One

1.5K 52 2
                                    

Me gusta sentir los rayos del sol pegando en mi cuerpo, sobre todo después de haber tenido una mañana muy detestable, cierro los ojos sintiendo como alguien decide cerrar aquellas lujosas "cortinas" para detener la entrada a la luz del sol, gruño un poco para dar un vistazo a la grandiosa persona que se le ocurrió terminar con la poca paz que tenía.

-¿Y bien? - realmente es detestable ver esa expresión de enojo en su rostro, me da que hay una mala noticia, y claro que estoy consiente de lo que reclamará, pero esta vez puedo justificarme porque realmente no es mi día

-Quita esa cara de malhumorado - me doy cuenta en cómo bufa un poco y comienza a reclamar

-No estuviste en la junta, sabes lo importante que es, realmente debes de estar agradecido con tenerme como tú mano derecha en tu empresa, o creeme que ya - no lo dejo terminar, esa frase me la sé de memoria

-Estaría en bancaronta, lo sé Darío - me acomodo mejor en mi asiento para mirarlo fijamente - pero esta vez puedo justificarlo

- bien - me consentro en mirar sus acciones, ver como toma asiento frente al mueble de descanso que mantengo del otro lado de la oficina, quedando a la vista desde mi escritorio - ¿Que excusa tienes ahora? - alzando una ceja

-Mi mañana no fue la mejor, ninguna lo es - retracto al ver su rostro - pero esta vez mucho peor, derramé accidentalmente mi licuado verde en mi traje, así que tuve que cambiarme nuevamente, salí para subir a mi coche pero me di cuenta que una de las llantas estaba ponchada, tuve que llamar a alguien para que la cambiara y digamos que demoró demasiado, y sabes tú el tráfico que se hace después de las 8 - extiendo un poco mis brazos, en significado de liberación

-Si tan solo te hubieras levantado más temprano, no hubiese ningún problema - suspira lentamente- pero no hay problema, pude solucionar todo en aquella junta con los inversionistas y aceptaron tu propuesta - nuestras sonrisas se dibujan en nuestros rostros - los tienes Theo, lo lograste - hace una pequeña pausa- una vez más

-Sabía que podía contar contigo - lo miro agradecido - Y no hablo solo de esta victoria, me refiero desde el comienzo de todo esto - refiriéndome a la empresa -

- Yo estoy muy agradecido contigo, me salvaste demasiadas veces y sabías los problemas que tuve antes de conocerte y no me juzgaste, al contrario, me diste una oportunidad de cambiar y creeme que eso jamás se me olvidará

sonrío una vez más y veo cómo se levanta del mueble para caminar a la puerta

-Ahora - vuelve a la misma expresión seria- sigue trabajando - me sonríe antes de salir

Mi vista se dirije a la computadora para seguir revisando algunos archivos y correos pendientes que tengo.

(....)


-Escucha Theo, hoy hay una fiesta, al menos deja de ser ese amargado empresario - aleja todo el papeleo que hay en mi escritorio - y diviértete, disfruta de tu juventud

-Alerek, entiende porfavor - intento tomar nuevamente los papeles que estaban sobre mi escritorio, pero son alejados rápidamente por el chico - tengo que trabajar, yo no tengo tiempo para esas cosas - lo miro a los ojos

-Pero no estás anciano, en cambio cuando lo estés ya será muy tarde para arrepentirte por no ir a otro lugar que no sea tu empresa -

Alerek es un chico de 15 años, vive a unas cuantas casas de la mía, yo me encargo de cuidarlo todas las tardes mientras sus padres como siempre se la viven viajando por "trabajo".

- ya lo sé, tener tan solo 21 años no es estar anciano - sonrío un poco - pero me saldrán arrugas si tu no dejas de hacerme enojar - entrecierra mis ojos

-Vamos, anda, si no te agrada esta fiesta, prometo que no mencionaré nada de este tema después - su leve puchero y esos ojitos de cachorrito son inevitablemente negadores

-Lo siento, pero mi respuesta sigue siendo no, así que ya dame eso, tengo que terminar demasiadas cosas, así que ve mejor con Meredith y dile que te sirva la comida - demando sin verlo a los ojos, con solo escuchar mi voz en tono serio puedo controlarlo

-Bien - molesto deja los papeles en mi escritorio - sigue hechando a perder tu vida - sale molesto de mi oficina, hago una pequeña mueca y bufo.

¿Realmente tiene razón? He luchado demasiado para lograr sacar adelante mi empresa que con esfuerzo me costó llegar hasta donde estoy, aunque puedo decir que se hizo reconocida más rápido de lo que esperaba, muchos al inicio no confiaron en mí, y sinceramente ni yo lo hubiera hecho si de pronto llegara un chico de 19 años con esa dichosa idea de ser alguien reconocido con su propia mercancía.

Decidido, salgo de mi oficina y me dirijo a la cocina, Alerek se reusa a comer en el comedor, prefiere seguir metiéndose en la cocina, dice que sólo así puede seguir manteniendo esa humildad en el y la gran persona que es, la verdad no he querido tocar ese tema tanto con el, tiene esas ideas que sé poco a poco le harán dar cuenta que es lo que realmente te hace ser humilde y buena persona, llego y antes de abrir la puerta me quedo escuchando su conversación con Meredith (podría decirse que antes era solo la persona que contraté para que se encargara de la casa, pero que ahora con el tiempo se ha hecho más que eso, es como una madre para mi).

-Entonces ¿lo lograste?  - la pregunta de Meredith me hace confundir

-No, me rindo a que quiera tener también una vida que no solo se base en su trabajo, me preocupa que termine como un viejo amargado que deteste a mis futuros hijos - comienzo a reír un poco ante su suposición -

-Pues estás en lo incorrecto - me decido a entrar- bien, si quieres que vaya a esa dichosa fiesta, dame la dirección, solo espero no sea de esos adolescentes que no se saben controlar

-Prometo que no es eso - una sonrisa se dibuja en su rostro - verás que nos la pasaremos muy bien

-Ey, quise decir que yo iré, tu te quedarás - nuevamente hace el mismo puchero- lo que deseas es verme disfrutar esa fiesta pero no puedo hacerlo si te llevo

-Bien, tu ganas - vuelve a su expresión normal- pero promete que te divertirás-  solo asiento y me dirijo a la puerta nuevamente para regresar a mi trabajo, cierro las puertas tras de mi

-Yo creo que Theo ya necesita una pareja, se que se siente solo

- Pero que cosas dices Alerek

-Vamos Meredith, no niegues que piensas lo mismo que yo

-Bueno, puede que tengas un poco de razón, pero debemos darle tiempo al tiempo, el se dará cuenta por si solo que el trabajo no lo es todo en la vida - la escucho suspirar

Me alejo rápidamente de la puerta al escuchar unos pasos acercarse, a paso apresurado me dirijo de nueva cuenta a mi oficina.

The love of your life or your soulmateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora