Capitulo Único

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Narrador Omnisciente

Kyojuro espe-- - hablaba un pelirosa de no más 15 años siendo interrumpido por un joven de su misma edad con cabellera flamante.

Entiende por favor jóven Soyama... NO ME GUSTAS, ni me atraes en qué forma o idioma te lo explico para que me dejes de seguirme o acosarme por favor ya... ¡¡¡DEJAME EN PAZ!!!-exclamo el rubio con melena de llamarada para luego irse corriendo del salón dejando a un solo y triste Soyama con sus ojos cristalinos.

Era la undécima vez que Rengoku Kyojuro el alumno más popular de la preparatoria Kimetsu no yaiba rechazaba a Akaza pero claro el rubio sabía que el pelirosa no se rendía por algo era la undécima vez qué lo rechazaba.

Los chismosos que estaban cerca del salón empezaron a murmurar entre ellos, algunos se reían, otros simplemente decía de Akaza debía rendirse ya que "el no estaba a la altura de Rengoku Kyojuro", y otros bueno... solo estaban por curiosidad, pero obviamente también había algunos que miraban con odio y desprecio a nuestro pelirosa, claro ellos no miraban a Akaza de ese modo por qué tuvieran un interés amoroso con el Rengoku o algo parecido, no de echo lo admiraban mucho pero la presencia de Akaza los llenaba de ira debido a que molestaba a su amigo y actuarían para alejarlo de este....

Las clases transcurrieron normal como todos los días y llegó para muchos la hora más esperada... Exacto la "HORA DE SALIDA" dónde podías volver a tu casa para hacer lo que se te antoje, claro si no te tocaba estar de esperansita...

Bueno no nos desviemos de la historia...

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Akaza salía con dirección a su hogar, para su mala suerte las nubes empezaban a juntarse y oscurecerse lo que significaba que llovería fuertemente por lo que optó por tomar un atajo que estaba cruzando un callejón oscuro pero al pelirosa no le infudía temor aquel callejón... por ahora.

Cuando Akaza llegó al callejón se topo con varios chicos con armas tales como: bates y palos, Akaza no temía pelear con ellos y se lanzó atacar a todos dejando su mochila a un lado, sin embargo estos eran demasiados incluso para un genio en el karate como Akaza y luego de un rato debido al agotamiento el pelirosa recibió el golpe de un bate en su espalda dejandolo en suelo mientras todos lo golpeaban aprovechando que estaba en el suelo.

Luego de un rato de estar golpeando como piñata además de dejarlo muy herido, el pelirosa levanto su cabeza para fijar su mirada en un joven de melena flamante que estaba al final del callejón...

El chico de las llamas estaba confundido y sorprendido de ver Akaza en el piso y muy golpeado al punto de estar sangrando tanto por la cabeza como también por la nariz y su boca.

Kyojuro... -susurraba débilmente el pelirosa para estirar su brazo en busca de ayuda - por... favor ayú-ayúdame...

Después de pedir ayuda lágrimas finas y transparentes caían por los hermosos ojos azules de nuestro bello Akaza.

Sin embargo para sorpresa de Akaza el rubio flamante esquivo su petición y se marchó por otro camino para llegar a su hogar, y es que este tenía la leve esperanza de que el Soyama lo dejara en paz después de eso... y por supuesto funciono pero no de la manera que Kyojuro esperaba o quisiera, dejando a la suerte al Soyama menor, mientras esté no dejaba de derramar lágrimas por sus mejillas.

El grupo de estudiantes con los bates y palos salieron del trance del suceso recién ocurrido para seguir con su "misión" para alejar al Soyama del Rengoku.

Luego de casi dejarlo inconsciente y su ropa estuviera ensangrentada un chico aún no complacido con esto agarro al pelirosa del cuello y lo lanzó fuertemente haciendo que su cabeza chocara con una pared manchando la de sangre y ala vez dejandolo inconsciente y al borde de la muerte.

×°Akaza recuerdame°×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora