Título: Exámenes de Chunin en pausa.
Naruto esperaba caer en pedazos.
Esperaba ser un desastre lloroso y lloriqueante. Ver ese rostro de nuevo... Después de lo que le hizo perder a la persona a la que pertenecía, sería natural. Pero... estaba enfadada.
No.
Estaba furiosa.
El chakra de Kyuubi se precipitó en sus espirales, una sola cola irritada de color naranja quemado se agitó detrás de ella. Dos largas orejas de zorro se formaron sobre su cabeza, y su cabello se erizó a su alrededor por segunda vez ese día, sus ojos eran pozos profundos de magma hirviendo, tan vengativos como el mismo Nueve Colas.
"¿Quién diablos eres?" exigió Naruto. "¿Es esto algún tipo de broma enferma? ¿Crees que esto es divertido?"
El rostro de Shisui se aflojó en alarma. Pero no fue él. Era falso. Shisui estaba muerto. Naruto fue quien lo puso a descansar. Ella sabía que él se había ido. Porque ella fue quien lloró sobre su tumba y le habló, sabiendo que él nunca podría, nunca respondería.
El ojo derecho del falso estaba cerrado, el izquierdo muy abierto mientras tomaba la apariencia de la rubia enfurecida.
'El derecho se ha ido... ese es el que robó Danzo...'
"¡E-espera!" El falso aulló. "¡Y-yo puedo explicarlo! ¡Por favor!"
"¡Te voy a matar!" La rubia rugió.
"Naru-"
"¡No me hables con su voz cabrón!"
Naruto se acercó a él, el chakra de Kyuubi se encendió, dos brazos naranjas burbujeantes con un terrible chakra se dispararon hacia el intruso, manos con garras envolvieron su cintura, atrapando sus brazos a los costados. Hizo una mueca leve cuando el chakra devoró su piel como ácido, chisporroteando y explotando.
"Cuando termine contigo, ni siquiera serás un cadáver ensangrentado. ¡Te convertiré en una maldita pasta!" Naruto gruñó.
"Naruto..." El falso le sonrió con los labios de Shisui. Y casi borró algo en la rubia.
Fue...
Al igual que...
Como cuando ella solía ser cruel con él... y él nunca podía enfadarse con ella... u odiarla...
"Naruto, te amo".
"¡Cállate!" Naruto gritó, enviando al falso a estrellarse contra la pared del fondo, parándose sobre su forma arrugada en un instante. "¡Solo cállate y muérete, hijo de puta enfermo!"
La rubia levantó una de sus manos mejoradas con Kyuubi, los dedos flexionados y las garras listas para arrancarle la garganta al bastardo. Sin embargo, algo la hizo detenerse...
"Hombre…" El farsante murmuró desde su posición en el suelo. "Esto es peor que la vez que me vomitaste... todo lo que dije fue bienvenido a casa..."
El chakra de Kyuubi se disipó en un instante, sin ira para alimentar su fuego. Naruto cayó de rodillas mientras la angustia la consumía.
Sintió como si alguien le hubiera atravesado el corazón con un kunai y lo estuviera retorciendo lentamente para hacerla sufrir tanto como fuera posible. La rubia sintió que los puntos cuidadosamente colocados que había obtenido durante el último año se abrieron en un momento. Su corazón estaba sangrando. Se sentía tan confundida... y herida... y lamentable... y simplemente... triste.
"Naruto..." Esa hermosa voz susurró, comprensiva.
La rubia gritó.
No podía dejar de gritar.
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El poder del sacrificio humano. | 𝗦𝗵𝗶𝘀𝘂𝗡𝗮𝗿𝘂 |
Lãng mạnNaruto le prometió a su amado Shusui que nunca dejaría de recordar el amanecer. Ella le prometió a Itachi proteger a Sasuke y su aldea. Se prometió a sí misma que estaría a la altura de la imagen que Hinata tenía de ella. Le prometió a Jiji que nunc...
