﹏﹏I n t r o ❲ 🍎 ❳ d u c c i ó n﹏﹏
Yoongi es el hijo de la villana más temida de todo el mundo de los cuentos de hadas: Maléfica. Esta todavía tiene cierto rencor hacia los reyes de su mundo: La bella durmiente y el príncipe encantador, por lo que m...
Jimin huyó después de lo ocurrido con Yoon en lafiesta. En la escuela se filtró un video de ellos, pero Jin se encargó de que todos creyeran que era falso. Yoongi fue a buscar a Jimin.
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Un pequeño príncipe se despertaba gracias a algunos animales del bosque que se habían acercado a observar a su próximo rey con curiosidad. Hacía ya varios años que no veían a algún príncipe o rey por el bosque. Desde que la tecnología y la magia se desarrollaron todos habían dejado de ir al bosque para quedarse en casa practicando hechicería o simplemente con algún aparato tecnológico.
—Hola, pequeños. —Saluda feliz el pequeño príncipe.
A lo lejos Jimin vió que se acercaba a él una de las pequeñas haditas del bosque con un tazón lleno de frutas. El joven tomo el tazón agradecido y comió gustoso toda la comida ofrecida. Luego de eso se dió un extenso baño en un hermoso lago de los alrededores mientras escuchaba a los pájaros cantar.
Aunque sea por ese día, había decidido que se olvidaría de todo y cada uno de sus problemas. No quería pensar en lo que había hecho con Yoongi la noche anterior, aunque muy en el fondo sabía que el pelinegro no lo había obligado a hacer algo que él no quisiera y que a pesar de todo le había gustado.
Además tenía muy en mente que apenas pusiera un pie en la ciudad sería un príncipe muerto, sus padres no estarían para nada orgullosos y tal vez el príncipe azul de su cuento no quisiera estar con él por el simple hecho de ya no ser virgen.
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Habían pasado varias horas desde que comenzó su búsqueda y el pelinegro estaba a punto de rendirse. Se le estaba haciendo bastante complicado encontrar al molesto príncipe y eso lo tenía con más mal humor que de costumbre.
Ya exhausto decidió parar un rato para descansar y que su caballo tomara agua y comiera un poco de pasto. Amarró al animal a un árbol cerca de un pequeño río y se recostó un rato en la hierba.
—¿Dios, en qué me metí? —Pensó en voz alta el pelinegro.
Después de un rato de divagar en sus propios pensamientos se quedó dormido
Al despertar no supo como pero ya no estaba en el río, ahora se encontraba en una especie de aldea rodeado de animales y hadas del bosque. Rápidamente se levantó y se puso a la defensiva. Nunca le habían gustado los animales, solo le agradaba su dragón y uno que otro cuervo. Y de las hadas ni hablar, le daba náuseas el simple echo de estar cerca de esos seres que al parecer solo sabían irradiar felicidad.
Estaba dispuesto a irse lo más lejos de ahí posible, hasta que la voz de cierto príncipe lo detuvo.
—¿Yoongi... qué haces aquí?—Menciona detrás de él.
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