The Loud House: Hora de ser Yo

Nuevo albino

-Ay amigo, creo que aquí estoy mas a salvo que en mi propia casa. -dijo con cansancio un chico de 11 años, que tenia un peculiar cabello de color blanco, usaba una camisa polo color naranja de manga corta, jeans azules y unos zapatos blancos con detalles de color rojo. 

Este chico responde al nombre de Lincoln Loud, quien viene de una familia sumamente grande, en la que aparte de ser el hijo de en medio, era el único hijo varón de 11 hijos en la ciudad de Royal Woods, en el estado de Michigan.

-Vaya Lincoln yo, siempre he sabido que tus hermanas pueden llegar a llevar sus problemas a escalas sin duda ridículas, pero esto lo sobrepasa. -dijo algo asombrado un chico de la misma edad que el albino, pero el tenia la piel morena y el cabello oscuro, ademas de llevar puestos unos anteojos, camisa manga larga de rayas azules y amarillas, con pantalones y zapatos negros.

Este muchacho se llama Clyde McBride, quien es el mejor amigo del joven Loud.

Los dos se encontraban en este momento en la sala de la casa McBride, y el albino le hablaba a su mejor amigo acerca de lo que ha pasado en los últimos días por una sola razón...

El Protocolo de Pelea de Hermanas.

Algo que se origino por causa de una pelea entre sus dos hermana mayores Lori y Leni quienes, se pelearon por lo que el creía que era la cosa mas estúpida en la historia... haber comprado ambas el mismo vestido.

Pero en si no era eso lo que le molestaba, lo que lo hacia enojar era que a el lo dejaba fuera de eso y, parecía que el fuera el que menos derecho tenia de poder moverse en libertad dentro de su propia casa.

Viendo que el problema estaba lejos de terminarse, el mismo trato de arreglar las cosas pero, al final todo salio mal y eso hizo que el resto de sus hermanas se crearan una trifulca entre ellas mismas.

Desde que tenia memoria, las cosas en la casa Loud siempre han sido caóticas, las peleas son algo por así decirlo una cosa del día a día ahí, pero esta vez sentía que no fue el caso.

Esta y, pedía perdón si siquiera lo pensaba pero, sus hermanas son muy estúpidas al pelear por tonterías mundanas. 

-Amigo yo, realmente no se que decirte ante todo esto. -dijo Clyde viendo con lastima a su mejor amigo.

-Ah esta bien Clyde, créeme no hace falta que digas algo, es solo que a veces es increíble por lo que unas chicas pueden llegar a pelearse, es decir de las que tu y yo conocemos en la escuela pues no son exactamente gente superficial, pero en el caso de mis hermanas es mas complicado que eso, es como si dejaran que las diferencias entre ellas sin mencionar las cosas por las que llegan a pelearse son algo muy constante en mi casa, y lo peor de todo es que mis padres en vez de ponerles un alto se esconden en su habitación hasta que el problema se tranquiliza. -dijo Lincoln con lo ultimo sonando claramente frustrado.

-Ah si la verdad, tus padres son buenas persona Lincoln pero, con tantas hijas las cosas casi siempre se les termina por salir de control, créeme que eso ya lo he visto en mas de una ocasión. -dijo Clyde a la vez que se sobaba el puente de su nariz por debajo de sus lentes.

-Si, ni falta hace que lo menciones. -dijo Lincoln todavía frustrado.

Es decir, el quería mucho a sus padres si, pero en serio que el tener tantos hijos los ha afectado, hasta llegar al punto en el que no podían controlar bien a sus hijas.

-Bueno, ¿y que es lo que vas a hacer ahora amigo? -pregunto Clyde a la vez que arqueaba una de sus cejas.

-Ah, mira creo que lo mejor es, que por ahora no muestre mi rostro en casa, después de lo que paso, creo que yo soy por mucho la ultima persona que mis hermanas quisieran ver en este momento. -dijo Lincoln a la vez que se pasaba una mano por su cabello.

Sin embargo, en ese momento el albino escucho que algo estaba vibrando dentro de uno de los bolsillos de su pantalón, por lo que mente la mano en dicho bolsillo y del mismo saca su teléfono que era lo que estaba sonando.

-¿Que pasa? -pregunto Clyde aun con su ceja alzada.

-Es mi papa. -dijo Lincoln para luego aceptar la llamada y poner el dispositivo sobre su oreja, -Hola papa, ¿que sucede? -pregunto para poder empezar con la llamada.

-Hola hijo, oye, ¿donde te encuentras ahora? -pregunto Lynn Sr. quien se encontraba al otro lado de la linea telefónica. 

-Estoy en casa de los McBride pero, oye creo que no voy a ir a la casa hoy, estoy seguro de que con las chicas ahí las cosas han de ser un verdadero caos, creo que es mejor que por ahora es mejor que no me aparezca. -dijo Lincoln a la vez que se sobaba el puente de su nariz.

-Se lo que dices campeón y, te entiendo la verdad, se que como padre no he hecho bien las cosas, es decir mírame ahora si pudieses, estoy encerrado con tu madre en nuestra habitación porque como acabas de decir, ahí es como una maldita jungla a la que no me atrevo a entrar. -dijo Lynn Sr. sonando entre frustrado y a la vez avergonzado.

-Si me lo imagino, esta bien papa yo, se que con el paso del tiempo ha sido difícil el criar tantos hijos, pero si admito que lo único que en serio de todo esto es, que por eso mismo las cosas se salgan por completo de control, si ya has visto como es que mis hermanas se llevan entre si en este momento, no me quiero ni imaginar como seria si siguen de ese modo y cuando ya cada una este yendo por su propio camino. -dijo Lincoln a la vez que se sobaba la frente de tanto estar pensando en lo que podría ser el futuro.

Y es que era cierto, de un modo u otro había que buscar el modo de poner a sus hermanas bajo cierta clase de control, de otro modo...

Je, realmente le pesaba imaginar en cualquier tipo de posibilidad con esa clase de situación.

-Si hijo lo se, es por eso que te pido que no seas como yo, no dejes que el hecho de ser superado en numero te detenga, que muestres la cara y no la escondas, no llegues a oprimir lo que pienses y no corras a esconderte... he estado cometiendo demasiadas veces ese error y... por eso te lo digo, hazlo mejor que yo. -termino de decir Lynn Sr. quien, en todo momento hablo como si las palabras salieran desde lo mas profundo de su ser.

A estas alturas, el joven de cabello albino estaba con cara de encontrarse atónito, sin palabras de las que el fuera capaz de dejar salir de su boca.

Pero si era capaz de entender lo que su padre le estaba diciendo: que el debía de saber tomar principalmente las riendas de su vida.

-Esta bien papa, te prometo que haré las cosa bien tanto ahora como en el futuro, puedes darlo por seguro. -dijo Lincoln sonando claramente determinado.

-Es bueno saberlo se que así vas a ser mejor que yo, me tengo que ir cuídate mucho Lincoln, te quiero hijo. -dijo Lynn Sr. sonando claramente verdadero en cuanto a lo que estaba diciendo.

-Yo también. -dijo Lincoln para luego colgar y dar la llamada por terminada.

-Lincoln, ¿que es lo que planeas? -pregunto Clyde al ver la expresión en el rostro de su amigo.

-Lo que le acabo de prometer a mi padre Clyde, si quiero hacer bien las cosas debo de crear un nuevo yo... crear a un nuevo Lincoln Loud. -dijo Lincoln quien se oía muy serio con lo que decía.

Uno a simple vista tomaria el día sin mucha importancia, pero este día en especial marcaba algo.

Marcaba un nuevo inicio para el nuevo Lincoln Loud.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí el capitulo espero que les guste.

Para darle un buen final y despedida al mes de Julio, comenzar uno de los estrenos que ya tenia preparado, y aquí esta.

Es todo por el día de hoy, los invito a que dejen su voto si les gusta el capitulo, ademas de que también los invito a que escriban sus opiniones sobre el capitulo en los comentarios, hasta pronto.

Bye.