𝐅𝐀𝐕𝐎𝐑𝐈𝐓𝐄 𝐂𝐑𝐈𝐌𝐄 ━━━ 𝐂𝐄𝐃𝐑𝐈𝐂.𝐃

𝐢. 𝐟𝐫𝐢𝐬𝐭 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐚𝐜𝐭

LOS NIÑOS Y JÓVENES SE ENCONTRABAN POR TODOS LOS ALREDEDORES, logrando llenar cada esquina en aquel callejón, las risas y todas esas voces podrían llegar a seguirte a cualquier lado en que pusieras un solo pie. Faltaban alrededor de dos semanas para que las clases en el colegio de Hogwarts de magia y hechicería, dieran finalmente inició después de unos meses de vacaciones, aunque aquello no era algo que le disgustaba mucho a la chica de cabellos marrones. Dentro de poco podría llegar a reencontrarse con sus mejores amigos y eso la emocionaba, había pasado todas sus vacaciones encerrada en su habitación y paseando por toda su casa, escribiendo un sin fin de cartas dirigidas a Hermione Granger, su mejor amiga desde hace casi tres años.

El callejón diagon se encontraba repleto, muchos se encontraban ahí para poder mirar la nueva saeta de fuego, la escoba más rápida de todo el mundo. Otros tantos simplemente miraban con sorpresa todos esos productos mágicos que vendían por ahí, siendo alguno que otro niño de padres muggles que no podía cerrar la boca de lo sorprendido que estaba. Aquello era un mundo completamente nuevo y maravilloso, Young aún lograba recordar cuando su carta de Hogwarts fue enviada, sus padres se alegraron demasiado y ella llevaba tiempo esperando a que está por fin llegará, cada que su hermana volvía siempre hablaba sobre las clases y lo genial que la pasaba, de lo mucho que le gustaba el Quidditch y lo grandiosas que eran sus amigas.

Después de que Cho entrara a Hogwarts fue rápidamente seleccionada a la casa de las águilas, Ravenclaw, sus padres se la pasaron diciendo lo orgullosos que estaban de su hermana durante casi un mes. Después de eso ambos tenían la esperanza de que la menor de las Chang quedará en la misma casa que su hermana mayor, pero para su mala suerte, el sombrero seleccionador —después de pasar casi cinco minutos decidiendo— había tomado la decisión de ponerla en la casa de los Leones, Gryffindor. Aquello, a pesar de no agradarle mucho a su padre, le alegró demasiado pues podría pasar mucho más tiempo con los nuevos amigos que había logrado hacer en el expreso de Hogwarts. Ron Weasley y el famoso Harry Potter, el niño que había logrado sobrevivir a la maldición asesino y quién había destruido a el mago tenebroso, Lord Voldemort. Además de que se volvió rápidamente amiga de una de sus compañeras de habitación, Hermione Granger, una hija de padres muggles a la que había visto en el expreso.

Su vida se había visto envuelta en muchos problemas y situaciones en las cuales jamás se habría imaginado estar, nunca se imaginó que terminaría rompiendo más de veinte reglas cada año que pasaba, incluso había recibido más de cinco cartas por parte de su madre y su padre, pidiendo que por favor se alejara de Potter y dejara de meterse en tantos problemas. Aún recordaba los sucesos que se dieron en su primer y segundo año de escuela, todos tan memorables que eran casi imposibles de olvidar, sin importarle mucho lo que sus padres decían, ella verdaderamente disfrutaba de la compañía de sus tres amigos además de que las risas nunca faltaba en ese cuarteto. Amaba pasar horas hablando con Harry, estudiar con Hermione y disfrutar de una buena comida con Ron, la familia de este último había sido un amor cuando la invitaron a pasar un tiempo en la madriguera, conociendo mucho mejor a gran parte de la familia Weasley.