Nuestro amor imposible(Lola Índigo y Belén Aguilera)

Capítulo 7

...

Aitana pasó la mitad de la noche llorando y Mimi consolándola, esta última se despertó con algo de sueño miró la hora y vio que eran las 12 , se levantó rápido y vio que Aitana no estaba en la cama, y fue hacia el salón, como hay tampoco estaba fue hacia la cocina, y ahí estaba.

-Buenos días.-Le dijo Aitana.

-Es muy tarde, desayuno y me voy.-Dijo abrazándola.

-Vale.

Y eso mismo hizo, Mimi volvió a su casa para cambiarse, se puso un top blanco y unos leggins de cuero, se peinó y decidió dejarse el pelo suelto, luego se echó rímel y algo de pintalabios, le pasó la ubicación a Belén de un bar al que solía ir, cogió el coche y fue hacia allí, cuando llegó saludó a Rafa, el camarero, que ya era su amigo, pues llevaba 4 años viviendo en Madrid y le conocía desde entonces, se sentó en una mesa que estaba cerca de la puerta, diez minutos después Belén llegó y Mimi se levantó, esta la saludó y cuando la pelirroja se fue a sentar llegó Rafa con la cerveza que la rubia le había pedido.

-¿Belén?.-Dijo este.

La pelirroja le saludó ilusionada.

-¿Os conocéis?.-Preguntó la rubia.

-Sí, es como mi mejor amiga, desde que teníamos 14 años.-Dijo Rafa riendo-Íbamos al mismo instituto en Barcelona, luego yo me mudé a los 18 a Madrid, y ella vino después.

-Ponme otra caña a mi porfa.-Dijo Belén, Rafa se fue a por esa caña-Mierda, se me ha olvidado la sudadera en casa.

-¿Esto es una excusa para que vaya a tu casa?.-Dijo la rubia.

-Sí, justamente es eso, oye, ¿Siempre eres así de creída o es solo conmigo?.

-Es solo contigo.-Dijo pícara.

Después de ese conversación hablaron más y se tomaron dos o tres cervezas más.

-Bueno Rafa, nos vamos.-Se despidieron las dos-¿Entonces vienes a mi casa y te doy la sudadera?.-Preguntó Belén.

-Bueno, si insistes voy a tu casa vale.

Las dos chicas rieron, parecía que Belén ya se había acostumbrado a las bromas de la rubia, cundo salieron de aquel bar, iban a coger el coche de Mimi, cuando esta vio a su prima pequeña frente a ellas, la morena miro a las dos de arriba a abajo, luego miró a la rubia con cara de decepción.

-Aitana escucha.-Dijo Mimi, cuando su prima estaba apunto de irse.

-¿Qué coño quieres que escuche Mimi?.

-Este no es el lugar para discutir.

-Tienes razón, pero voy a decir yo cuando hablar, porque estoy harta de que todo el mundo decida por mi, hasta que yo no quiera no me hables.

-Pero.-La rubia no pudo acabar la frase porque su prima ya se había ido.

-Bueno, sino me voy yo a mi casa...-Intentó decir Belén.

-No.-Dijo rápido Mimi-Por favor no me dejes sola ahora.

-Bueno, vale, vamos a mi casa, pero mejor nos cogemos un Uber, que has bebido.

-Solo he bebido tres cañas.

-Cuatro.-La corrigió-Vamos a mi casa, son mis condiciones.

Al final la rubia aceptó, se fueron en Uber, subieron a la casa de Belén.

-Bueno, pues esta es mi casa, para una sola está bien, además tengo dos habitaciones por si algún día alguien viene a dormir, mis padres o amigos.

-Está bien.-Dijo Mimi sonriendo.