El vecino de al lado

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Harry

Hoy no fui a la escuela, estudio botánica y aunque no lo crean me aburro demasiado. Me levanto de la cama, tal vez hoy al fin conozca a Louis.

Camino al baño, hago mis necesidades y me doy una ducha refrescante, después de 1 hora me dirijo a su casa.

Toco la puerta.

No se escucha nada.

Toco nuevamente.

Se escuchan voces y se aproximan más al parecer.

Abren la puerta.

Es el chico que anteriormente me abrió y hay otro más, el otro esta sin playera y se pueden ver cada uno de los tatuajes que tiene a la vista.

—Hola —hablo fuerte para que me escuchen ambos—, ¿esta Louis?

El de tatuajes niega —No.

—Pero llegará pronto —dice el rubio—, si quieres esperalo.

Se hace a un lado dejándome pasar, lo pienso y hasta ahora este es el mejor acercamiento.

Entró.

—Esta bien —les sonrió—. ¿Y cómo se llaman?

—Zayn.

El otro chico desaparece entre las habitaciones, parece que siempre trae un mal humor. Si el pelinegro es Zayn entonces el rubio es Niall.

—Un gusto, yo soy Harry.

—El gusto es mío. Disculpa a Niall, no la esta pasando bien.

—No importa, aveces hay días muy malos.

Mi celular suena, es Liam.

—Hazz, ¿puedes venir a mi casa?

—¿Justo ahora?

—Sí, por favor —ruega.

—Ya voy.

Cuelgo y suelto un suspiro.

Pierdo mi oportunidad nuevamente.

Me despido de Zayn para correr con Liam.