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-hyunjin, ¿por qué sigues ignorándome? ¿dónde estabas ayer? -youngmi le preguntó mientras lo seguía a su oficina.
hyunjin tenía los ojos en blanco mientras se arreglaba la chaqueta y llamaba a seungmin por teléfono, youngmi extendió la mano y lo sostuvo del hombro cuando hyunjin se encogió de hombros y la miró.
-estoy ocupado en este momento, así que por favor deja de molestarme. eres una molestia-. hyunjin se burló y abrió la puerta de su oficina, la otra se detuvo en seco claramente herida por sus palabras.
-¿no podemos tener una cita después del trabajo? ¿o simplemente pasar el rato? ¡claramente has estado evitandome! ¡papá dijo que debería mantenerte en el camino! ¡nos vamos a casar, hyunjin, solo acéptalo! -dijo enojada y hyunjin la miró desde su asiento, pero decidió que no valía la pena discutir.
seungmin entró en la habitación unos momentos después y hyunjin suspiró de alivio. el más joven se inclinó ante youngmi claramente fingiendo una sonrisa y ella le devolvió la reverencia.
-realmente estoy ocupado hoy, ¿verdad, seungmin? -hyunjin lo miró y el más joven sonrió un poco.
-sí, el señor hwang tiene dos reuniones esta tarde y noche, los documentos de la semana pasada vencen mañana, así que me quedaré con el señor hwang para terminarlos a tiempo. si necesita algo, puedo pedirle a la señorita yeon que venga hacerle compañía y a ayudarle. -seungmin dijo cortésmente.
youngmi frunció el ceño claramente por la frustración, pero los dos hombres rezaron internamente para que los dejara en paz.
-bien. pero me quedaré aquí en la oficina de hyunjin y los veré trabajar. mi padre tiene que verlo traerme a casa, hyunjin. tienes que causar una buena impresión -sus palabras solo hicieron sonreír a hyunjin y seungmin tuvo que darse la vuelta para no reírse.
-no me importan las buenas impresiones, conduce hasta tu casa si quieres.
-¡sólo hazlo, hyunjin! no querrás hacer enojar a tu padre, ¿verdad? -ella preguntó y hyunjin puso los ojos en blanco, accediendo a llevarla a casa para hacerla callar.
youngmi se sentó en la esquina más alejada del enorme sofá y decidió mirar televisión.
-joven kim, trae a ehwa. por favor, necesito compañía -seungmin suspiró y sacó su tableta, contactando a la empleada favorita de youngmi para que la ayudara.
(...)
-no tiene remedio -youngmi suspiró, mientras ehwa se sentaba a su lado. youngmi desvió su atención para mirarla con ojos tristes. -no entiendo, parecía que yo le gustaba cuando éramos niños hasta la escuela secundaria, pero no sé qué pasó. ¿hay algo malo en mí? ¿por qué no me quiere? -preguntó y ehwa le sirvió un poco de té.
-ustedes dos se van a casar de todos modos, además de que no se le permite salir con nadie o de lo contrario está jodido.
-lo sé. -youngmi suspiró y arregló su cabello. -pero no me concuerdan las cosas que él pueda estar saliendo con otras chicas cuando yo no estoy cerca. -dijo, bebiendo un poco del té caliente que ehwa le preparó. ella sonrió en busca de consuelo.
-poco probable, quiero decir, siempre está en la empresa trabajando. la única vez que se fue temprano fue ayer -ella le dijo y le aseguró que no se preocupara mucho por eso.
(...)
-¿cómo te fue ayer? parece que tuviste bastante resaca esta mañana, no me digas que te emborrachaste anoche. -seungmin miró a hyunjin con el ceño fruncido y habló en voz baja para asegurarse de que nadie escuchara su conversación.
-no te preocupes, la pasé de lo mejor -hyunjin sonrió, pero pronto vaciló después de escuchar una voz persistente en el fondo de su memoria de la noche anterior, la persona con la que la pasó.
"cierra los ojos, contaré hasta tres, así que trata de encontrarme."
-¿quien era ese? -hyunjin murmuró a lo que seungmin escuchó.
-¿quién era quién? -preguntó mientras tocaba su tableta, arreglando el horario de hyunjin para la próxima semana.
-n-nada... seungmin, te gustan los chicos, ¿verdad?-, preguntó.
-sí. -seungmin respondió, todavía ocupado con su trabajo.
-¿siempre has sido así o simplemente sucedió?
seungmin pensó por un momento antes de sonreír, sonrojándose.
-bueno, para mí, nunca me han atraído las chicas. pero supongo que tampoco me gustaban mucho los chicos. no creo que me guste nadie más que felix -dijo sonriendo dulcemente y hyunjin asintió, sumido en sus pensamientos sobre ese chico lindo que conoció anoche.
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