Capítulo 25 - Llorar no es un signo de debilidad

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– Llorar no es un signo de debilidad. Es una señal de que has hecho todo lo posible para mantenerte fuerte durante demasiado tiempo-

Anteriormente...

Off asintió con la cabeza. "Por supuesto amor, te prometí que te protegería y juro que resolveré esto y juro que amaré a esos cachorros tanto como amo a nuestros cinco cachorros".

"Gracias Off, muchas gracias" Gun sollozó, su Alfa era lo mejor que podía haber deseado y lo único que desea en este momento es estar con Off para siempre. Los dos se abrazaron y susurraron dulces palabras mientras durara su sueño, por supuesto, cuando se despertaron, lloraron en silencio. Sus sueños terminaron demasiado rápido para su gusto, si dependiera de ellos, entonces ambos querrían soñar por la eternidad para poder estar juntos para siempre...

**

Gun se despertó nuevamente con lágrimas en los ojos porque una vez más sus sueños llegaron a su fin. Joss todavía estaba acostado detrás de él y sus cachorros aún dormían contra su pecho. Así que solo pudo acurrucarse nuevamente con sus cachorros y quedarse dormido.

Se despertó de nuevo no mucho después de quedarse dormido debido a los gemidos de Pim por él. "Haz que se calle". Joss gruñó desde detrás de él, nadie les dice a sus cachorros que se callen. "Lo mismo para ti", gruñó, ganando otro gruñido de advertencia por parte de Joss pero no le importaba.

Cambió a su forma de lobo para que Pim pudiera comenzar a alimentarse primero, pronto fue seguida por el resto de los cachorros. Después de que terminaron, acomodó a sus cachorros, los olió y volvió a su forma humana. Su suministro de alimentos se había agotado, por lo que tendría que pedirle a Joss que fuera a buscar más. "¿Alfa?", Murmuró.

Joss gimió cuando levantó la vista. ''¿Qué?''

"Uhm, bueno, mi suministro de alimentos se ha agotado..."

Joss sonrió de lado. ''¿Así, y que?''

"Oh, vamos, sabes que quiero que vayas a buscar más". Gun también gimió, odia jugar estos juegos con Joss. "Bien, ¿qué quieres?" Gun lo fulminó con la mirada.

"Hmm, depende de lo que estés ofreciendo..."

"Depende de lo que traigas".

Joss dio otro gruñido de advertencia. "No vayas demasiado lejos, Omega".

"Bien, si no cazas, lo haré yo mismo", dijo Gun en el calor del momento, no puede cazar porque no puede dejar a los cachorros.

"No se te permite salir de la guarida", respondió Joss. "No mientras estés embarazado de mis cachorros, te quedarás adentro donde sea seguro".

"No estoy planeando ir a algún lado de todos modos, pero te das cuenta de que tengo leche que producir y además tengo que alimentar a tus cachorros no nacidos, así que ve a cazar".

"Iré, si te arrodillas ahora mismo para que pueda follarte".

"Puedes hacer eso después de cazar, usa tu energía para atrapar algo grande". Gun argumentó, pues no se arrodillará. Bueno, tal vez si realmente no tiene otra opción, ya que necesita comida, pero no caerá sin luchar.

''Ahora''

''No''

"Gun..." Joss advirtió.

"No, eres el jodido Alfa, ¿verdad?, ¡El Alfa se encarga del Omega, así que mueve tu flojo trasero y ve a cazar!", gritó Gun mientras señalaba la entrada de la guarida con una cara severa, aunque eso pronto se convirtió en miedo cuando vio la ira en los ojos de Joss.

"Ven aquí, ahora" rugió Joss.

Gun gimió y sacudió la cabeza, no. "N-No"

"¡Aquí ahora!", gritó una vez más, obligando a Gun a escuchar su orden. Gun caminó lentamente hacia el Alfa que lo tiró al suelo e inmediatamente usó su cuerpo nuevamente. "Estás recibiendo un castigo leve hoy solo por la buena noticia de que estás embarazado, pero arremete así una vez más y no te daré de comer durante toda una semana, ¿está claro?" Joss gruñó en su oído después de anudar firmemente a Gun.

Gun asintió con la cabeza, últimamente ya no lloraba ni rogaba. Joss no merecía sus lágrimas. "Sí, Alfa", respondió, quiere volver a dormir para poder sentir a Off nuevamente, verlo de nuevo y oler a su Alfa, aquel que lo cuidó, lo protegió, lo proveyó e hizo todo lo que pudo por él para hacerlo sonreír.

Ya no puede seguir así, no puede cuidar a sus cachorros sintiéndose así, la sensación de solo querer dormir para siempre y nunca despertarse. No puede intentar sonreír todos los días para mejorar las cosas, pero no lo hace, nada mejora, nunca lo hará. La vida es una perra y lo ha jodido muchas veces en este momento, acostumbrarse una y otra vez y quedar embarazado por quien lo usa probablemente no sea lo peor que le pueda pasar. Está cansado de todo, cansado de estar aquí, cansado de tratar de mantenerse positivo. Pero aunque Joss no merece sus lágrimas, la idea de no volver a ver a Off nunca más, nunca tocarlo nuevamente, lo hizo llorar.

"Deja de llorar Gun", ordenó Joss. "Llorar solo te hace ver aún más débil, no resolverá nada".

Gun se rió desesperadamente: "Llorar no es un signo de debilidad, es una señal de que has hecho todo lo posible para mantenerte fuerte durante demasiado tiempo", dijo Gun. "A veces un buen llanto cura lo que una buena risa no puede".

Joss gimió. "Estúpidas citas tuyas".

"A mi madre le gustaban las citas y siempre me decía las que más le gustaban, honestamente, han sido valiosas lecciones de vida para mí". Gun ni siquiera sabía por qué le dijo eso a Joss a quien no podía importarle menos.

''¿Tú mamá?, probablemente la extrañes, ya que no puedes salir de esta isla".

"Sí, aunque ella murió cuando yo tenía doce años". Gun sollozó, su madre y él eran muy unidos. Ella no solo era su madre, sino también su mejor amiga, alguien a quien podía contar todo lo que le molestaba.

"No era vieja entonces, ¿por qué murió?", preguntó Joss.

"Estaba muy enferma..." Gun susurró, recordó el día que le habló y la abrazó por última vez. ''Sabes, ella sintió que iba a morir. De alguna manera, ella sabía que su tiempo se había acabado pero nunca quiso eso, todavía no estaba lista para morir. El día antes de morir, lloró y lloró mientras se aferraba a mí, sabía que no iba a despertarse a la mañana siguiente, pero, por supuesto, no dijo eso cuando nos separamos por última vez. Solo me dijo cuánto me amaba siempre con lágrimas en los ojos". Gun hizo una pausa para sorber sus lágrimas, recordando que su madre siempre será una de las cosas más difíciles de hablar en su vida. "Ya sabes... Una de las cosas más tristes del mundo es ver llorar a tu madre".

"Fuiste muy cercano a ella, ¿verdad?", preguntó Joss y Gun simplemente tarareó como respuesta.

"Mi madre también murió, pero fue asesinado en la pelea entre las manadas".

Honestamente, Gun no podía sentir ninguna simpatía por él, si su madre era un Omega, entonces probablemente lo estaban usando como una prostituta, por lo que morir probablemente sería una salvación para él. El nudo de Joss se desinfló y se retiró. "Bueno, entonces voy a cazar, ¿algo que prefieras?"

"Ciervos o conejos".

"Entendido", dijo Joss antes de moverse y salir corriendo de la guarida para cazar.

Gun suspiró antes de abrir una pequeña botella con un poco de crema que recibió de Dararat . Ella dijo que lo aplicara a sus heridas para que sanaran más rápido. Después de hacer eso, lo ocultó nuevamente para que Joss no lo encontrara y se lo quitara. Esta crema es la mejor, solo aplícala y al día siguiente ya no sientes nada. Gun se recostó con sus cachorros para cerrar los ojos por un momento, con la esperanza de que volvería a soñar con Off.

























EN LO SALVAJE - OFFGUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora