𝘋𝘜𝘔𝘉𝘚 𝘉𝘖𝘠𝘚! | Rᴇᴇsᴇ & Mᴀʟᴄᴏʟᴍ

𝐈. La llegada

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ʟᴀ ʟʟᴇɢᴀᴅᴀ

Narrador omnisciente

El viernes por la noche, los Lewis iniciaban su viaje de carro desde Canadá hasta su nueva casa en los Estados Unidos. Por lo que deberían llegar mañana en la mañana.

Los Lewis eran una familia pequeña que consistía del padre, la madre y su única hija, al ser hija única sus padres eran muy protectores con ella, ya que, antes de que ella naciera sus padres intentaron muchas veces tener hijos y al ver que no lograban nada decidieron consultar con un médico. Dándoles la terrible noticia que el 99% de los resultados indicaban que no podían tener hijos.

Así que cuando descubrieron que Elizabeth -la madre- estaba embarazada fue como un real y auténtico milagro. Por lo que, llegando al punto, eran muy cuidadosos y protectores sobre su hija y sus cuidados.

Marlene los amaba demasiado pero muchas veces sentía que la iban a volver loca al seguirla a todas partes. En su antigua escuela no tenía ningún amigo y se burlaban de ella muchas veces. Está es la razón por lo que sus padres decidieron mudarse a un lugar no tan lejos, los Estados Unidos.

Esperaba que aquí todo fuera diferente, no padres tan protectores, más amigos, y menos lágrimas en las noches por saber que todos la odiaban.

Quería que todo fuera diferente.

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MARLENE POV

Después de un viaje no tan cómodo en carro, por fin habíamos llegado a nuestra nueva casa en los estados unidos.

Al llegar mis padres y yo nos dimos cuenta que los vecinos estaban realizando una venta de garage. Habían varias personas por lo que no tenía certeza de quienes realmente vivían en la casa.

Había una señora embarazada acostada en una silla amarilla. Llevaba una linda bandana azul en su cabello, tenía un vestido precioso igual azul, cabello marrón y corto, era un poco ondulado y caía hasta sus hombros, estaba hablando con un niño alto de suéter rojo con una sonrisa y cuando el niño giro hacia una anciana interesada en comprarlo algo, supuse que eran la familia que vivían en la casa.

La señora nos volteo a ver cuándo salíamos del coche, ahora con una mirada un poco decepcionada cuando su hijo -o eso suponía yo- pareció haber ahuyentado a la anciana. Ella nos saludo cordialmente agitando su mano a nuestra dirección haciendo que el niño mirara a nosotros también.

Yo igual lo mire a el, haciendo que nuestros ojos se conectarán, era algo lindo y se veía de mi edad, ninguno podía apartar la mirada y para ser sinceros no quería hacerlo, había algo en el que hacía que mi corazón fuera más rápido y mis manos sudaran, tal vez era porque mi cerebro pensaba que el podría ser mi amigo, un amigo real, no mamá ni papá, un chico de mi edad. La mano de mi papá en mi espalda me devolvió a la realidad y en un susurro me dijo.

-Saluda hija-.

Acto seguido despegue mi mirada del niño y voltee a ver a la señora y la saludé yo con mi mano -con la que no cargaba una caja con mis pertenencias-, por igual que mis padres.

Nos metimos a la casa y yo antes de entrar por completo mire de nueva a esa dirección y vi a la madre hablándole a su hijo, pero el no le prestaba atención alguna, porque estaba muy ocupado viéndome a mi, por lo que decidí saludarlo yo a él y le dirigí una de mis más brillosas y carismáticas sonrisas, el parado en su lugar alzó también la mano pero con una cara neutral, no sonrisas ni nada, y decidí mejor meterme a mi casa antes de hacer algún ridículo.

Después de un tiempo, cuando escuchamos unos gritos provenientes de afuera, mis padres y yo salimos de la casa un poco asustados y confundidos.

Era la señora embarazada gritándole a él mismo niño de suéter rojo pero ahora también había otra persona, el vestía una camisa de rayas azul. El aparentaba mi edad igual y estaba tan concentrada analizandolo cuando una camioneta se detuvo en la casa, de ella bajo un hombre gordo de lentes con camisa naranja y se tiró al piso gritando cosas raras.

Cuando otro señor bajo de la camioneta, este llevaba una radio algo vieja con unos audífonos, tenía una camisa verde.

Y de un coche negro bajaron dos hombres de traje negro y empezaron a seguir al señor con la radio, corrían detrás de el y yo los miraba emocionada. Parecía una película de acción.

Mis padres miraban horrorizados, cuando mi madre hablo.

-¿Qué le pasa a ese sujeto?

-No lo sé, parecen... agradables-Respondí.

- Si bueno, es mejor que nos metamos a la casa chicas, hay que descansar del viaje, esperemos llevarnos bien con esa familia- Hablo mi padre con un particular tono de rareza.

Acto seguido nos metimos a la casa, cenamos pizza entre risas y después vimos una película. En verdad agradezco la vida que me dan mis papás, los amo demasiado.

Después de la película fuimos a dormir, en mi cuarto solo había un colchón en el piso puesto que aún no metamos ningún mueble, me acosté pensando en la familia de en frente, parecían un poco raros, pero raros de la buena manera, espero poder hablar con sus hijos, y tal vez crear una amistad, podríamos ser como los tres mosqueteros.

Sonreí ante la idea y eso fue lo último que recuerdo antes de caer dormida en un sueño profundo. Mañana será un gran día, lo presiento.

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Author's note!

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Espero que les haya gustado el primer cap, medio chafa pero hago el intento,
los quiero mucho!
Gracias por leer y votar ✎ ✩
-Ximena-