~Todo lo que nunca llegamos a ser~

~CAP. 2~

(Jack)

Estaba llegando a casa cuando vi a una familia nueva al vecindario.

Vi salir del coche a una chica de más o menos 18 años.

Y sin ella darse cuenta se le cayó una prenda de alguna de sus bolsas; fui a recogerse la, cuando le toqué el hombro y ella se giró con una gran sonrisa, la cual me llamó mucho la atención, ella simplemente se dedicó a darme las gracias de manera vergonzosa.

Luego me dirigía a casa cuando volví a escuchar su voz.

X: ¿Esta es tu casa?

Me giré y la miré pero no dije nada, me di la vuelta para volver a casa y sin darme cuenta me salió una sonrisa.

Una semana antes cumplí los 29 años y para variar como todos los años nadie me felicitó, cogí mis maletas y me marché a Clovelly como todos los veranos.

Entré a casa a organizar el equipaje cuando vi que la ventana de la chica de antes coincidía con la mía .
La vi entrando en su habitación, estuve un rato mirándola sin darme cuenta, me atrapó mirándola y rápidamente nos escondimos los dos a la vez y escuche una carcajada suya y empezé a reírme yo también sin sentido.

Desde aquel momento supe que este verano iba a ser totalmente distinto a los anteriores.

Después de cenar me acosté en la cama pero antes me asomé a la ventana y la vi plácidamente dormida, me acosté en la cama y no paraba de pensar en su risa.

A la mañana siguiente salí a la ventana a fumar un cigarrillo como siempre, cuando al mirar su ventana la veo despertase, al levantarse de su cama me dijo:

X: buenos días - con una sonrisa.

La veo, no le dije nada y me centré en fumarme aquel cigarrillo.

X: ¿Porque eres tan borde?

Giré inmediatamente mi mirada hacia ella apoyando mis manos en el borde de la ventana.

Jack: ¿Y tu porque eres tan molesta? - la miré serio.

X: no has contestado mi pregunta .

Jack: eso no es de tu incumbencia niña,- le di una calada al cigarrillo- ahora contestame a mi pregunta.

X: no soy molesta, por lo menos no aparento ser aburrida y estirada - sonrió de manera sarcástica- si me disculpas voy a asearme.

Se retiró de la ventana y se dirigió a la puerta de su habitación.

Solté una pequeña sonrisa, tiré la colilla del cigarrillo y fui a asearme también.