yo... Qué... Tú... No..." Lo intentó de nuevo pero el resultado fue el mismo.