Undisclosed desires | Oswald Cobblepot X Reader [Editing]

¿Así es como se siente morir?

Mi corazón latía tan fuerte que tenía la impresión de que todas las personas a mi alrededor podían escucharlo. No quería mostrar señales de debilidad, pero el ritmo de mis latidos era algo que definitivamente no podía controlar. Intenté llevar mi mente a mi lugar feliz donde solo existíamos Oswald y yo. Sonreí e inmediatamente después sentí la camioneta frenar de golpe. Mi frente impactó contra uno de los vidrios dejándome completamente aturdida. No tuve tiempo a reaccionar, solo sentí mi cuerpo siendo arrastrado del vehículo mientras perdía la consciencia. 

No tengo idea cuánto tiempo pasó hasta que abrí los ojos pero ya había caído la noche. Estaba con los brazos en alto esposada a unos caños y frente a mí, Theo Galavan sentado en un sillón, observándome mientras tomaba una copa de vino. 

- (Tu nombre), qué bueno que finalmente estás despierta. Espero que estés cómoda.

Le lancé mi sonrisa más odiosa. Se acercó hacia mí, todavía con su copa en la mano y me tomó por el mentón. 

- Realmente sos un misterio para mí.

- ¿Ah, sí? Le dije moviendo la cara, intentando liberarme de sus manos. 

- Mientras me recuperaba de la puñalada que me diste, muchas gracias, por cierto; te estuve investigando.

- ¡Qué vida tan interesante! -Respondí con ironía. Recibí una cachetada casi automática. Me reí. 

- Tu vida sí es muy interesante, sin dudas. Una pobre huerfanita salida de The Narrows que hoy en día tiene una fortuna más grande que la del mismísimo Bruce Wayne. 

Está vez me reí satisfecha. Todo lo que había logrado en mi vida había sido sin la ayuda de nadie. Me había hecho a mí misma y eso me hacía sentir muy orgullosa.

- Desenterrar muertos y sacar a la luz secretitos oscuros es parte de mi trabajo como político y creeme, soy muy bueno en ello. Aun así, no pude encontrar ni un solo rastro de tus negocios con Cobblepot. Sos muy buena, (tu nombre). Y como yo soy un hombre muy generoso, estoy dispuesto a perdonar tu pequeño 'desliz' a cambio de que trabajes para mí.

¿Mis negocios con Cobblepot? ¿Este idiota realmente pensaba que yo estaba metida en los negocios de Oswald? No lo pude evitar y largué una carcajada tan fuerte que casi me meo encima. A Galavan no le gustó nada mi reacción, me tomó por el cuello y empezó a ahorcarme. Internamente rogué que dejara de hacer eso porque me gustaba demasiado y no quería que mi cuerpo me traicionara. Intenté hablar pero no me salieron las palabras. Galavan me soltó.

- Antes de trabajar para alguien tan despreciable como vos prefiero que me mates.

- Me duele que pienses que soy más despreciable que Cobblepot. -Dijo fingiendo estar muy afectado por mis palabras- De todos los matones que hay en Gotham te fuiste a asociar con el más bajo y no entiendo porqué.

- Vos no, hermanito, pero yo sí.

Por la puerta entró una mujer morena de pelo largo vestida con un catsuit de cuero negro que remarcaba sus curvas. Tenía un cuerpo tan exuberante que no pude evitar observarla con admiración. Era mi tipo.

- Tabitha...

- Hola, hermanito. -Lo saludó con un beso rápido en la mejilla- El problema de ustedes los hombres es que piensan que todo en esta vida es dinero, poder, influencia... pero no. ¿No es así, (tu nombre)?

Sonreí y me dolió la cara. La cachetada de Galavan se empezaba a sentir.

- Theo, esta mujer no tiene negocios con Cobblepot. Simplemente está enamorada de él.

- ¡Pero qué estupideces estás diciendo, Tabitha! -Exclamó Theo incrédulo.

- Pensalo. ¿Por qué una mujer rica e influyente iba a apuñalar a un político de alto perfil para entregárselo a un mafioso en bandeja de plata? ¿Qué tenía para ganar en todo esto? Ustedes ni siquiera se conocían, no es algo personal. (Tu nombre) no es más que una manipuladora jugando a la heroína. Salvar a la madre del pingüino era la puerta de entrada para ganarse su corazón. ¿No es así? -Se dirigió hacia mí.