— Buena suerte hoy — Jisung dejó un beso suave sobre su mejilla, se alejó para comodar el cuello de la camisa que Changbin llevaba, para que quedara recto —, aunque no la necesitas, amor.
Ese día tenía finalmente la presentación de su libro, aquella antología en conjunto, parecía que era ayer que el joven rosita había aparecido en su casa para inspirarlo con su amor.
Sería en una librería local, y le había pedido a Jisung que no lo acompañara, ya que una alucinación lo iba a distraer demasiado de la realidad, necesitaba estar atento, leer y firmar libros.
Jisung se había puesto triste al respecto, Changbin lo había notado, pero no había nada que pudiera hacer, sabía que por su bien, para no quedar mal ante el público si llegaba a hablarle a la nada, lo mejor era que el menor se quedara en casa.
— Eso casi sonó como una frase normal, sin rima — dijo Changbin, con una risita, las manos de Jisung se detuvieron casi de inmediato.
— ¿Por qué no le gustan mis rimas? — preguntó Jisung, inseguro, Changbin solía comentar sobre sus rimas cada tanto, y al pelirrosa no le gustaba que a Changbin no le gustarán, sus ojitos rotos lo miraron— Yo las amo pero a veces me desanimas— la última parte lo había dicho muy bajo, Changbin alzó las cejas ante aquella confesión.
Sabía desde hacía tiempo que había unas cuantas penas cargando en el puro corazón de Jisung, pero nunca le había preguntado al respecto, y Jisung nunca había comentado nada.
— Jisung, no es lo que piensas, me encantan tus rimas — Changbin sonrió de forma sincera, sus manos fueron a las mejillas del pelirrosa, dejando mimos con sus pulgares, miró aquello roto que tenía en sus ojos —. Sólo que a veces pienso... Que sin ellas podríamos ser una pareja más normal.
El rostro del pelirrosa se iluminó con esas palabras, una sonrisa media triste se dibujo en sus labios.
—¿Pareja? Si me dice así de nuevo no habría queja.
Changbin rió un poco.
— ¿Te gusta que te diga "pareja"? — Jisung asintió, con una sonrisa emocionada en sus labios—. Bueno, creo que eres eso, Jisung, mi pareja — escuchó su risa alegre —. Una pareja muy bonita y que rima mucho— lo escuchó reír otra vez, y se inclinó hacia él para dejar un pequeño beso en sus labios.
— Las rimas son para que no me extrañe — dijo el pelirrosa —, para cuando mi ausencia dañe, escriba un poema y yo aún lo acompañe, aunque ya no esté a su lado.
Changbin frunció el ceño levemente.
—¿Por qué no estarías más a mi lado, Jisung? Llevo viéndote unos ocho meses o más y cada día parece que eres más real, no creo que algún día desaparezcas a esta altura... Estaré loco, seguro que sí, pero al menos feliz de tenerte a mi lado.
La sonrisa de Jisung tembló un poco, sus manos tomaron las del mayor.
— Por más que te ame, no me perteneces, y algún día vas a dejarme, porque has de encontrar a quien mereces— dijo —, y ese no soy yo, no en este mundo, y sé que te confundo, pero debes encontrarme en tu mundo, para perderme, así finalmente yo... cuando.
Changbin frunció el ceño aún más, no creía haber entendido, o no quería entender, cualquiera de aquellas dos opciones sabía que le iba a doler.
— Te amo, amor — murmuró Jisung, por segunda vez desde que lo conoció creyó ver lágrimas en sus ojos, pero fue interrumpido por un beso.
El pelirrosa había juntado sus labios de nuevo, con gusto amargo, el beso fue lento y más triste de lo que creía, su corazón no se aceleró a mil por hora como le era costumbre, y sus mejillas no se ruborizaron, por el contrario, su razón latió apretado por el nudo en su garganta, y sintió unas lágrimas en sus ojos también.
Al separar del beso, Jisung hizo su mejor esfuerzo para sonreír, Changbin lo abrazó porque sabía que lo necesitaba, el cuerpo delgado del menor era cálido para abrazar.
— Volveré pronto, ¿Si, amor? Y te traeré tu chocolate favorito. No, mejor, mira —Changbin miro el reloj en su celular, sonrió, su cabeza se había iluminado con una idea maravillosa—. Más o menos en dos horas y media, estaría por terminar la firma, así que puedes venir un rato al final— Changbin sonrió y Jisung también—, podemos ir a pasear por allí cuando termine y puedes ver libros, te compare el que quieras, Jisunggie— dijo, dejo otro pequeño beso en sus carnosos labios, al separarse, vio que sus ojitos rotos estaban más unidos —. Te quiero... Mucho. Te veo después, ¿Bien?
Con aquello Jisung se ruborizo con ganas, soltó una de sus risas de bebé que a Changbin tanto lo enamoraban, y con una sonrisa se despidió de él antes de cerrar la puerta que los separaba y partir hacia la librería.
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rhyming heart ✧ binsung ❜
RandomChangbin es un poeta solitario y un intento de escritor, Jisung es un misterioso chico que habla en rimas y aparece en su departamento. Juntos intentarán descubrir que es el amor, entre rimas. 𔘓 historia original : bluchi9 𔘓 portada/banner : vampe...